VALÈNCIA (EP). Las Fuerzas Armadas rusas han lanzado este viernes una nueva ola de ataques sobre la capital ucraniana, Kiev, coincidiendo con la visita a la ciudad de una delegación de líderes africanos que aspiran a mediar entre los dos bandos y que tiene previsto viajar también a Rusia.
El alcalde, Vitali Klitschko, ha confirmado en su cuenta de Telegram una explosión en el barrio de Podilski. "Se han escuchado fuertes explosiones", ha contado, al mismo tiempo que ha subrayado que ningún objetivo militar o civil ha sido dañado "¡Gracias a nuestros defensores de las fuerzas aéreas!", ha aplaudido.
Las Fuerzas Armadas también han avisado a la población para que bajen a los refugios, tras advertir del disparo de misiles balísticos desde el mar Negro, dentro de una batería de ataques que ha afectado también a otras regiones. En total, el Ejército ha confirmado el derribo de doce misiles, así como de dos drones.
El bombardeo coincide con la visita a la capital de Ucrania de una delegación de líderes africanos encabezada por el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y que aspira a mediar entre Kiev y Moscú. El grupo tiene previsto también viajar después a Rusia, para verse con el presidente Vladimir Putin.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha vinculado el último ataque con la visita extranjera: "Putin busca confianza lanzando el mayor ataque con misiles en semanas". "Los misiles rusos son un mensaje para África: Rusia quiere más guerra, no la paz", ha denunciado en Twitter.
En esa línea, el jefe de la oficina presidencial de Ucrania, Andri Yermak, ha recordado que este "otro ataque terrorista" lanzado por Moscú se ha producido "justo cuando los líderes de los países africanos llegaban a la capital".
"Putin quiere demostrar que está dispuesto a despreciar la seguridad de los líderes extranjeros, en realidad no le importa porque se siente totalmente impune", ha dicho Yermak, recordando que también sobrevolaron misiles durante las visitas a Ucrania del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.
"El mundo necesita entender que se necesita consolidar ahora una postura dura contra Rusia. Es necesario mostrarse fuertes frente al Estado que socava la seguridad global y actúa con métodos terroristas (...) Solo una diplomacia y una posición fuertes pueden poner fin al terrorismo ruso", ha recalcado.