Manuel Mata. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA (EP). El vicesecretario general del PSPV, Manolo Mata, ha admitido este lunes que cuestiones como algunas declaraciones realizadas por miembros de Compromís sobre el 1-O pueden "enturbiar un poco" la relación en el seno del Consell del Botànic, aunque ha incidido en que esto no puede ser "un paréntesis de 20 años" y hay que seguir trabajando para que el PP no vuelva al poder en 2019.
Así lo ha indicado ante los medios al ser preguntado por el tuit lanzado por la vicepresidenta y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra, en el que aseguraba en relación al PSOE que "se abstuvieron en la investidura de @marianorajoy y ahora se abstienen de buscar una solución. Atado y bien atado", que no es sólo Oltra, sino que "mucha gente en Compromís hubiera preferido una actitud más contundente del PSOE criticando a Rajoy" como en el caso opuesto hubieran deseado "que Compromís hubiera tenido una actitud mucho más favorecedora a una solución en Cataluña".
"Hoy no puedo abrazar y besar a gente con la que ayer era más amable; a mí no me gusta nada que me insulten y no me gusta nada que insulten a dirigentes de mi partido, sobre todo porque yo no lo hago, y podría hacerlo a veces", ha señalado Mata.
Además, ha reconocido que están ante "una situación de altísima tensión" pero considera que "las pequeñas vanidades de la diferenciación o de las relaciones internas de los partidos no pueden enturbiar el Botànic".
El también portavoz socialista en las Corts ha criticado la "represión durísima contra los ciudadanos" de este domingo en Cataluña y ha indicado que tanto el presidente catalán, Carles Puigdemont, como el del Gobierno, Mariano Rajoy, "no están capacitados" para continuar. "Ojalá las fuerzas políticas sean capaces de dar una patada a los dos, tanto en Cataluña como en España", ha incidido, para responsabilizarles de la "brecha emocional" que han generado, que es "tremenda".
"Estamos mucho peor de lo que estábamos antes de ayer, ojalá los mecanismos parlamentarios permitan la censura a Rajoy", ha incidido, para poder vislumbrar una nueva etapa de "encaje" de Cataluña en España. " "No entendemos Cataluña sin España ni España sin Cataluña", ha incidido.
A su juicio, hubiera sido "sensato" que una vez se constató que el referéndum, suspendido por el Constitucional, era un "paripé" se hubieran retirado las fuerzas de seguridad del Estado, limitándose a no dar valor a las declaraciones de la Generalitat.
