VALÈNCIA. Compromís se enfrenta el próximo año a un reto especialmente interesante en la ciudad de València. Las elecciones autonómicas son fundamentales pero la cita con las urnas en los consistorios no son menos importantes y, en especial, la del Cap i Casal, donde la coalición disfruta de la Alcaldía a través de un acuerdo con PSPV y València en Comú.
Joan Ribó (Manresa, 1947) analiza, en su encuentro con Valencia Plaza, las últimas encuestas así como los posibles acuerdos con otras formaciones, las futuras primarias y la situación en la que encara Compromís la recta final del mandato.
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-¿Cómo ha sido la relación con sus socios de Govern de la Nau?
-Buena por no decir que muy buena. Hasta el momento, no ha habido ninguna votación diferenciada del Govern de la Nau tras tres años y dos meses. Estoy muy satisfecho del esfuerzo de diálogo que hemos hecho. No pensamos igual en muchas cosas pero nos reunimos, limamos diferencias y llegamos a acuerdos. Ejemplo de ello es cómo sacamos adelante los presupuestos.
-¿Teme que de cara a las elecciones pueda empeorar esta relación?
-Eso es normal. Cuando se acerca un proceso electoral la gente quiere marcar diferencias. Es lógico y debemos gestionarlo de una manera racional. Si te presentas a unas elecciones debes intentar marcar las diferencias: vamos a gestionarlo de manera que podamos seguir gobernando esta ciudad desde una perspectiva progresista pero a la vez que la gente pueda libremente resaltar sus matices. Creo que es compatible esto con seguir una práctica de gobierno común. Es importante que la sociedad vea que la gente de izquierdas nos podemos entender en base a un programa.
-¿Usted optará otra vez a ser el candidato a la Alcaldía?
-Sí, claro. Optaré a presentarme a las primarias por Compromís. Que sea candidato o no depende de ese proceso.
-¿Ha visto a alguno de sus concejales con madera de sucesor?
-Sí claro, hay varios, ¡pero no me preguntes quiénes! (ríe).
-¿Usted es favorable a celebrar unas primarias bajo el mismo formato de 2015 tanto para la ciudad como para Les Corts?
-En principio, sí. Ese formato creo que funcionó y puede funcionar. Quizá hay que corregir alguna cosa pero pienso que en lo fundamental nos ha permitido un funcionamiento dentro de Compromís bastante razonable, aunque es una cuestión que no depende de mí sino de las distintas organizaciones de la coalición. De todas formas, imagino que se abrirá ese período entre noviembre y febrero así que creo que es un poco pronto todavía.
-Las encuestas que Valencia Plaza y otros periódicos publicaron en primavera situaban a Compromís como primera fuerza pero con el mismo número de concejales. La cosa sigue muy ajustada...
-Lo que miro antes que nada en las encuestas es la suma de los tres partidos del Govern de la Nau y siempre veo que hay una tendencia a crecer y consolidarse. En nuestro caso, dimos un gran salto en 2015, de tres a nueve, y mantener eso está bien. Es verdad que siempre trabajamos para lograr más apoyo pero me alegro de que los compañeros del PSPV y de València en Comú muestren un crecimiento, si bien es cierto que es más sencillo aumentar cuando se tienen números más bajos de salida. De cualquier manera, esperamos crecer un poquito.
-¿Cree que lo idóneo es que el grueso de su equipo de concejales continúe para completar ocho años de mandato y profundizar en los proyectos?
-Respetando a todas las personas que tengan aspiraciones y que pueden ser muy valiosas, sí debo decir que el trabajo que hemos desarrollado con este grupo de concejales ha sido bueno y pienso que cuatro años es un periodo muy corto. Por lo tanto, creo que no estaría mal que una parte amplia y significativa de las personas que han estado trabajando este mandato continuara. Sería bueno para Compromís y para la ciudadanía.
-¿Cree que Compromís debe concurrir en solitario a las elecciones autonómicas? ¿Alguna vez se ha planteado ir junto a Podemos en València ciudad?
-Soy partidario de presentarnos como lo hicimos en 2015. Creo que es bueno para la sociedad poder elegir entre los matices de las distintas fuerzas igual que veo positivo que Podemos pueda alcanzar un acuerdo con Esquerra Unida porque así no se perderán votos que son importantes. En el caso de Compromís, pienso que por separado todos conseguiremos mejor resultado.
-¿Piensa que en esta legislatura se ha perdido una ocasión por parte de Compromís de avanzar como partido?
-Es complicado. A veces intentar forzar un avance puede suponer a la larga un retroceso. Me parece más importante consolidar lo que tenemos que dar un paso que luego implique problemas. A mí me gustaría avanzar un poquito más pero cuando se tengan las bases suficientemente sólidas para que no haya problemas internos. A día de hoy, pienso que el modelo de coalición está funcionando bien aunque cuando se pueda sí deberemos avanzar un poquito más. Lo bueno de ser una coalición es que nos obliga a dialogar y negociar mucho, eso nos entrena para cosas como el Govern de la Nau.
-Gent de Compromís ha tenido una legislatura muy movida. Un sector importante de este colectivo se ha mostrado crítico con usted, que forma parte de este grupo de no adheridos a ningún partido. ¿Cómo ha visto esta evolución?
-La verdad es que no estoy muy metido en eso. Me considero casi como un independiente dentro de Gent de Compromís. He estado muchos años en un partido, demasiados, y no quiero estar en ninguno más, si no, me hubiera apuntado a uno dentro de la coalición. Ya me saturé de todo eso. Entiendo que haya gente que entra en Compromís sin formar parte de ningún partido y quiere agruparse como formando otra estructura orgánica y llegar, a la larga, a ser una cuarta pata del partido, aunque eso es muy complicado en una coalición. Ahí hay dos tipos de militantes: los que queremos estar en Compromís sin más, como independientes al cuadrado por decirlo así; y los que quieren tener esa estructura, que me parece bien pero que veo difícil de lograr. Así que sinceramente, para estos casos, la opción de apuntarse a un partido o a otro me parece la más razonable.