VALÈNCIA. Las elecciones autonómicas y municipales de este domingo marcarán el ritmo de los proyectos públicos de los próximos cuatro años y, entre ellos, también de un marco cultural pendiente de los resultados del 28M. Si hace unos días repasábamos las propuestas de los aspirantes a la alcaldía de València, hoy hacemos los propio con las promesas de ámbito autonómico. En este repaso se incluyen no pocas propuestas de los sectores de las artes, el audiovisual o musical, un resumen de los programas presentados que se centrará, eso sí, en acciones concretas, obviando aquellas de carácter más general que se refieren a “potenciar” o “apoyar” distintos sectores o proyectos pero sin más información sobre la iniciativa. Se incluyen a todos los partidos con representación en el hemiciclo (PSPV, PP, Unides Podem y Ciudadanos), salvo Vox, que no cuenta con propuestas concretas de ámbito cultural en el programa facilitado.
Estas son las propuestas culturales para la Comunitat Valenciana que están en juego el próximo 28 de mayo.
Uno de los puntos calientes en los programas de 2023 es el futuro del antiguo edificio de Correos. Adquirido por la Generalitat por 24 millones de euros, el rebautizado como Palau de les Comunicacions acoge actualmente distintas exposiciones temporales, aunque tiene todavía pendiente definir su misión a largo plazo, un futuro al que tanto Compromís como el Partido Popular quieren dar respuesta. En el primer caso, la formación naranja apuesta por convertirlo en un centro cultural “de vanguardia y de creación multidisciplinar”; los populares, por su parte, apuestan por una cesión del inmueble al Ayuntamiento para su conversión en un Museo Fallero con un acercamiento ‘inmersivo’ a la fiesta mediante la tecnología 4D y la Inteligencia Artificial.
Pero este no es el único centro cultural de nuevo cuño que salpica las páginas de los programas electorales. Así, Compromís promete ampliar el mapa de centros formativos con la puesta en marcha una Escuela de Cine y Arte Dramático de titularidad pública en la ciudad de Alicante. Por su parte, el Partido Popular propone en su programa impulsar un “ambicioso” Centro de Fotografía de la Comunitat Valenciana así como llevar a las Clarisas de Elche un Museo de Arte Contemporáneo de la Comunitat Valenciana, un centro que ampliaría la red de museos autonómicos y que, previsiblemente, presentaría la colección de arte contemporáneo que viene amasando la Generalitat en los últimos años. También el PSPV apuesta por crear un Museo de la Fotografía a través del que se construya un “banco de imágenes digital de fotos de la vida cotidiana del siglo XX”.
En el ámbito audiovisual -entre las propuestas no se incluyen las relacionadas con À Punt-, Compromís apuesta por “territorializar” la oferta de la Filmoteca Valenciana en colaboración con los ayuntamientos así como la creación de espacios de video-gaming de uso público “con las consolas de videojuegos más populares y una biblioteca de juegos libre de violencia, odio y machismo”. La recientemente recuperada Ciudad de la Luz, que retomó su actividad hace apenas unos meses, se integra entre las propuestas del PSPV, que ha anunciado que el próximo año acogerá la feria audiovisual “más importante del sector”, con la que buscan resituar los estudios en el marco internacional. Por su parte, el Partido Popular plantea “transformar” el espacio como centro de formación en el ámbito del audiovisual y el cine, en colaboración con las universidades valencianas y de carácter internacional.
En el ámbito musical, la cosa va de premios. Compromís apuesta por crear una modalidad del premio Carles Santos a la mejor sesión de música electrónica valenciana para que “reconozcan la tarea y la innovación de los y las DJ que pinchan a las discotecas valencianas”. Por su parte, tanto el Partido Popular como el PSPV plantea la creación de uno premios que reconozcan la labor de personalidades y entidades valencianas en el sector (independientemente de los Carles Santos, impulsados desde el año 2018, se entiende). El “desarrollo y actualización” de la Ley Valenciana de la Música; la creación de un circuito musical en las zonas con menos densidad de población o el impulso de una “política de precios” en Palau de Les Arts son otras de las propuestas de ámbito musical que incluye el PP en su programa.
Una de las apuestas del actual gobierno ha sido el apoyo económico al Benidorm Fest, la preselección española de Eurovisión, un proyecto que suma dos ediciones y que continuará en 2024 con una edición que, si gana Compromís las elecciones, deberá desarrollar acciones de la mano de RTVE para que se convierta “en un espacio de promoción y visibilización de la música valenciana a nivel estatal”. En el ámbito musical, los socialistas también señalan la necesidad de crear un “marco regulatorio” para la música festiva en la calle, como charangas o desfiles, con el fin de definir unos “estándares de calidad y cantidad” así como la “transparencia” en la contratación.
