Foto: JOSÉ CUÉLLAR/CORTSVALÈNCIA (EFE). El PP y Vox han aprobado este martes en el pleno de Les Corts Valencianes su primera ley presupuestaria, la que acompaña a los presupuestos de la Generalitat para 2024, en la que se introducen nuevas deducciones fiscales y se eliminan cuestiones como la Oficina de Derechos Lingüísticos.
La ley ha quedado aprobada con los votos de PP y Vox, que han reivindicado que mejorará la vida de los valencianos y acaba "con el infierno fiscal" que sufren, y el voto en contra de PSPV y Compromís, que creen que tendrá "consecuencias negativas" para el crecimiento económico, la redistribución y la justicia social.
La aprobación de esta ley -la segunda de la legislatura- se ha hecho durante el último pleno de Les Corts de este año y ha sido recibida con los aplausos de los parlamentarios de los partidos de la coalición de gobierno, PP y Vox, puestos en pie, al igual que los miembros del Consell presentes.
En materia fiscal y tributaria, esta norma crea seis deducciones relacionadas con la salud y el deporte, que permitirán a las rentas individuales de hasta 32.000 euros y las conjuntas de hasta 48.000 descontarse en la próxima declaración de la renta gastos como las gafas, el dentista o el gimnasio (un 30 % y hasta 150 por concepto).
Además, se modifican los tipos de gravamen del impuesto de transmisiones patrimoniales, que será del 6 % para la compra de vivienda habitual por menores de 35 años y para compradores de viviendas de protección oficial de régimen general, y del 3 % por compra de vivienda para familias numerosas y monoparentales, personas con discapacidad y mujeres objeto de violencia de género, todos con un límite de 180.000 euros en el valor de la vivienda.
En materia lingüística, con esta ley se suprime la obligación de que los alumnos de las zonas castellanohablantes de la Comunitat cursen en valenciano asignaturas troncales, y se eliminan la Oficina de Derechos Lingüísticos y del Consell Social de les Llengües.
Además, en el trámite de enmiendas se ha incluido, a propuesta de Compromís, que la Comunitat Valenciana creará un Tribunal Administrativo de contratos públicos como órgano especializado en la revisión de estas contrataciones, cuyo funcionamiento se regulará en un plazo máximo de seis meses.
También a través de enmiendas, en este caso de PP y Vox, se ha modificado la ley autonómica del juego para que los salones de juego y locales de apuestas que tengan ya licencia, a la hora de renovarla no se les aplique la nueva norma de guardar una distancia de 850 metros con centros escolares, que sí deben cumplir las nuevas autorizaciones.
El síndic del PP, Miguel Barrachina, ha reivindicado que el nuevo Consell ha traído su primer presupuesto "en tiempo y forma", a diferencia de lo pasó en el Botànic el año pasado, junto a una ley de acompañamiento que acaba "con el infierno fiscal" de los valencianos, mediante deducciones que beneficiarán a 2,1 millones de valencianos.
Ha señalado que estas rebajas se suman a la eliminación del "impuesto a la muerte, a la supresión de la tasa turística y a la rebaja para 173.000 familias vulnerables del recibo del agua en el canon de saneamiento", con lo que la Comunitat Valenciana en 2023 "deja de ser la segunda menos competitiva de España para aliviar la carga fiscal" de las familias.
Desde Vox, José María Llanos ha afirmado que es la mejor ley que se podía presentar al servicio del bienestar de los valencianos, frente a las ocho leyes anteriores del Botànic, que a su juicio solo buscaron "premiar a los amigos, hacer sectarismo y subir tasas e impuestos", mientras que ahora se bajan impuestos y se piensa en la ciudadanía.
El síndic socialista, José Muñoz, ha señalado esta ley que "beneficia exclusivamente a una minoría" de valencianos, porque rebaja impuestos "a los que tienen más capacidad económica y perjudica a la gran mayoría", en especial a los jóvenes, en beneficio de "los operadores del juego".
"Vamos a tener casas de apuestas frente a los colegios; es una aberración y demuestra que Mazón gobierna para los que más tienen frente a la gran mayoría de valencianos", ha afirmado Muñoz, quien ha anunciado la presentación de un iniciativa para eliminar la supresión de la distancia entre los salones de juego y los colegios.
El síndic de Compromís, Joan Baldoví, ha calificada de "mala" esta ley que "retira competencias" a los ayuntamientos para construir centros escolares, que permitirá que las empresas del juego "sigan haciendo negocio" a menos de 850 metros de colegios e institutos, y que "perdona impuestos a los más ricos".
Tras la aprobación de la ley, en cuya votación no ha participado el president de la Generalitat, Carlos Mazón, por estar enfermo, ha comenzado el debate los presupuestos de la Generalitat para 2024, que se aprobarán este miércoles.
