MADRID (EP). El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha abierto el debate extraordinario en el Congreso de los Diputados forzado por la oposición para que dé explicaciones sobre la presunta financiación ilegal del PP haciendo un elogio de la "templanza demostrada una vez más" por los españoles como nación unida contra el terrorismo tras los atentados de Barcelona y Cambril.
Después del minuto de silencio que han guardado los diputados a instancias de la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, en recuerdo de las víctimas y en reconocimiento de las fuerzas de seguridad y los profesionales que atendieron a los afectados, Rajoy también ha querido que sus primeras palabras en el Pleno hicieran referencia a los ataques.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que, aunque los terroristas golpearon "en un rincón" de España, "España entera" ha sentido el "dolor" y la "rabia ante una crueldad incomprensible".
Los atentados dejaron un saldo de 16 víctimas mortales y más de 100 heridos, pertenecientes a 38 nacionalidades distintas. Fuera cual fuera su pasaporte, España se volcó desde el primer momento en tratar a los afectados de la misma manera y con el objetivo de que nadie se sintiera "desamparado", ha remarcado.
Rajoy ha dedicado un reconocimiento expreso a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "que cada día y en todas partes velan" por los "derechos y libertades" de los españoles, y que figuran "entre los mejores del mundo". Pero también ha elogiado el trabajo de los miembros del sistema de salud y de protección civil que asistieron a los heridos.
"Nos han hecho daño, pero no nos han vencido", ha advertido Rajoy a los terroristas del autodenominado Estado Islámico, que se ha atribuido la autoría de los atentados. A ellos les ha asegurado que los españoles estarán cada vez "más preparados para hacerles frente" desde la unidad, y sin ofrecerles una mínima fisura.
La Audiencia Nacional no ve ningún delito en la actuación del expresidente de la Generalitat respecto a las adjudicaciones y contrataciones con la trama; la sentencia absuelve a Alicia de Miguel, Manuel Cervera, Luis Rosado y David Serra, aunque condena a varios cargos del Consell