VALÈNCIA. El presidente del PPCV, Carlos Mazón, ha prometido que si lidera la Generalitat tras las elecciones de mayo aprobará, "en los primeros cien días del gobierno del cambio", un plan autonómico de salud mental y adicciones con medidas como integrar su promoción y prevención en el currículum escolar, crear una unidad especializada en cada departamento de salud o reducir el tiempo de espera para estas problemáticas a menos de un mes.
Mazón ha presentado sus propuestas electorales sobre salud mental junto al coordinador de este programa, el especialista en psiquiatría Bartolomé Pérez, quien fue director general de Drogodependencias antes de 2005 en uno de los anteriores gobiernos del PPCV.
"Con no mucho presupuesto se puede hacer muchísimo en salud mental", ha aseverado el aspirante a la Presidencia de la Generalitat, y ha defendido que "no solo se trata de prevenir el suicidio, sino de intervenir en los casos previos".
Mazón ha denunciado que la atención en este ámbito está "colapsada" porque "no hay presupuesto ni plan pese a que Ximo Puig lo ha prometido" y ha acusado al jefe del Consell de "gastar más en maquetas que en hospitales", en alusión al nuevo Arnau de Vilanova en Paterna anunciado este jueves.
En la misma línea, el doctor Bartolomé Pérez ha advertido que la Comunitat es líder a nivel nacional en consumo de drogas entre escolares, que "desde 2016 a 2021 se han incrementado los casos de intentos de suicidios un 277%" y que "ha pasado de ser la autonomía número 14 en depresiones diagnosticadas a ser la segunda".
El programa de salud mental de los 'populares' se divide en cuatro ámbitos: planificación y gestión pública; prevención y promoción, infancia y adolescencia; adultos. El primero contempla la creación del plan de manera equitativa entre las tres provincias y con criterios científicos, así como poner en marcha un observatorio de salud mental y adicciones para monitorizar la salud mental de la población y su consumo de sustancias.
También prevé un plan de recursos humanos para poner a disposición del sistema sanitarios todos los profesionales disponibles, tanto en el ámbito público como en el privado. El PPCV se compromete así a crear anualmente un número de plazas que no sea inferior al de residentes que concluyan su formación en psiquiatría, psicología clínica y enfermería de salud mental.
Otras de sus promesas son cubrir todas las plazas vacantes por jubilación o excedencia, incorporar profesionales de trabajo social y terapia ocupacional o implementar programas de autoconcierto ofertando la ampliación voluntaria de jornada a todos los profesionales de las plantillas de salud mental.
Además, los 'populares' garantizan que, antes de concluir la próxima legislatura si gobiernan, todos los departamentos estarán acreditados para formar a MIR, PIR o EIR en lugar de la mitad como actualmente.
Fruto de todas estas medidas de planificación se pretende reducir el tiempo de espera a menos de 30 días en las unidades de salud mental y conductas adictivas, desde la solicitud de asistencia o derivación, así como publicar los tiempos de demora en la web de la Conselleria de Sanidad.
En el segundo ámbito, de prevención y promoción, se contempla crear una unidad especializada en cada uno de los 24 departamentos de salud para coordinar la detección precoz y la derivación de casos en centros educativos, junto a nuevas unidades de prevención de adicciones dirigidas a adolescentes.
Paralelamente, el PPCV apuesta por la introducción de la evaluación psicológica en el informe de salud escolar, por reforzar los protocolos y por aumentar la formación a docentes para que estén capacitados ante problemas de salud mental de los alumnos.
En el tercer eje, enfocado en la infancia y la adolescencia, se prevé poner en marcha la especialidad de psiquiatría infantil y de adolescencia o asegurar la disponibilidad de plazas de hospitales de día para estos tramos de edad, además de que cada departamento derive profesionales a los domicilios en casos urgentes.
Hay otras promesas como crear unidades de hospitalización psiquiátrica específicas para niños y adolescentes, poner en marcha la primera comunidad terapéutica para adolescentes con adicciones o ampliar las unidades hospitalarias de trastornos de la conducta alimentaria.
Y en el ámbito dirigido a los adultos, el PPCV se compromete a disponer de un equipo estable y especializado en atención a primeros brotes psicóticos en todos los departamentos y a incluir la atención al malestar psicológico y a los problemas mentales generados por la pandemia en la cartera del sistema sanitario público.
También a crear una unidad de hospitalización psiquiátrica para adultos en todos los hospitales públicos, a duplicar la dotación de camas para desintoxicaciones hospitalarias, a aumentar el número de plazas en centros de día o a desarrollar programas específicos en perfiles de especial interés clínico.