VALENCIA. Sí, eres muy de sushi de buffet libre pero todavía no sabes que el sake no se bebe en formato de chupito al final del homenaje. Vas a un japonés pero cuando lees toro en la carta todavía piensas que es un animal con cuernos.
Es posible que creas que en Japón solo se alimentan de pescado, pero no, también les gustan mucho los encurtidos y los yakitoris, pinchos que también pueden ser de carne y verdura o que la base de muchas elaboraciones es el caldo dashi. Si encima no has leído nunca un manga, te gusta la gastronomía y te causa curiosidad leer de derecha a izquierda, Oishinbo A la carte es lectura imprescindible.
En España iniciaron su andadura en 2016 de la mano de Norma Editorial, aunque es una de las series más exitosas y longevas de la historia del cómic japonés, que lleva publicándose desde 1983, tiene más de 100 tomos y con guión de Tetsu Kariya y dibujo Akira Hanasaki.
Se trata de una serie de siete tomos dedicados a la comida japonesa, al sake, al ramen y gyoza, al corte del pescado, y las verduras -último tomo publicado-. En el mes de febrero llegará el de arroz y en marzo el de Izakaya, denominación para las tabernas japonesas.
El argumento trata sobre un periódico japonés, el Tōzai Shinbun. Para el centenario de la publicación, el director decide encargar a un par de periodistas la confección del “menú definitivo”. A partir de ahí Shirō Yamaoka y Yūko Kurita se pondrán a la tarea.
En escena aparece Yūzan Kaibara, padre de Yamaoka, un hombre extremadamente exigente con la comida y a quien culpa de haber "matado" a su madre por esta obsesión y con el que tendrá numerosos enfrentamiento. A partir de ahí se suceden descripciones de preparaciones, texturas, cuerpo de los alimentos, además de incluir un glosario de consulta con definiciones de ingredientes, platos y técnicas.
En definitiva, si te gusta la gastronomía léelo, si te gusta la cultura japonesa también es imprescindible y si quieres saber pedir en un japonés, también. Con formato de capítulos temáticos y conclusivos, es factible leerlo cuando se tengan unos minutos.
Cabe mencionar el otro manga gastronómico por excelencia, El gourmet Solitario, de Jirō Taniguchi - quien falleció esta semana-. Éste consta de una segunda parte, Paseos de un gourmet solitario, publicada en España el año pasado. Aunque este es mucho más conocido que Oishinbo, y los dos son de grata lectura, Tetsu Kariya recorre la gastronomía japonesa de una forma más detallada y técnica que el dibujante Jirō Taniguchi, aunque en este último las ilustraciones son más detalladas.
No obstante, no son incompatibles. Y si te gusta la gastronomía son dos títulos imprescindibles que te harán disfrutar de forma mucho más plena los manjares nipones y apreciar cada matiz, desde los cortes del pescado a intentar empeñarte en distinguir la pieza más sabrosa.