VALÈNCIA (EFE/Eva Batalla). Un grupo de profesionales de la educación, docentes, directores e inspectores educativos, convencidos de que un nuevo modelo pedagógico más inclusivo y de calidad es posible, se han unido en la asociación Edulab para aunar esfuerzos en la elaboración de unas guías que permitan a los centros mejorar su actividad educativa y adaptarla a su realidad.
A esta iniciativa, que parte de la Comunitat Valenciana pero está abierta a toda la comunidad educativa, se han adherido ya más de 600 personas, de toda España pero también del extranjero, con la misma inquietud de impulsar la renovación cultural, pedagógica y de gestión para la mejora continua de la enseñanza y la educación en general a través del diálogo entre los diferentes agentes.
"Edulab nace con el criterio de trabajar en equipo, en red y de una forma horizontal, con el objetivo de que cada miembro aporte su visión de cómo mejorar la actividad educativa con proyectos innovadores pero ajustados a la norma", explica a Efe Rafael Atienza, inspector de educación en el área de Manises-Xirivella (Valencia) y uno de los impulsores de este proyecto.
La inquietud de este grupo de profesionales de la educación, que surgió de un seminario de formación, parte de la sensación de "desánimo" en los centros educativos, que trabajan por la mejora del sistema educativo pero los resultados no son siempre los esperados.
El problema en los centros educativos no es la falta de innovación sino el exceso de proyectos, "inconexos, episódicos, fragmentados y engalanados de forma superflua" como advierte el profesor y experto en nuevas pedagogías, el inglés Michael Fullan, y este es el reto que se ha propuesto Edulab: "Crear modelos educativos basados en la evidencia científica y en criterios normativos", explica Atienza.
Para ello, indica, el grupo está dividido en veintiocho ámbitos educativos, que elaborarán modelos basados en estudios científicos que sirvan a los centros educativos de estrategia y orientación, ajustados a la normativa actual, en los que van a trabajar unos 60 profesionales de la educación.
A la propuesta se han sumado más de 600 personas, no solo de toda España sino también del extranjero, como Portugal y Perú, para hacer sus aportaciones y dar respuesta al sentimiento generalizado sobre la necesidad de "un cambio" en el sistema educativo, adaptado a las necesidades y demanda de la sociedad actual.
"La idea es que los centros se adapten a las necesidades sociales y a formar a ciudadanos competentes en las necesidades sociales que nos estamos encontrando", apunta Nuria Soler, también inspectora de educación y miembro de la asociación.
"Además de trabajar por la inclusión del alumnado hay que trabajar con metodologías activas, que el alumno sea el centro de aprendizaje y una parte activa de ese proceso", añade Soler, quien precisa que Edulab ofrecerá una serie de guías para trabajar en las aulas según las necesidades del alumnado.
La asociación defiende la necesidad de introducir en los centros educativos una cultura de "evaluación interna" que facilite anualmente la revisión del proyecto educativo y promueva su mejora, tanto de la respuesta educativa hacia el alumnado como al profesorado, desde el punto de vista pedagógico, como en la eficacia y eficiencia en la organización y gestión.
Para ello, Edulab se ofrecerá a los equipos directivos y al profesorado para implementar las actuaciones pedagógicas, organizativas y de gestión interna para fomentar la cultura de la formación continua y conseguir un proyecto educativo "inclusivo y de calidad" y el "desarrollo personal" del alumnado.
Atienza precisa que este trabajo tiene un fin orientativo, no formativo, y las guías se harán públicas en la página web de la asociación y será de acceso gratuito.
Su trabajo parte del alumno como "eje principal", desde el "acompañamiento a los centros" en el proceso de transformación para una mejora continua facilitando las herramientas para conseguirlo, además de ofrecer espacios de participación y trabajo "en red", convertirse en un punto de referencia de la innovación educativa y fomentar la innovación en la investigación científica internacional.
El proyecto, de momento, está centrado en Infantil y Primaria, pero aspira a ampliarse a Secundaria, donde están implementándose los nuevos modelos de aprendizaje.
"Lo que pretendemos es que tengan un proyecto educativo de centro y los docentes que vayan llegando se adecuen a la cultura de ese centro, ajustado a las características del alumnado y de la comunidad educativa con el fin de consolidar los proyectos educativos", concluye Soler.