VALÈNCIA. El dispositivo especial que Ontinyent puso en marcha para vigilar el cumplimiento de la normativa anti-covid ha iniciado esta semana una serie de controles a los locales hosteleros de la ciudad. Concretamente, entre el martes y el miércoles, la Policía Local procedió a la inspección de 30 negocios, que finalmente se saldó con la imposición de cinco denuncias por incumplir la distancia de seguridad de las mesas en las terrazas.
Del mismo modo, los agentes también multaron a siete clientes o personas del entorno por no cumplir con la normativa del Gobierno de España y de la Conselleria de Sanidad en relación con el consumo de tabaco en la vía pública, y también por no llevar o hacer un uso indebido de la mascarilla.
Este dispositivo especial para el control y prevención de la pandemia ha supuesto el refuerzo de todos los turnos de la Policía Local, para que haya más agentes disponibles tanto en el núcleo urbano como en el diseminado. "La medida está dando sus frutos", declaraba el regidor de Seguridad del Ayuntamiento de Ontinyent, Pepe Gandia. "Hemos constatado un descenso en cuanto a los incumplimientos del uso de la mascarilla, y también de los botellones y de las reuniones de grupos masivos".
"En Pou Clar la situación ya está estabilizada", continuaba, "y ahora estamos poniendo el acento sobre otros asuntos como los locales de hostelería, para que puedan mantener su actividad de manera segura para las personas". A este respecto, Gandia ha aclarado que el dispositivo continuará en marcha durante más tiempo, pero también ha recalcado que la responsabilidad de controlar el virus recae, principalmente, sobre los ciudadanos.
"Lo más importante para mantener a raya el virus es la concienciación de cada persona y su implicación. Esta es una situación que no podremos superar si no es atendiendo a todos los pequeños detalles del día a día", concluía.