VALÈNCIA (EFE). La Plataforma de Afectadas por la Ley de Dependencia, denuncia que las mujeres las mujeres con diversidad funcional están más expuestas a situaciones de violencia de género que las mujeres sin diversidad funcional.
Entre las situaciones que enfrentan están la falta de información y dificultad para acceder a los recursos formales frente a la violencia de género; la falta o poca credibilidad que tienen cuando deciden desvelar su situación; el miedo a perder a su cuidador, del que muchas veces, dependen para las actividades básicas de la vida diaria y que además es su agresor, han informado este sábado.
De manera complementaria, según el Informe de la Fundación ONCE, Ojo al Dato. Visibilidad de una realidad a través del dato: mujer, discapacidad y violencia, el 40,4 % de las mujeres con discapacidad sufren violencia de género, frente al 32 % de las mujeres sin discapacidad.
Un 57,6 % de las mujeres que participaron en el estudio (1.600 mujeres con discapacidad) han indicado que la discapacidad es previa a la violencia de género sufrida, frente al 27,6 % que afirma es consecuencia de la violencia vivida y el 13,4 % señala que su salud ha empeorado como consecuencia de la violencia.
El informe concluye que las mujeres con discapacidad tienen un alto riesgo de sufrir violencia de género y encuentran barreras para acceder a los recursos y servicios de atención y urgen a tomar acciones inmediatas.
Ademas, señala que es necesario mejorar la sensibilización, detección y coordinación para atender las necesidades específicas de las mujeres con discapacidad que sufren violencia de género.
Para ello, la plataforma considera que la herramienta de la Asistencia Personal es preventiva ya que son ellas las que eligen quien les asiste y los apoyos que requiere, manteniendo la autonomía y el empoderamiento necesarios para evitar la violencia de género que se genera por la situación de dependencia del cuidador familiar o pareja, así como que, también permite la huida en caso de emergencia.
Destacan la importancia de la participación activa de las mujeres con discapacidad en la toma de decisiones y en la elaboración de políticas públicas específicas y consideran "necesario implantar un protocolo específico de huida y acompañamiento en los casos de emergencia por razón de violencia de género que sufren las mujeres con diversidad funcional".
Estos protocolos deben tener en cuenta la heterogeneidad de las mujeres y sus necesidades específicas, sostienen.
Por todo ello, consideramos que para que exista un feminismo inclusivo que interpele a todas y a todos, "será imprescindible que las mujeres con diversidad funcional tengan voz propia y solo así estaremos peleando por una igualdad real".E