La segunda parte del 'caso Fitur', que implica a la anterior cúpula de la Agencia Valenciana de Turismo, se prolongará hasta febrero
VALENCIA (EP). Los relojes, pendientes y bolsos de imitación a los que es "aficionada" la exconsellera de Turisme Milagrosa Martínez y los trajes de vestir cuyas etiquetas tuvo que cambiar el exjefe de gabinete de la Agencia Valenciana de Turisme (AVT) Rafael Betoret para devolverlos al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) y que no se viera que no eran de la marca Milano [en la conocida como causa de los trajes], se han convertido en las principales perlas de la primera fase del juicio de la pieza 3 del caso Gürtel, relativa a contrataciones para las ferias de Fitur.
La vista de Fitur arrancó a mediados de junio, tras una suspensión solicitada por las defensas, con las declaraciones de los 13 acusados, entre los que se encuentran las exconselleras de Turisme Milagrosa Martínez y Angélica Such. El encargado de abrir los interrogatorios fue el ex consejero delegado de Orange Market Cándido Herrero, aunque los testimonios más esperados desde el punto de vista mediático y social eran los de Milagrosa Martínez; Álvaro Pérez, conocido como 'El Bigotes' y responsable de Orange; y Francisco Correa, presunto cabecilla de la trama.
Transcurridos tres meses, todos los acusados han podido defenderse ante el tribunal valenciano, con lo que ha concluido la primera fase del juicio y esta misma semana ha dado comienzo la segunda, destinada a los testigos propuestos por todas las partes. Entre ellos se encuentran el expresidente de la Generalitat Francisco Camps (quien declarará el 26 de enero) y el exconseller de Solidaridad y exdiputado popular Rafael Blasco (4 de diciembre).
Los acusados han basado sus defensas en desprenderse de cualquier tipo de responsabilidad y en negar la existencia de ninguna trama Gürtel. Así, los acusados de la Administración de menor rango han apuntado a que cumplían órdenes de arriba, mientras que los ex altos cargos han señalado hacia abajo, a los técnicos. Y la mayoría también ha coincidido en identificar a otras personas que no están imputadas en este procedimiento, como es el caso de Isabel Villalonga.
Así mismo, algunos acusados han sorprendido cuando han introducido en el juicio el nombre de Francisco Camps, cuando no se habían referido a él en ningún momento de la instrucción. El primero que lo nombró fue Rafael Betoret, quien se refirió a él cuando no llevaba más de media hora de declaración para aclarar su condena por la causa de los trajes, en la que tanto él como el exvicepresidente del Consell Víctor Campos asumieron su responsabilidad y fueron condenados a pagar una multa de 9.600 euros. Otros dos acusados, Camps y el ex secretario general del PPCV Ricardo Costa, llegaron a juicio y fueron absueltos.
Betoret, quien se mostró visiblemente dolido y resentido, aprovechó una pregunta de la fiscal para defenderse y negar su responsabilidad en ese otro caso. Aseguró que se había conformado con la pena porque se lo dijo Camps, pero apostilló que había una diferencia entre que se conformase y que fuera cierto aquello que se le imputaba.
De hecho, fue en este momento en el que soltó una de las perlas del juicio, cuando aseguró que como en la condena se le obligó a devolver los supuestos trajes de Milano que la trama le había regalado, decidió sacar de su armario sus propios trajes y abrigos y quitarles las etiquetas para que no se percataran de que no eran de esa marca. De esta forma pudo mantener el supuesto engaño, que justificó en que era más barato, según le dijo su abogado, conformarse y aceptar la pena que llegar a juicio.
Otra de las perlas que se han podido escuchar en la vista ha venido de la mano de Milagrosa Martínez cuando se le preguntó por un reloj de la marca Hublot valorado en 2.400 euros que presuntamente Álvaro Pérez le habría regalado, tal y como consta en una conversación telefónica entre 'El Bigotes' y Cándido Herrero. En esta conversación Pérez , según mantiene la fiscal, se refiere a Martínez como 'La Perla'.
La sorpresa vino cuando el ministerio público le mostró dos imágenes, que no le había exhibido en la fase de instrucción, en las que se le podía ver con un reloj Hublot. Martínez, tras examinarlas de cerca, aseguró con rotundidad que se trataba de dos relojes distintos e insistió en que eran de imitación. Por tanto, negó cualquier regalo por parte de 'El Bigotes'.
En ese momento, la exconsellera y expresidenta de las Corts Valencianes afirmó que es "aficionada" a comprar bolsos, pendientes y relojes de imitación de "marcas prestigiosas", y aseguró que tenía más de 10 de estos relojes antes de llegar a la Conselleria de Turisme. "Por mi condición de alcaldesa de Novelda tuve oportunidad de realizar distintos viajes, algunos a China, y yo iba como representante institucional y compraba relojes de muchas marcas", tales como Hublot, Cartier o Montblanc, especificó.
Durante el juicio ha llegado a salir, incluso, el nombre del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Fue durante el interrogatorio a 'El Bigotes' en una conversación que se pudo escuchar en la Sala en la que el acusado llega a decir que Rajoy es un gilipollas y un mierda.
La fiscal pidió que se reprodujera esta conversación cuando le estaba preguntado a Pérez por sus relaciones con el PP y por la etapa en la que estuvo desarrollando trabajos en Madrid. En la charla, 'El Bigotes' decía textualmente: "Cuando dejé de trabajar con [el expresidente José María] Aznar, me dejó una temporada con Rajoy, que es un gilipollas y un mierda".
Las testificales, que han arrancado esta semana, se prolongarán durante meses, hasta febrero, y cuando concluyan se entrará en la tercera y última fase de la vista: las periciales y conclusiones. Tras ello, este juicio quedará visto para sentencia.