BARCELONA (EP). La vocal de la junta directiva de Òmnium Eulàlia Solé ha anunciado que las entidades soberanistas impulsarán a partir de este viernes distintas acciones pacíficas aunque diferentes de las manifestaciones en las calles: "Acciones mucho más directas, cosas que nos empoderen como consumidores".
Lo ha dicho este jueves en un acto de Universitats per la República, en el que también ha participado el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro; el miembro de Súmate y exdiputado de la CUP Antonio Baños, y la economista Elisenda Paluzie, entre otros.
Solé ha afirmado que harán las movilizaciones que hagan falta para proclamar la república catalana y que este tipo de acciones pueden ser efectivas porque al Estado y a la UE "les duele el bolsillo".
También ha reivindicado que la población catalana "ha votado con una serenidad y dignidad envidiable para muchos países del mundo", y ha reclamado que el Parlament declare la independencia de Cataluña lo más pronto posible.
Alcoberro ha sostenido que el contexto catalán y global "es inmejorable" para conseguir la independencia de Cataluña, ya que cree las relaciones económicas se basan en el mercado europeo y no en el español.
También ha asegurado que los estados funcionan cuando la mayoría de sus ciudadanos lo legitiman y que en Cataluña "una parte importantísima del pueblo se siente excluido, no se siente partícipe y no entiende que forme parte" del Estado español, de manera que cree que se desencadenará la independencia.
Alcoberro ha avisado de que, si hay más encarcelamientos como el del presidente de la ANC, Jordi Sànchez, y el de Òmnium, Jordi Cuixart, otros encabezarán las entidades: "Tenemos relevos. Mañana nos puede pasar a los que nos hemos puesto ahora. Nuestra cantera es el pueblo y siempre habrá gente dispuesta a ponerse en el sitio que toque hasta conseguir la victoria".
Ha reiterado que, a su juicio, la decisión judicial es política y ha alertado de que la Audiencia Nacional "es un auténtico monstruo desde el punto de vista de legitimidad jurídica, es el heredero del Tribunal de Orden Público franquista y tiene una función punitiva contra cualquier movimiento social y político".
Baños ha criticado que en el 2017 la población tenga que reivindicar "libertad presos políticos y fuera las fuerzas de ocupación", lo que ve una vergüenza y la evidencia de que en la Transición no cambiaron las instituciones.
Ha expresado la necesidad de ampliar el discurso independentista para sumar otros sectores al proceso constituyente y ha destacado que el proceso independentista "se ha petado la clase política autonomista y el poder judicial español".
Paluzie ha defendido que el referéndum del 1-O fue "una victoria electoral sin paliativos" y ha exigido que se convierta en una victoria política para proclamar la república catalana.