Foto: KIKE TABERNER.VALÈNCIA. Más papel para el barrio de El Carmen. En el número 10 de la plaza Mossen Sorell acaba de abrir sus puertas la librería de libros nuevos y de segunda mano Todos Contentos y Yo También. Un proyecto relacionado con La Batisfera de El Cabanyal tras el que se encuentran tres individuos: “Corey Eastwood, de Nueva York, que empezó a comprar y vender libros en las calles del Upper West Side hace casi dos décadas y cuyas aventuras libreras lo han llevado desde México hasta Grecia y ahora la encuentran dividiendo su tiempo entre España y Estados Unidos; Santiago Lemoine y Jose Fernandez Moujan —que se suma al dúo detrás de la Batisfera, nuestra librería en El Cabanyal— ambos de Buenos Aires, cuyas vidas como libreros comenzó hace casi quince años en la ilustre librería y editorial Notanpuan. De allí sus caminos se separaron —Santiago continuando su experiencia librera en la histórica Shakespeare and Co de París, entre otras, Jose sumergido en el mundo musical, baterista en los grupos de la escena under bonaerense PELS y La Perla Irregular— y ahora se reencuentran en Todos Contentos y Yo También. El nombre viene de una de las cantinas donde bebe el personaje principal de una de nuestras novelas favoritas, Bajo el Volcán, de Malcom Lowry”, explican desde la librería.
“Pero detrás de un proyecto así, claro, siempre hay un sinfín de personas más. Familias, parejas, amistades... dos personas esenciales han sido Nelly Cuellar Torres, responsable del diseño y la identidad gráfica de la librería, y Jean Luc Petit Debray, cuyas dotes arquitectónicas han mágicamente multiplicado los escasos treinta y cinco metros cuadrados del local”. La elección del barrio no ha sido casual. Antes de abrir La Batisfera, circa año 2018, les tentaba abrir en El Carmen. “Además de ser un barrio precioso, nos daba la sensación de ser un sitio con hambre de tener propuestas culturales más allá de lo gastronómico. Al enterarnos de que se traspasaba un bajo pequeñito enfrente del mercado de Mossen Sorell, no lo dudamos ni un momento”. A grandes rasgos, Todos Contentos y Yo También sigue el modelo de La Batisfera. “Pero dado que El Carmen ya cuenta con varias librerías excelentes, decidimos darle mayor énfasis a los libros de segunda mano. Dentro de lo que son los libros de segunda mano intentaremos destacarnos con algunas primeras ediciones y libros difíciles de conseguir. Además, al igual que en La Batisfera, contamos con buenas secciones bien nutridas en diferentes idiomas. De momento, en las estanterías de la librería se pueden encontrar volúmenes en inglés y francés.
Pese a que la librería ya está en funcionamiento, quedan, como siempre, pequeños matices que pulir. “Aunque la librería está abierta, todavía está en construcción. Faltan algunos muebles, libros, y unos cuantos detalles más. Según nuestra experiencia, las librerías son siempre un trabajo en progreso. El proceso de apertura ha sido más largo de lo planeado, como de costumbre. Han pasado casi tres meses desde que firmamos el contrato del bajo, pero al mismo tiempo ha sido divertido y repleto de aprendizajes. Primero nos ha tocado acondicionar el local a nuestro gusto —pintarlo, cambiar las luces, etc— y luego preparar la madera y montar las estanterías, con la ayuda invaluable del carpintero Ryan Godwin. Una vez hecho esto, llega la mejor parte: abrir las cajas de libros de segunda mano que hemos ido acumulando a lo largo de los últimos años que ya no entraban en la Batisfera, limpiarlos, catalogarlos, ponerles precio y encontrarles el sitio dentro de la librería. Las secciones aún no están del todo definidas, pero ya van tomando forma y color”.
“En cuanto a los libros nuevos, la idea es complementar nuestras secciones y crear algunas que son difíciles de mantener con libros de segunda mano. Sobre todo, libros infantiles y novelas gráficas. La selección de títulos está basada en nuestras lecturas y lo que queremos recomendar. Muy pronto también comenzaremos a traer libros de editoriales independientes de Argentina, Uruguay y Chile, y así darle un lugar en València a la literatura contemporánea de por allí”.
¿Está recuperando El Carmen su espíritu de barrio cultural con propuestas que tratan de combatir los aspectos más rancios de la turistificación? A las librerías Ramon Llull y La Primera, muy cercanas entre sí, se les suma Todos Contentos y Yo También. “La verdad es que dentro de lo que es El Carmen ha sido pura casualidad terminar tan cerca de Ramon Llull y La Primera, así como de Doctor Sax y la librería editorial La Araña. Sumandonos a las propuestas culturales de todos estos espacios, como talleres y charlas, nuestra idea es organizar ciclos de conciertos íntimos dentro la librería, que filmaremos y luego colgaremos en línea”.
La semana pasada, en Guía Hedonista, la publicación gastronómica de Valencia Plaza, se publicó un artículo sobre el mercado Mossen Sorell y la escasez de comunicación que tiene el centro de abastos. Los vendedores entrevistados echaban en falta propuestas de actividades y eventos que dinamizaran el mercado municipal, como las que hubo en años anteriores. La presencia de la librería puede ser una forma de paliar el desconocimiento que se tiene de él, como explica Santiago Lemoine. “Nos gustaría, además, organizar algún tipo de propuesta conjunta para el mercado de Mossen Sorell y las calles que lo rodean, ya que después de las obras de modernización parece haber sido abandonado a su suerte. La mitad de los puestos dentro están cerrados o en traspaso, y es una pena verlo así. Conciertos, mercadillos… es un espacio que podría prestarse para todo tipo de actividades”. Esta hibridación entre mercados municipales y cultura recuerda a iniciativas como Mercat2, creada por los colectivos La Mina y Barrejat.
“Nadie puede vivir sin amar” escribe Malcom Lowry en Bajo el volcán. Y aunque (casi) todo el mundo puede vivir sin leer, no se vive ni mucho menos, igual de bien.
