VALÈNCIA. Power Electronics agiliza su crecimiento. La firma valenciana se ha hecho con un suelo muy próximo a su cuartel general en la localidad valenciana de Llíria, que destinará a la construcción de una nueva planta, dedicada a servicios de movilidad eléctrica, concretamente a cargadores para coches eléctricos. Una ampliación de instalaciones consecuencia del crecimiento que la compañía está experimentando en los últimos años.
Tanto es así que, como ya avanzara hace unos meses, invertirá 300 millones en ampliar también sus capacidades en EEUU. De esta forma, como explicó en febrero el vicepresidente técnico de la multinacional valenciana, Lalo Salvo, su planta de Llíria se enfocará en la producción para el mercado europeo y resto de países como Japón, UK o Australia en los que también opera la empresa, uno de los principales fabricantes de inversores solares para plantas fotovoltaicas y almacenamiento energético.
De hecho, su hoja de ruta para el periodo 2024-2027 prevé que ese importante volumen de inversiones se dedique, además de a su negocio en Estados Unidos, a extender su negocio en España con esta nueva planta en Llíria para servicios vinculados con la movilidad eléctrica, según consta en la memoria de gestión que acompaña a sus cuentas anuales presentadas en el Registro Mercantil.
Actualmente, Power Electronics cuenta con una fábrica de producción de más de 100.000 metros cuadrados en el municipio valenciano, en donde está su sede central, además de con un centro tecnológico de I+D formado por 250 ingenieros. Un complejo que ahora agrandará con la nueva nave, que estará muy cerca de estas instalaciones.
Pero, además, el plan de Power Electronics para este trienio también prevé continuar el desarrollo de la estrategia de innovación, digitalización y automatización productiva en todas sus divisiones, expone en su memoria anual.
Fue hace unos meses cuando la firma anunció su nueva inversión en EEUU para levantar una nueva factoría dedicada a la fabricación de cargadores, inversores solares y de almacenamiento para alcanzar los 20 GW de capacidad productiva. Y es que el mercado norteamericano, en el que cuenta con presencia desde 2014 cuando montó su filial, acapara ya el 70% de todo su negocio mundial.
Así, la nueva fábrica cubrirá una extensa área de 174.015 metros cuadrados y estará diseñada con las últimas tecnologías de fabricación y ensamblaje para servir como un centro óptimo para la fabricación y distribución de sus productos en todo el país. Con este movimiento, creará más de 600 puestos de trabajo en un mercado en el que cuenta actualmente con 60 GW en funcionamiento.
En 2023, Power Electronics logró una cifra récord de facturación hasta alcanzar los 1.106 millones de euros, un 75% más, debido al crecimiento de sus divisiones de solar y almacenamiento energético. Además, obtuvo un resultado operativo (Ebitda) de 208 millones de euros, de acuerdo con sus cuentas consolidadas.
"Estos resultados también responden al incremento de la demanda en el sector de la movilidad eléctrica, en el que ha alcanzado los 100 millones de euros de facturación", explica el grupo. Además, cerró el pasado ejercicio con una plantilla de 3.000 empleados y una capacidad de potencia AC instalada de 91 GW, lo que ha evitado la emisión de más de 90,6 millones de toneladas de CO2 al medioambiente.
Desarrollado por la Universitat de València en colaboración con el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) y Power Electronics