VALÈNCIA. (EP). Podemos ha exigido este martes al Ministerio de Fomento una moratoria en la adjudicación de las obras de ampliación de la V-21, cuyas plicas económica se abrirán mañana miércoles, para abrir una mesa de diálogo ya que un tercer carril supondrá la destrucción de más de 80.000 metros cuadrados de huerta en plena producción en València y Alboraia.
La diputada en el Congreso Rosana Pastor, el diputado en les Corts Antonio Montiel y la portavoz de València en Comú en el Ayuntamiento de València María Oliver han dado este martes una rueda de prensa para exigir una paralización del tercer carril que supondría "herir de muerte" a la huerta valenciana por un modelo de territorio "obsoleto" fraguado hace 10 años que "no se ajusta a las necesidades de movilidad sostenible y protección ambiental actuales".
Al respecto, han advertido de que si se abren este miércoles las plicas la paralización del proyecto será "muy complicada" porque se tendría que abonar "indemnizaciones millonarias" a la empresa adjudicataria.
Sin embargo, Montiel ha explicado que la Ley de contratos públicos permite una moratoria de tres meses lo que permitirá "retener el dinero" de la obra, presupuestada en 30 millones, porque el expediente sigue abierto mientras se consensua una solución y además no se genera un perjuicio a empresa adjudicataria.
Oliver ha explicado que esta obra es "innecesaria" ya que los informes técnicos no la justifican ni por volumen de tráfico ni porque el trazado actual presente puntos negros y, por contra, se debe apostar por un modelo más sostenible basado en el transporte público, el peatón y la bicicleta.
Por ello, ha señalado que no ve "ninguna ventaja" a la propuesta del alcalde de València, Joan Ribó, de que se adjudique el proyecto y después mejorar el trazado porque la postura de Podemos "no es dejar pasar las cosas" y que lleguen a ser ya "hechos consumados". No obstante, ha añadido que cualquier alternativa que suponga un menor impacto a la destrucción de la huerta es "mejor" y ha reclamado "sentarse a negociar" un acuerdo porque "nosotros no queremos imponer nada".
Al respecto, Montiel ahora ha señalado que el debate "no es si hay más o menos asfalto" sino una cuestión de "lealtad institucional y de respeto a la planificación territorial" y "no soluciones viejas que nos conducen a no construir nuestro futuro".
Asimismo, ha recordado además que las Corts aprobaron por unanimidad el pasado 30 de septiembre una resolución para reclamar una mesa de coordinación que planifique con antelación suficiente las inversiones del Estado en la Comunitat Valenciana con criterios de "eficacia y sostenibilidad".
"Se ha acabado el modelo paternalista y centralista en el que desde los despachos de Madrid se dirigen las inversiones y se debe reconocer que los valencianos se autogobiernen", ha reclamado.
En ese sentido, ha lamentado que el PP no aprovechara la reforma del Estatut de de la Comunitat Valenciana para incluir en su articulado una cláusula para establecer esta comisión bilateral para la negociación de obras públicas como sí tienen Andalucía y Cataluña.
Asimismo, se ha mostrado "sorprendido y contrariado" con el PSPV por abstenerse en las Corts en "una acción concertada" con CS y PP, que votaron en contra, para que no saliera una Proposición No de Ley de Podemos contraria a esta infraestructura y más cuando sí apoyo la moción de los Ayuntamientos de València y Alboraia. "Está, como partido en el gobierno, haciendo muy poco ruido pensando más en 2019 y sin estar a la altura del gobierno de cambio que nosotros estamos impulsando", le ha recriminado.
La diputada Rosana Pastor ha admitido que en una comunidad infrafinanciada como es la valenciana "cala con facilidad" un discurso que vende las infraestructuras como "sinónimo de progreso y avance" cuando "los embotellamiento lo que deben hacer pensar es la conveniencia de entrar con el coche en el centro de la ciudad".
No obstante, ha señalado que esta ampliación es "una irresponsabilidad" porque se debe "desincentivar" el acceso de los vehículos al centro con un transporte público ya que un tercer carril "no soluciona el problema" porque acaba en un complejo semáforos y un túnel subterráneo que no se pueden ampliar. "Sería el semáforo de Europa", ha evidenciado.
Pastor ha advertido de que la ampliación de la V-21 "no es un caso aislado" porque detrás va el acceso norte del Puerto o la N-220 a su paso por Manises. "Se trata de un cambio de modelo a uno responsable y una movilidad sostenible", ha apostillado.