El futuro del Museo de Bellas Artes de València (Mubav) es uno de los puntos clave en el programa de Compromís, que promete dotar de una “mayor independencia” del Ministerio de Cultura al museo, una independencia “artística y de autonomía en la gestión” que también amplía a los museos de Alicante y Castelló. Cabe recordar que desde Cultura se apuntó a la creación de una ley propia para el Mubav que, finalmente, no se ha acabado desarrollando esta legislatura. También Ciudadanos mira a la pinacoteca, aunque en este caso para prometer dar solución a otra de sus problemáticas, la que se refiere al personal, un equipo que se promete “reforzar […] mediante el sistema de concurso-oposición para historiadores del arte con temario especializado según las necesidades concretas de cada puesto a cubrir”.
Aunque sin referencia explícita al museo, el PP habla en su programa de “reimpulsar” una exposición permanente que reúna la obra de Sorolla y sus artistas coetáneos. Fue en 2019 cuando cerró sus puertas la Sala Sorolla que se ubicaba en el Mubav, un espacio que –aunque con un enfoque diferente- se espera recuperar a final de 2023, en el marco del Año Sorolla, con la llegada de los fondos de la Colección Lladró. En este caso, eso sí, se habla de una exposición y no tanto de un Museo Sorolla, que sí se cuela entre las propuestas de carácter local. En el ámbito del arte, Compromís ‘amplía’ su apuesta con la propuesta de creación de una red pública de espacios de coworking culturales para la práctica artística joven.
Entre otras medidas, Compromís plantea una ampliación del Circuito Cultural Valenciano a otros ámbitos como el audiovisual o las artes plásticas; la creación de un fondo de archivos sonoros correspondientes a la Fonoteca de Materiales o la “visibilización” de influencers, creadores y creadoras de contenidos en TikTok, Instagram y YouTube, con una especial atención a aquellos contenidos en valenciano. Por su parte, Unides Podem promete establecer una “cuota de reserva” para programar a artistas con diversidad funcional en museos, bibliotecas o festivales así como habilitar espacios culturales que permanezcan abiertos las 24 hora para “favorecer el ocio alternativo diurno y nocturno, implicando directamente a las personas jóvenes en el diseño, gestión y programación de estos espacios”.
Por su parte, el Partido Popular plantea la creación de un grupo de trabajo de festejos taurinos y, en cuestión de ayudas, crear una línea para el desarrollo de proyectos artístico-culturales en el medio rural y, en las destinadas a modernización de teatros, cines y salas música beneficiar a las que tienen una “especial significación histórica”. En cuestión de ayudas, el PSPV promete duplicar las ayudas para adquisición de fondos bibliográficos en valenciano así como instalar una Oficina de Desarrollo en Innovación para la Internacionalización del Sector Cultural. También plantean los socialistas tomar medidas para “regular” la venta y reventa de entradas a espectáculos públicos.
El puente entre educación y cultura es una constante en varias de las propuestas de los distintos programas electorales. Así, desde Unides Podem apuestas por la creación de escuelas artísticas –y deportivas- gratuitas de titularidad y gestión pública. También Compromís planta crear distintas escuelas públicas de cultura para jóvenes, vinculadas a sectores como, apuntan, la danza, música, pirotecnia o muixeranga. La formación naranja también propone crear un programa para llevar la cultura a los hospitales y a los centros penitenciarios. En esta líneas, los socialistas apuestan por crear nuevas líneas de FP centradas en “nuevas” áreas de empleabilidad musical dirigidas a la salud, tales como “terapias musicales”.
Por su parte, el PP promete aumentar en hasta 15 millones las subvenciones destinadas a escuelas de música, así como crear una nueva línea dotada con 2 millones para el alumnado. En este sentido, también plantean generar “medidas de coordinación” entre centros de educación general y conservatorios parar evitar las “cargas excesivas” en el alumnado, con medidas como convalidaciones o coordinaciones horarias. También en el ámbito musical, desde Ciudadanos prometen como medida de “recompensa” reservar un porcentaje de plazas en el sistema universitario para quienes se hallen cursando o hayan finalizado los estudios de quinto y sexto curso del grado profesional de Música, así como una línea de ayudas “urgentes” para las familias con menores matriculados en Escuelas de Música de la Comunitat Valenciana.