VALÈNCIA. El jazz tiene sus raíces, pero también sus ramificaciones. En Scarpetta, el nuevo proyecto del batería y compositor Karles Pérez, no solo se escuchan ecos del hard bop clásico de los años 60 y 90, sino también los latidos de una biografía. El sexteto que lidera recala este sábado 25 de octubre en Sedajazz (19:00h, Entrada Alquería Coca, 1, Valencia), en un concierto organizado por la asociación CultuJazz, con entradas a 12 euros. “Este disco es como rebañar un buen plato con pan”, confiesa Pérez, aludiendo al gesto italiano de fare la scarpetta, que da título al proyecto. No es una metáfora al azar. La pieza musical, como el pan que absorbe la salsa final, recoge retales de vida, momentos cocinados a fuego lento entre escenarios, ciudades y recuerdos personales.
Detrás de esta propuesta hay mucho más que virtuosismo: hay una conversación constante entre tradición y presente. Entre las referencias que alimentan el repertorio aparecen nombres como Roy Hargrove, Cedar Walton o Ralph Peterson. Pero también se intuye una búsqueda de identidad que se aleja del revival nostálgico y apuesta por un hard bop contemporáneo, de raíz pero no anclado.
El sexteto que acompaña a Pérez es una alineación de lujo: Víctor Carrascosa (trompeta), joven talento barcelonés formado en el Conservatori del Liceu y en el Jazzcampus de Basilea, ha colaborado con figuras como Jorge Rossy y Bill McHenry. Xavi Maldonado (saxo tenor), presencia habitual en la escena catalana, destaca por su expresividad y su flexibilidad estilística. Paco Soler (trombón), músico con una sólida trayectoria, ha compartido escenario con Lee Konitz y Perico Sambeat. Juan Galiardo (piano), formado en Berklee (Boston), es uno de los pianistas más respetados del circuito nacional. Xavi Castillo (contrabajo), músico y pedagogo, aporta profundidad y precisión con un pie en Barcelona y otro en La Haya. Karles Pérez, alicantino formado en Musikene, Graz y el Liceu, marca el pulso con una mezcla de contundencia, elegancia y una voz propia detrás de la batería.
