Foto: MARGA FERRER VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Sanidad ha iniciado esta semana la primera fase de las obras del servicio de Urgencias del Hospital General de València, que abarca una de las áreas de Observación, que se dotará con 13 camas monitorizadas, control de monitorización y aislamiento, y el área de Traumatología.
En concreto, el proyecto global consiste en una reforma integral del servicio de Urgencias, que se va a realizar por fases, y que cuenta con un presupuesto que asciende a más de 4,9 millones de euros.
Ahora se han iniciado las obras de esta primera fase, que cuenta con una superficie de 450 metros cuadrados, supone una inversión de obra de 1,5 millones de euros y tendrá una duración aproximada de cuatro meses, ha indicado la Generalitat en un comunicado.
La intervención de esta primera actuación no afecta al acceso principal. El objetivo de las obras es mejorar las instalaciones, las condiciones de trabajo y la eficiencia, lo que repercutirá en una "clara mejora" de la atención que día a día se presta a la población.
Una vez finalizada la primera intervención, está previsto que se inicie la segunda fase, que abarcará una zona más amplia del servicio y se iniciará, cuando las condiciones lo permitan para no interferir en la actividad asistencial del centro.
Las obras contemplan la demolición y reconstrucción de una superficie de más de 2.000 metros cuadrados (1.822 metros cuadrados en planta baja y 252 metros cuadrados en planta sótano). El plazo estimado de ejecución es de 18 meses, distribuidos en tres fases para seguir prestando la asistencia de urgencia a la población mientras se realizan las obras.
Según ha explicado el jefe del servicio de Urgencias, Ricardo Rubini, "la reforma integral del servicio va a suponer una reordenación de todas las áreas y circuitos asistenciales, que se va a traducir en una atención al paciente más rápida y eficiente".
De este modo, se incorporará una nueva distribución de espacios, que se estructurará en cuatro áreas: triaje y unidad de primera asistencia; área de intermedios con boxes polivalentes y sala de tratamientos; área de observación o del paciente complejo, con 33 camas (16 de ellas monitorizadas y cuatro de aislamiento), en esta área se incluye además el box de críticos, que se ampliará para poder atender hasta cuatro pacientes de forma simultánea; y la cuarta área corresponde a Traumatología.
Esta nueva distribución incluirá un circuito específico para pacientes y control de accesos. El número de consultas pasará de 15 a 21, y las específicas para pacientes psiquiátricos tendrán un espacio independiente.
Por otro lado, se mejorarán otros espacios, como las salas de espera y las áreas de apoyo. Además, se optimizará el confort térmico y acústico, que creará un ambiente más relajado durante el tiempo que el paciente tiene que permanecer en el servicio de Urgencias.
"Esta reforma integral nos permitirá rediseñar los espacios adecuándolos a las necesidades asistenciales y disponer de mejores condiciones, tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios", ha añadido Rubini.
