Foto: EPVALÈNCIA. La consellera de Sanidad, Ana Barceló, justificó este martes que la Comunitat Valenciana no esté vacunando a todas las personas con síndrome de Down porque éstas "no están dentro de la estrategia de vacunación" diseñada por el Ministerio de Sanidad de Carolina Darias. "La Comunitat sigue la estrategia marcada, y por tanto en estos momentos las personas con síndrome de Down no están dentro de la estrategia", resumió la consellera.
La respuesta llega después de que la asociación más representantiva de este colectivo, Asindown, tildara de "urgente" la semana pasada que la vacunación de personas con discapacidades intelectuales, y más concretamente de las de síndrome de Down, dado que las circunstancias físicas de este colectivo no es el mismo que el de la población general.
En este sentido, conviene apuntar que la Administración comenzó hace ahora aproximadamente dos semanas a vacunar a personas de este colectivo, pero únicamente a aquellos que se hallaran en centros ocupacionales públicos, así como también a los que tuvieran un grado de dependencia 2 y 3. Sin embargo, según reconocieron fuentes de la organización a este diario, muchas de las personas con esta situación no solicitan la prestación por dependencia, motivo por el que no tienen posibilidad de vacunarse a día de hoy.
Todo parece indicar, a juzgar por la explicación de Sanidad, que a menos que se produzca un cambio en la estrategia de vacunación, las personas con síndrome de Down que no tengan este grado de dependencia o se encuentren en centros ocupacionales públicos, deberán esperar a que les llegue el turno para vacunarse como cualquier otro ciudadano.
Una circunstancia delicada, ya que este colectivo sigue yendo a trabajar, lo que incrementa el riesgo para éstos, que se dispara a partir de los 40 años ya que se considera como una entrada en la etapa de envejecimiento y tienen mayores puntos de riesgo. Sin embargo, éstos se exponen de forma constante al exterior al seguir haciendo vida normal.
Conviene recordar que el pasado mes de febrero se dieron a conocer las últimas conclusiones de un estudio internacional en el que los investigadores concluían que los adultos con síndrome de Down tienen más probabilidades de morir por covid-19 que la población en general. Concretamente, tres veces más, lo que respaldaría la necesidad de una vacunación anticipada ya que una persona de 40 años con síndrome de Down tiene un riesgo similar de morir por coronavirus a alguien de 30 años mayor en la población general.
Por otra parte, la Conselleria de Sanidad advirtió este martes que se está vacunando a enfermos de salud mental que viven en pisos tutelados "si son grandes dependientes". A preguntas de este diario, la responsable del ramo, Ana Barceló, aclaró que Sanidad "está vacunando a los cuidadores que están atendiendo a grandes dependientes, sean profesionales o no", pero que la estrategia "marca" que se vacune a "los grandes dependientes". "Si tienen enfermos de salud mental y son grandes dependientes, evidentemente se vacuna tanto a los cuidadores como a ellos".
Un hecho que, sin embargo, Aerte niega. La patronal de residencias y servicios a personas dependientes asegura que todo "sigue igual" y que el "personal de ayuda a domicilio sigue sin vacunarse".
Cabe apuntar que hace unas semanas el director del proyecto social Sennda, David Taroncher, que gestiona cinco viviendas tuteladas de personas con problemas de salud mental en la ciudad de València, denunciaba que los residentes no estaban siendo vacunados. Un hecho sobre el que también alertó Aerte, que a finales del mes de enero solicitó a la Conselleria de Sanidad que incluyera a este colectivo entre los grupos prioritarios a vacunar.
No en vano, según Taroncher, este colectivo debía estar en el grupo 1 de vacunación con los centros al tratarse de recursos residenciales que acogen a personas con trastornos mentales graves. Sin embargo, éstos no fueron incluidos en este grupo. Circunstancia por la que no solo Aerte, sino también desde la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas que dirige Mónica Oltra pidieron el pasado 10 de febrero, de manera formal a la Conselleria de Sanidad, la inclusión de este colectivo entre los grupos que necesitaban vacunación.
