La Generalitat abre a la ciudadanía nueve palacios emblemáticos para celebrar el 9 d'Octubre y que esta vuelva a ser "una fiesta de unidad y de cambio"
VALENCIA (EP). La Generalitat Valenciana abrirá este domingo a la ciudadanía nueve palacios "singulares e históricos" con motivo de la fiesta del 9 d'Octubre, día de la Comunitat Valenciana. Los edificios, que difícilmente pueden ser visitados, muestran el esplendor arquitectónico, artístico e histórico valenciano.
Además de las visitas guiadas al Palau de la Generalitat, los otros palacios que permanecerán abiertos al público para que pueda contemplarse parte del patrimonio de la ciudad, son el Palacio de los Almirantes de Aragón y Baños del Almirante, Palacio del Marqués de Campo o de los Berbedel, Palacio de Castellfort, Palacio de la Batlía, Palacio del Marqués de la Scala, Palacio d'en Bou, Palacio de los Català de Valeriola, Palacio de los Condes de Alpuente y Palacio del Marqués de Malferit.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que presentó este miércoles, la programación de las actividades con las que la Generalitat va a conmemorar este año el Día de la Comunitat Valenciana, afirmó que la intención del Consell con estas actividades culturales es que "este 9 d'Octubre vuelva a ser una fiesta de unidad y de cambio", además de "simbolizar la reivindicación y la voluntad de ser un pueblo, un pueblo moderno, activo y solidario".
Desde el jueves 1 de octubre y hasta el mismo día 9, se han programado distintas actividades culturales. Esta programación también comprende exposiciones de pintura, conciertos musicales, cuentacuentos, teatro de marionetas, espectáculos de danza y la lectura del Tirant Lo Blanch, y así hasta llegar al 9 d'Octubre, cuando se celebra el acto institucional y la entrega de las Altas Distinciones de la Generalitat Valenciana.
El Palau de la Generalitat es el edificio más emblemático de la Comunitat Valenciana, siendo sede de la primera y máxima institución de los valencianos. Su dilatado proceso de edificación es paralelo al de sus funciones como sede de diversas instituciones, lo que conlleva una mezcla de estilos que hace difícil su encasillamiento, según han explicado en el comunicado.
El Palacio de Castellfort actualmente es una de las sedes de la Presidencia de la Generalitat, edificio palaciego, construido por encargo de los marqueses de Castellfort, es la obra más importante del eclecticismo en Valencia.
En el barrio Seu-Xerea se encuentra uno los mejores ejemplos de palacios góticos valencianos, el Palacio de los Almirantes de Aragón. La fachada, del siglo XVIII, está dividida en sótano, entresuelo, planta noble y piso superior. Junto a este palacio se encuentran los Baños del Almirante que fueron utilizados hasta el siglo XX, durante el siglo XIX se realizó una restauración que le confirió un aspecto neoárabe.
Situado en la plaza del Arzobispo, se encuentra el Palacio del Marqués de Campo o de los Berbedel, fue sede de la Capitanía General. El Palacio de la Batlía, también conocido por el palacio de Jáudenes, es la actual sede de la Diputación de Valencia. El Palacio del Marqués de la Scala, situado junto al palacio de la Batlia y frente al de la Generalitat, perteneció a los Boíl, marqueses de la Scala y señores de Manises, que dieron nombre a la plaza.
Asimismo, el Palacio d'en Bou, de la familia en Bou que procede de un noble linaje catalán, cuyo fundador, Esteve Bou d'Urgell, vino con el rey Jaume I a la conquista de Valencia. El Palacio de los Català de Valeriola, al igual que muchas casas solariegas valencianas, son fruto de múltiples intervenciones, según las necesidades y los gustos de la época. El Palacio de los Condes de Alpuente es un edificio barroco del siglo XVIII, construido sobre un palacio gótico por la familia Hollier de Irlanda, cuya hija se caso con el II conde de Alpuente, del que toma su nombre.
Por último, el Palacio del Marqués de Malferit, antigua residencia de los marqueses de Malferit, es el palacio gótico mejor conservado de la calle de los Caballeros, en 1939 albergó el Arzobispado y hoy es la sede de L'Iber, Museo de los Soldaditos de Plomo.