Al grano: uno de los postres de mi vida. Un diez.
Descubrí “miel de almendras” en la barra de Vuelve Carolina, de la mano de Carito Lourenço, qué os voy a contar de Carito...
Vuelvo a encontrarme con esta joya en Beat, el restaurante gastronómico que ha puesto en pie junto a Germán Carrizo en The Cook Book en Calpe. Hablo con ella, ¡quiero saber!
“La idea de este postre surge hace algún tiempo ante un concurso del Basque Culinary Center en el que pedían como requisito que fuera un plato hecho con producto de la zona donde vives y poniendo en valor la misma.
Aquel era con dátiles, horchata y chufa y esta nueva versión que hemos creado para la carta de verano de Beat es con almendras. Jugamos con las texturas tiernas en un bizcocho aireado de almendras y amaretto; una crema montada de almendras crudas; almendras marconas que le damos un toque con leche de almendras para tiernizarlas y potenciar ese sabor puro de la almendra.
También lleva un crujiente con amaretti, que es un bizcocho seco típico italiano que lleva almendra tierna y almendra amarga, esto ayuda para dar contraste tanto en crujiente como en sabor.
Un punto importante de esta versión es el helado, fino, sutil, con un punto amargo también de las almendras y dulce y goloso del sirope de agave que le da aroma y estructura”.
En serio, lo de este postre no tiene nombre.