Tras los fuertes movimientos vividos en las Bolsas en el mes de agosto, vemos ahora que los mercados de renta variable están cerca de recuperar los máximos que registraron a mediados de julio. En concreto, el S&P 500 se encuentra un 2% por debajo de esos valores. Eso sí, debemos tener varias cosas en cuenta sobre este reciente rebote en los mercados.
En primer lugar, el 8% de subida que lleva el SPX en las últimas 2 semanas es el mayor visto en casi 2 años. Además, el índice lleva ya 8 días consecutivos cerrando en positivo, algo muy inusual y visto por última vez hace 2 décadas. Por último, las 7 magníficas han subido un 12% y están ahora a tan solo un 7% de sus máximos de julio, mientras que el SPX sin las 7 magníficas está en máximos históricos.
Por tanto, a pesar de las fuertes y rápidas subidas experimentadas sí que existen diferencias notables. En EEUU, por ejemplo, las 7 magníficas se encuentran aún un 7% por debajo, y en Europa, concretamente, también encontramos valores asociados al sector tecnológico que tampoco han recuperado, como por ejemplo ASML.
También durante este período, que ha coincidido con presentación de resultados financieros, todos aquellos valores que defraudaron en la presentación todavía se encuentran por detrás de sus niveles previos, por lo que el castigo todavía es considerable. Aquí encontramos tanto valores de consumo, como Heineken, hasta valores de tipo industrial-logístico, como DHL, ampliamente penalizados.
Sin embargo, en términos de valoración, volvemos a niveles otra vez exigentes. Los múltiplos de valoración (especialmente en el mercado americano) eran elevados, dejando margen para caídas algo más abultadas. Tras las fuertes caídas el retroceso del PER fue inmediato. Sin embargo, a día de hoy, el nivel de exigencia del mercado vuelve a ser el mismo, por lo que nuevas decepciones en los indicadores de crecimiento económico podrían resultar en nuevos episodios de volatilidad.
Por lo tanto, debemos estar atentos a distintos hitos. Entre ellos, destaca la reunión de Jackson Hole de esta semana, donde los banqueros centrales pueden dar pistas de cómo ven la economía, y, sobre todo, si el ritmo de bajadas de tipos de interés previsto en EE.UU. es quizás demasiado a día de hoy y el fuerte movimiento bajista en las curvas podría parcialmente revertirse y afectar también a las valoraciones del mercado bursátil.
También debemos fijarnos en los resultados de NVDIA el 28 de agosto. Una de las razones por la que muchos valores tecnológicos no han recuperado sus niveles previos son también las dudas acerca de esta presentación.