Sanidad subrogará a los trabajadores de Eresa e Inscanner en los hospitales públicos

VALÈNCIA. Sanidad subrogará finalmente a los trabajadores de Eresa e Inscanner que prestan el servicio de resonancias magnéticas en los hospitales públicos. Así se anunciaba este viernes en la rueda de prensa del Pleno del Consell tras aprobarse una declaración de urgencia para la tramitación del proyecto de decreto que regulará el paso de los empleados de estas empresas privadas a la sanidad pública. 

El 31 de octubre de 2018 termina el concierto de resonancias magnéticas de la Conselleria de Sanidad con la UTE Erescanner Salud tras una década prestando el servicio en once hospitales de la Comunitat Valenciana: Eresa está en todos los hospitales de la provincia de València menos el Dr Peset mientras que en Alicante es Inscanner Salud la que presta el servicio de resonancias magnéticas. 

Esta posibilidad llevaba en la mesa desde hace meses, como ya adelantó Valencia Plaza, a la espera de que la Abogacía de la Generalitat diera el visto bueno. Finalmente, el próximo 1 de noviembre subrogará al personal necesario para la prestación del servicio, ya sean temporales o indefinidos. Este personal se quedará en su puesto de trabajo en la condición de personal a extinguir como laboral fijo o como laboral temporal, como ya ocurrió en el Departamento de La Ribera. 

Según señalaron desde la Generalitat, se respetarán sus condiciones laborales y retributivas, "sin perjuicio de su posterior modificación en los supuestos legalmente establecidos". Ni desde la empresa ni desde la administración dan una cifra de cuánto personal tienen previsto asumir y aseguran que están en plena transferencia de información y documentación con el fin de determinar el número de profesionales necesarios.

La relación de puestos de trabajo que se creará para dar cobertura a estos trabajadores se realizará con la figura jurídica de plazas de carácter estatutario con el fin de asegurar la prestación asistencial de estos puestos en periodos vacacionales, ausencias, enfermedad, jubilación o vacantes.

¿Por qué subrogar al personal?

Según señalaron fuentes del departamento a Valencia Plaza, entre las cuestiones clave se encontraba una sentencia en el Hospital Provincial de Castellón en la que se obligó a readmitir a personal vinculado al servicio de resonancias cuando el centro decidió asumir la gestión y despedir a los empleados. Al ser un consorcio, el Hospital Provincial terminó su contrato con anterioridad a la Conselleria de Sanidad y un juzgado dirimió que se trataba de sucesión de empresas, por lo que debían asumir a los trabajadores de la concesionaria. 

Desde el Consell han hecho referencia a la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público, donde se establece que en el caso de que una Administración Pública decida prestar directamente un servicio, que hasta la fecha venía siendo prestado por un operador económico, tendrá obligación de subrogar al personal que lo prestaba si así lo establece una norma legal, un convenio colectivo o un acuerdo de negociación colectiva de eficacia general.

Otro problema añadido de no subrogar al personal era que la ocupación de los puestos a través de la bolsa de trabajo no se cubrieran con los perfiles adecuados, ya que no existe una categoría tan especializada como para que todas las personas que entren a cubrir esos puestos tengan los conocimientos adecuados para hacer resonancias magnéticas. Esto se debe a que la gran mayoría de estas pruebas realizadas en los últimos años en la Comunitat Valenciana las ha realizado la UTE Erescanner Salud. Es lo que Sanidad calificó de "secuestro de conocimiento".

Adquisición de equipos

Tras el fin del contrato vigente, la Generalitat asumirá como propios los 20 equipos que tiene asignados la adjudicataria y se hará cargo de este servicio.mEn el hospital general de Castellón (2), en el hospital de la Plana (1), en el hospital de Sagunto (1), en el hospital Clínico (3), en el hospital La Fe (3), en el hospital Arnau de Vilanova (1), en el hospital de Gandía (1), en el hospital de Xàtiva (1), en el hospital general de Alicante (2), en el hospital de Alcoi (1), en el hospital de Elda (1), en el hospital de Elche (2) y en el hospital de Orihuela (1).

Además, la internalización de esta prestación se verá reforzada por la adquisición de nueve equipos más, que se sumarán a los 20 actuales. De los cuales, siete de ellos son financiados a través del convenio con la Fundación Amancio Ortega. También se adquirirán nuevos equipos en el departamento de la Marina Baixa y Doctor Peset de Valencia, financiados por la Conselleria de Sanitat.

Asimismo, el Plan de Salud 2016-2020 recoge la reorganización del sistema sanitario con el fin de garantizar la sostenibilidad del sistema y revertir progresivamente la actividad y equipos de resonancia magnética a la red sanitaria pública.

El Hospital General de València planteó la subrogación

El Hospital General de València, quien de momento mantiene a Eresa en el servicio de resonancias y TAC tras la finalización del servicio, también solicitó que se sometiera a la consideración de la Abogacía de la Generalitat, de la Intervención General de la Generalitat y de los servicios jurídicos de la Diputación de Valencia la "viabilidad" de la integración del personal de Eresa como trabajadores del consorcio a la vista de la línea que la propia Generalitat ha adoptado respecto alpersonal del Hospital de la Ribera. 

Mientras, la licitación de resonancias magnéticas de la Comunitat Valenciana está más cerca de resolverse tras casi cinco meses de proceso, aunque todavía los resultados no son definitivos. Eresa e Imed se han repartido el grueso del concurso, la primera con el lote de València y la segunda con lote de Alicante, adjudicaciones que servirán para complementar el servicio internacionalizado por los hospitales públicos.