VALÈNCIA (EFE). Las personas residentes damnificadas por el incendio de Campanar, que el pasado 22 de febrero arrasó dos bloques de edificios en este barrio de València y causó 10 fallecidos, han constituido una asociación.
La entidad, constituida el pasado 6 de marzo y denominada Asociación Residentes Damnificados Incendio de Campanar (ARDIC), busca aglutinar "a todas aquellas personas que, siendo o no propietarias, tuvieran su residencia habitual efectiva en el edificio de la calle del Poeta Rafael Alberti, 2, el día 22 de febrero de 2024, cuando se produjo el trágico incendio" del inmueble.
Los vecinos entienden que es necesario disponer de un espacio que les permita desarrollar una actuación conjunta y organizada, en beneficio de todos los residentes en el edificio, y tener una interlocución más fluida y directa con las administraciones públicas y entidades a la hora de encauzar los asuntos de interés del colectivo, han informado en un comunicado.
Señalan que se trata de una asociación sin ánimo de lucro, democrática, abierta a todos los vecinos, que busca defender el interés de los que allí vivían y sufrieron los daños (personales o materiales) del incendio sin enfrentarse con ningún otro perjudicado o entidad.
Como ejemplo, indican que los propietarios que no tuvieran su residencia efectiva en la comunidad disponen, precisamente, de la comunidad de propietarios para defender sus intereses que, siendo muy respetables, no han de coincidir, necesariamente, con los de estos otros vecinos.
Por esta razón quieren, a través de este comunicado, presentarse como lo que son: "un conjunto de personas que, sin olvidarnos nunca de los vecinos que nos han dejado, tenemos la intención de defender nuestros derechos y rehacer nuestras vidas lo más rápido posible", afirman.