VALÈNCIA. La escasez de agua y los problemas de abastecimiento que padecen numerosos municipios valencianos, particularmente los más pequeños, han motivado la intervención de la Diputació de Valencia. Una actuación en forma de plan contra la sequía que priorizará actuaciones conjuntas y la mejora de la red en los municipios con menor número de habitantes y cuya puesta en marcha, tal y como ha avanzado el presidente de la corporación, Jorge Rodríguez, es “inminente”.
“Somos conscientes de dos cosas: en primer lugar, de que vivimos en un área con graves problemas de sequía. Pero somos conscientes también de que tenemos problemas en el ámbito municipal en lo que respecta a las redes de distribución, es decir, perdemos mucha agua desde que la traemos del acuífero hasta que llega a las casas”, ha expresado el presidente en una jornada dirigida a los ayuntamientos y centrada en la eficiencia y calidad de la gestión de este recurso.
Es por esto que, ante este tipo de inversiones, “necesarias para mejorar las redes de distribución de agua pero cuantiosas desde un punto de vista económico”, según ha subrayado el presidente, la Diputació ha querido arbitrar un plan específico. Un plan que destinará 4,2 millones de euros entre 2018 y 2019 que “permitirá que todos los ayuntamientos puedan presentar un proyecto de hasta un máximo de 100.000 euros y puedan obtener ayudas que, de manera conjunta, lo que van a permitir es que cada vez perdamos menos agua en la distribución y que comencemos a cuidar el agua, un bien tan escaso como imprescindible para la vida”.
La convocatoria de subvenciones encaminadas a la lucha contra la sequía para los ejercicios 2018-2019 que ha planteado la Diputació dará un plazo de 30 días hábiles para solicitar las ayudas, con las que se podrá financiar hasta un 90% de cada actuación de mejora, con un presupuesto máximo de 100.000 euros. Además, “hemos querido premiar a aquellos ayuntamientos que ya han realizado inversiones de mejora de redes de distribución y ciclo integral del agua, así como aquellos ayuntamientos que ya han tenido la costumbre a lo largo del tiempo de cuidar este recurso”.
“Hemos querido conjugar varios factores de manera que en esa concurrencia competitiva vamos a beneficiar, como siempre, a los pueblos más pequeños”, ha expresado Rodríguez. “Estos pueblos van a hacer frente además a una menor parte de la inversión”, ha añadido. Estas entidades locales obtendrán la misma puntuación que aquellas agrupaciones de municipios o mancomunidades que presenten propuestas supramunicipales.
Las actuaciones que se podrán ejecutar a través de este plan contra la sequía contemplan obras y/o actuaciones relacionadas con el suministro de agua, nuevos depósitos y mejora de los existentes, automatización y telecontrol de las instalaciones, actuaciones para el control de pérdidas a las redes de suministro, instalación de contadores y equipos de control de caudales y presiones y la construcción de sistemas de almacenamiento o drenaje que permitan el uso de recursos hídricos alternativos.
“De cada 100 litros perdemos 50 a lo largo del camino”, ha denunciado el presidente durante su intervención. Ahora, “la Diputación dotará a los ayuntamientos de las herramientas necesarias para mejorar la red hidráulica y hacerlo con la máxima eficiencia posible”. “Hemos de ponernos las gafas de mirar a largo plazo”, ha remarcado Rodríguez.
