VALÈNCIA (EP). El centro de servicios sociales Salvador Allende de València, que actualmente atiende a los barrios de Orriols, Torrefiel, Poble Nou y a Massarrojos, será de atención exclusiva para los vecinos de Orriols.
Así lo ha anunciado la alcaldesa, Mª José Catalá, tras recibir en el Ayuntamiento a asociaciones vecinales del barrio, a las que ha pedido "paciencia" y un margen de confianza para mejorar la situación de Orriols.
"Este problema no es de ayer, viene de mucho años y el anterior equipo de gobierno actuó tarde. Nosotros nos hemos puesto desde el primer momento, pero no es algo que se pueda resolver rápido. Vamos a dedicar mucho tiempo y esfuerzo, pero estamos comprometidos", ha declarado.
De momento se ha acordado que Orriols contará con un centro de servicios sociales exclusivo para el barrio. Este centro, ubicado en la calle Sant Joan de la Penya, atiende actualmente a cerca de 50.000 personas y mantendrá "la misma dotación de personal, 28 trabajadores, para atender exclusivamente a los vecinos del barrio de Orriols", ha garantizado Catalá.
La alcaldesa ha realizado estas declaraciones tras reunirse con entidades del barrio en una mesa interdepartamental, junto la mitad de los concejales del equipo de gobierno, para tratar la situación de Orriols y las inquietudes de los vecinos. "Estamos abordando de forma transversal los problemas de un barrio que merece vivir mucho mejor", ha reivindicado.
Tras prometer que trabajarán para que "el barrio pueda recuperar su normalidad", Catalá ha destacado que ya se han realizado actuaciones para evitar la ocupación ilegal, que están coordinados con los cuerpos de seguridad del Estado para mejorar la convivencia y que trabajan en proyectos urbanísticos y sociales".
Desde junio, ha explicado, el Ayuntamiento ha actuado en 60 edificios, especialmente en uno del la avenida Constitución para desconectar 139 conexiones ilegales de electricidad en el marco del programa para detectar ocupaciones ilegales.
Al margen de Orriols, la primera edil ha destacado que la fórmula de esta mesa interdepartamental es "interesante" para todos los barrios con "especial conflictividad".
Por su parte, el segundo teniente de alcaldía y concejal de Parques y Jardines, Juanma Badenas, se ha comprometido a visitar a los vecinos de Orriols en los próximos días y atender sus necesidades de poda y limpieza de jardines.
También ha propuesto trabajar junto a la concejalía de Agricultura para desarrollar los huertos urbanos en barrios como Orriols y se ha comprometido a "escuchar" las peticiones de los vecinos de Benimaclet al respecto.
A la reunión han asistido representantes de Orriols en Lucha y de la Asociación de Vecinos barrio Els Orriols-Rascanya, la Asociación de Comerciantes de Orriols, Valencia Acoge, Infancies y Dones y Orriols Convive. Por parte del Ayuntamiento, la primera tenienta de alcaldía, Mª José Ferrer San Segundo, el segundo teniente de alcalde y los concejales implicados en el barrio: Juan Carlos Caballero (portavoz), Jesús Carbonell (Seguridad), Juan Giner (Urbanismo), Carlos Mundina (Limpieza) y Marta Torrado (Bienestar Social).
Como portavoz de la plataforma Orriols en Lucha, Mª Carmen Tarín ha celebrado que "por fin" se celebre esta reunión y ha compartido sus "buenas impresiones" sobre los compromisos del Ayuntamiento de impulsar programas especiales para el barrio.
"La prioridad es la seguridad y la convivencia", ha recalcado, y ha recordado que "el problema es muy complejo" que no es cuestión de semanas o meses. Pero si no se actúa, ha advertido, Orriols se convertirá en "marginal" porque los vecinos tienen "sensación de hastío" y "no pueden hacer una vida normal"
La representante vecinal ha explicado que "el barrio tiene dos caras" entre el día y la noche, cuando "sale la gente que se dedica a la delincuencia", y ha hecho hincapié en que "el problema viene de los pisos ocupados".
Además, ha valorado positivamente el centro de servicios sociales exclusivo para Orriols y el compromiso de Badenas de visitar los huertos urbanos del barrio como responsable de Parques y Jardines.
Por su parte, la Asociación de Vecinos Els Orriols-Rascanya ha presentado en la mesa interdepartamental un escrito con sus reivindicaciones para el barrio, como un centro de salud con más servicios, más limpieza y presencia policial, inversiones para integrar a los nuevos vecinos, aparcamientos subterráneos para residentes, viviendas asequibles, una biblioteca municipal, reconvertir las alquerías en un centro cívico cultural, ampliar el IES Orriols, un polideportivo, alternativas de ocio para jóvenes o fomentar la cultura de la huerta.
Entre los grupos políticos municipales, la portavoz adjunta de Compromís, Papi Robles, rechaza que Catalá "se atreve a cuestionar el trabajo del anterior gobierno" en Orriols y le reprocha que "ni siquiera se ha dignado a ir al barrio". "Desde el Salón de Cristal, piensa que puede resolver los problemas de esta ciudad. No tiene mirada de ciudad ni la tendrá nunca", manifiesta en declaraciones remitidas a los medios.
Por contra, Robles asegura que el exalcalde Joan Ribó "pisaba el barrio de Orriols, interpelaba a las personas con todas las concejalías". "Porque no solo se resuelven los problemas de inseguridad en los barrios poniendo una patrulla en la puerta de un edificio -ha enfatizado-, sino con una mirada interseccional, como así pidió en el barrio, como ella se ha negado a realizar durante los últimos seis meses. Pero ahora, una vez que en Compromís le hemos marcado el camino, ha decidido dar pasos adelante. Esperamos encontrarla en el barrio de Orriols la próxima vez".
En la misma línea, la concejala socialista María Pérez lamenta que "Catalá se haya sentado por primera vez con los vecinos de Orriols después de más de cuatro meses de mandato y cuando la situación en el barrio se ha convertido en insostenible", como consecuencia de la falta de liderazgo político y el desgobierno en la Policía Local", que ve como "el área peor gestionada y peor liderada en el Ayuntamiento".
"No conocemos todavía ni una propuesta social del PP y Vox para que se recupere la normalidad en el barrio. Este gobierno no puede depender exclusivamente de que la Policía Nacional y la Delegación del Gobierno actúe en las calles de Orriols mientras Catalá sigue con los brazos cruzados", añade, además de defender el trabajo realizado por la anterior corporación en este barrio.