VALÈNCIA. (EFE).- El PSPV, Compromís, Podem y Ciudadanos han coincidido hoy en reclamar una solución para la deuda procedente de la infrafinanciación y han criticado la actitud de la líder del PPCV, Isabel Bonig, en su reunión de ayer con Mariano Rajoy, donde el Gobierno confirmó que no habrá quitas a las autonomías.
La diputada socialista en Les Corts Ana Barceló ha afirmado que no sabe si la solución a la situación de la deuda "tan grave" que tiene la Comunitat "se llama quita o reestructuración", pero lo cierto es que hay "una deuda muy pesada que está lastrando las políticas que quiere poner en marcha la Generalitat".
Además, ha manifestado antes de la Junta de Portavoces de Les Corts, esta situación "viene agravada todavía más" porque parte de esa deuda "viene ligada en muchos casos a temas que tienen que ver con la corrupción y con el dinero distraído de las arcas públicas".
"Se llame quita o se llame reestructuración, como dice Montoro, lo que queremos es que se ponga en macha y nos digan qué modelo de financiación va a plantear el PP", ha afirmado Barceló, quien ha reprochado a Bonig que no haya dicho cuál es su modelo ni haya explicado cómo se va a reestructurar esa deuda.
Ha afirmado que lo único que quieren los valencianos es que la financiación "sea justa" y ha pedido no perderse "en los conceptos de si es quita o reestructuración" y centrarse en qué modelo se va a implantar y se a va aprobar para que la financiación autonómica sea justa.
La portavoz adjunta de Compromís Mónica Álvaro ha afirmado que desde la coalición están "boquiabiertos" ante el anuncio hecho ayer por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, porque, a su juicio, confirma que el PP "no tiene plan" sobre el cambio del sistema de financiación.
Pero además, ha dicho, "ha quedado claro que este partido tampoco tiene palabra" y que Isabel Bonig "no tiene vergüenza" porque después de asistir a esas declaraciones del ministro se hizo "la foto como si no pasara nada".
"En algún momento Bonig tendrá que elegir entre si quiere defender los intereses de los valencianos o seguir manteniendo un cargo del PP", ha manifestado la parlamentaria de Compromís.
Desde Podem, César Jiménez ha denunciado que el PP haya vuelto a confundir una reunión de partido con una para decidir cuestiones de Estado, una confusión, en su opinión, "nefasta para los intereses de los valencianos" pues afecta a unos 20.000 millones de deuda histórica fundamentalmente producidos por la infrafinanciación.
Además, ha destacado el portavoz adjunto de Podem, "se evidencia que Bonig no tiene peso y no consiguió convencer al resto de miembros de su partido de que esa quita es necesaria para garantizar los servicios básicos de los valencianos".
El diputado de Ciudadanos Antonio Woodward ha lamentado que tres años después de que haya caducado el actual sistema de financiación, se esté "con temas de ocurrencias", y ha defendido la necesidad de un nuevo sistema "que tenga en cuenta este problema".
"Es necesario ver cómo tenemos que actuar con esos déficit de financiación acumulados debido a este sistema de financiación injusto", ha manifestado Woodward, quien ha considerado que Bonig tuvo ayer "una papeleta complicada" porque el PP "no sabe a lo que está jugando" y ahora "ha tirado la pelota a las comunidades".
El president de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha acusado al Gobierno de España de actuar "de forma desleal" por haber anunciado y decidido que no habrá una quita de la deuda autonómica durante la reunión que el presidente Mariano Rajoy mantuvo con la cúpula del PP ayer.
Así lo ha afirmado en declaraciones a los periodistas tras participar en la inauguración del congreso "Reto al futuro: la ciencia, el derecho y la economía ante el desafío del envejecimiento de la población", que se celebra en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA).
En opinión de Puig, es "desleal" que se plantee "por parte de unos pocos presidentes autonómicos unos límites a una negociación en la que debe participar todo el mundo", además de que supone "no entender la diversidad del Estado y la pluralidad ideológica", y ha añadido que "debilita la calidad democrática del país".
El president ha recordado que el Ejecutivo de Rajoy se comprometió el año pasado a elaborar un nuevo sistema de financiación autonómica, algo que "ha incumplido", lo que "le quita credibilidad al conjunto de las instituciones, pero fundamentalmente al Gobierno de España".
En cuanto a la deuda autonómica de la Comunitat, ha reconocido que una parte de ella se debe a "la mala gestión, el despilfarro y la corrupción", de la cual deben hacerse cargo los valencianos.
Sin embargo, ha incidido en que existe otra parte "muy importante" que tiene que ver con la infrafinanciación de los valencianos.
"Lo que a unas comunidades autónomas se les ha dado como financiación ordinaria a nosotros se nos ha dado como crédito", ha apuntado, por lo cual ha exigido "una compensación de la deuda", ya que "es una cuestión de justicia y de igualdad de oportunidades".
"Lo que no se puede es jugar con unas reglas del juego en la que todos no somos iguales; la ruptura de la equidad es un problema grave para un país y, en este caso, es algo muy irresponsable por parte de aquellos que están jugando con fuego en esta cuestión", ha manifestado.
Al respecto, ha asegurado que la Comunitat siempre ha estado abierta "al diálogo" y a la "no confrontación", ya que "simplemente busca encontrar un espacio razonable de convivencia desde la igualdad".
Preguntado sobre las declaraciones de ayer del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en las que afirmaba primero que no habría condonación de deuda autonómica y de las que se desdecía poco después en un medio de comunicación, Puig ha pedido que "no se juegue más con ambigüedades y se actúe, de verdad, sobre el fondo de la cuestión".
"Y el fondo de la cuestión es que, en estos momentos, hay desigualdad entre españoles", ha apostillado.
Militantes de Madrid, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla y León, Galicia y Extremadura reclaman un sistema justo y multilateral