VALÈNCIA (EP). El presidente del PP valenciano, Carlos Mazón, ha valorado los cuentas de la Generalitat para 2023 como una muestra de "desesperación electoral" y de que son los "antipresupuestos" necesarios para dar respuesta a la inflación, así como de la situación "agónica" del gobierno del Botànic de cara a las elecciones de mayo.
Por ello, Mazón ha avanzado que en Les Corts presentarán una "enmienda general" contra estos presupuestos durante su tramitación parlamentaria, aunque ha remarcado que apoyarán la reforma fiscal a pesar de considerarla "insuficiente y testimonial", y que posteriormente registrarán propuestas "una a una".
Así lo ha declarado tras un estudio "profundo y tranquilo" de los presupuestos junto al equipo de dirección del grupo 'popular', encabezado por su síndica, Mª José Catalá. El anteproyecto, aprobado el lunes por el pleno del Consell, asciende a 28.438 millones de euros, un 1,7% más que en 2022.
"Son unos presupuestos de precampaña de libro, que no se sostienen y suponen una vergüenza para la que está cayendo", ha criticado, rechazando especialmente la subida de "más de 3.000 euros al año a los 330 asesores y altos cargos incluido Ximo Puig" cuando la reforma fiscal "supone un ahorro anual de cien euros por persona en el mejor de los casos".
Una "burla" que Mazón ha ligado con la creación de nuevos impuestos, además de la tasa turística, a las grandes superficies, los vehículos a motor y la industria gasointensiva, junto al aumento de un 10% en "más de 4.500 tasas".
Todo ello cuando ha denunciado que los presupuestos del Botànic han quedado en los últimos siete años en "papel mojado" porque "no son capaces de ejecutar ni el 15%" de las inversiones proyectadas en las tres provincias.
A su juicio, son difíciles de creer los 600 millones proyectados para Alicante cuando su capital lleva "con los mismos tres centros de salud desde 2009 y el plan Vega Renhace para la recuperación de esta comarca de la DANA de 2019 no tiene "ningún tipo de avance".
Paralelamente, ha vuelto a quejarse del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 que "desprecia, ningunea y olvida a la Comunitat Valenciana", sobre todo en el caso de Alicante, mientras "elementos estratégicos para Valencia vuelven a dormir el sueño de los justos y hay un retroceso claro en la inversión en Castellón".
"Nadie es capaz de traer las alforjas de Madrid, de hablar con sus compañeros de partido", ha lamentado, y ha criticado que nadie del Consell vaya a sumarse a la manifestación convocada este jueves 3 por organizaciones empresariales en Alicante para mostrar su rechazo a los PGE. Es más, ha asegurado que "se han tomado la molestia de pedir a los convocantes que no la celebren".
Por otro lado, Mazón ha rechazado la afirmación del portavoz de Hacienda del PSPV, José Muñoz, de que como presidente de la Diputación de Alicante él está "entre los mejores pagados de España con casi 90.000 euros con complementos; más que el 'president' de la Generalitat".
"Cobramos lo que marca la ley", ha recalcado, y ha recordado que los presidentes de las diputaciones tienen marcado un tope a nivel nacional "desde hace tiempo" y que por cuarto año consecutivo en la corporación provincial no se va aplicar la subida de suelo a los funcionarios; "justo lo contrario que Ximo Puig".
En cuanto a Castellón, y al anuncio de Puig de que los presupuestos contemplan una inversión de 50 millones en ayudas directas al sector cerámico y otros 50 en créditos a largo plazo, el líder del PPCV le ha acusado de copiar sus propuestas "tarde y mal" y ha afirmado que de momento no han encontrado estas partidas en el anteproyecto.