Procesiones por una buena causa

Desde hace unos años existe una tendencia global de la sociedad en general a ser más solidaria y a vincularse a proyectos sociales por una buena causa. Y La Semana Santa Marinera de Valencia se sube a este carro y ha evolucionado en ser más social y más solidaria en la última década. Sin olvidar que se trata de asociaciones religiosas y que llevan, o deberían llevar, en sus estatutos el carácter social intrínseco, es cierto que desde hace unos años la faceta solidaria y de acción social es más visible.

La sociedad valenciana es hoy más sensible y solidaria que hace unos años, al menos una parte representativa de la sociedad y, por ello, que los colectivos, festividades y eventos importantes se suelen vincular con una buena causa y con organizaciones no gubernamentales.

Se trata de acontecimientos que reúnen a una gran cantidad de personas, que se convierten en importantes altavoces en la ciudad y que su vinculación a una buena causa impacta de manera directa y efectiva en la sociedad. 

Normalmente las hermandades se vinculan con proyectos beneficiarios de estas acciones. Los beneficiarios son proyectos locales, valencianos y en ocasiones vinculados directamente con el barrio a través de sus parroquias o distintas organizaciones

Y es que estamos hablando de una zona de Valencia donde todavía se trabaja de manera directa a través de acciones sociales con la gente de su propio barrio, de los poblados marítimos, que cuenta con algunas realidades muy duras típicas de un sistema poco desarrollado. Realidades que tenemos más cerca de lo que pensamos.

Las hermandades y sus causas

Cada vez son más las hermandades solidarias y que se preocupan por organizar acciones por una buena causa. Aquí van algunos ejemplos.

Este año se ha creado una nueva hermandad, la Hermandad de la Misericordia que ha nacido con una implicación social potente. Esta hermandad se ha vinculado con La Asociación Española contra el Cáncer. A través de los lazos rosas simbolizan su lucha contra el cáncer de mamá. Estos lazos se adquieren a cambio de una donación que destinan a la propia Asociación y, en la misma sede social, su imagen expuesta al público recoge donativos de sus visitantes que se destinan a la misma causa. Tienen la imagen en la calle Escalante, 157 bajo.

Y de los lazos rosas pasamos a los lazos azules. La Hermandad de Maria Santísima de las Angustias impulsa una procesión desde 2010 que ya se ha instaurado como una de las procesiones más emblemáticas. Es la Procesión de la Solidaridad, una procesión por una buena causa porque lo que se recauda se destina a la Casa de la Caridad. Además se destaca la figura del “clavario de la solidaridad” que este año ha sido el director de Cáritas Valencia, Ignacio Grande. La recaudación se consigue a través de los lazos azules que se adquieren por un donativo y se destina proyectos valencianos vinculados, la gran mayoría a Cáritas parroquiales.

La Hermandad del Cristo de los Afligidos, por su parte, durante todo el año realiza una labor muy social y muy solidaria con la recogida de alimentos no perecederos que destinan luego a diferentes asociaciones. En octubre normalmente realizan una muestra de cruces y una de esas cruces es la “Cruz de los Pobres” que sirve para recaudar estos productos no perecederos. Esta recogida también la realiza la propia Junta Mayor.

La Corporació de Granaders de la Verge colocó un pez azul en su trono anda en solidaridad con el pequeño Gabriel y su familia y contra el maltrato a los menores. Fue el pasado Viernes de Dolor.

La Cofradía de Jesús de Medinaceli elevará una oración mañana domingo, el Domingo de Resurrección, contra los abusos sexuales a menores durante la llamada Procesión de la Resurrección.

Oración, por todos los menores que han sufrido abusos sexuales. Rezarán en solidaridad por esos niños y niñas que han sufrido acoso sexual en todos los ámbitos en el personal y en las redes sociales. Se pretende que la sociedad haga efectivas medidas para prevenir este tipo de acciones y se actúe con toda la carga de ley contra los pederastas. Una oración también por las unidades de los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad dedicados a combatir este tipo de acciones.

Y la Cofradía de Jesús en la Columna organiza varias acciones como la recogida de alimentos, ropa y juguetes para Cáritas Parroquial varias veces al año; la aportación de libros para las bibliotecas solidarias de Chile, Colombia y Perú en colaboración con la ONG Padre Juan Schenk; coordinación con Manos Unidas para organizar el Almuerzo Solidario del Hambre en su local social del Cabanyal; o la procesión que desde el año 1999 celebran en el interior del centro penitenciario de Picassent todos los Jueves Santo por la mañana.

Causas vinculadas con proyectos cuyos beneficios recaen en Valencia y en sus barrios. Y es que la junta Mayor y las hermandades apuestan por el impacto directo y por apoyar a su gente generalmente a través de organizaciones, asociaciones y de sus parroquias.

Por su parte, la Junta Mayor realiza diferentes acciones y trata de vincularse con acciones solidarias durante todo el año. Por ejemplo, en diciembre realizó junto al Mercado del Cabañal una recolecta de productos no perecederos que se destinan a organizaciones y proyectos valencianos cuyos beneficiarios son sus propios vecinos y su gente cercana. Una acción que se realiza desde hace años y donde se recogió en 2015, por ejemplo, 2.000 kilos de alimentos no perecederos. Ahora en la propia Semana Santa también realiza acciones pequeñas como destinar parte de la recaudación que obtienen del alquiler de sillas para ver las procesiones a diferentes causas.

Este año hay 31 hermandades que se asocian a las cuatro parroquias de la zona: Santa María del Mar en el Grao, Rosario en Canyamelar, Los Ángeles y Cristo redentor en El Cabañal. Y estas parroquias trabajan con sus fieles y la gente cercana del barrio.

La semana que viene… ¡más!