VALÈNCIA (EP). Los Colegios de Médicos de la Comunitat Valenciana registraron en 2021 un total 50 agresiones a facultativos (el 58 por ciento mujeres y 42% hombres), un 16 por ciento más que el año anterior, según los datos del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), que reflejan que, en el conjunto del país, la cifra ascendió a 612 agresiones, un 39% más que en 2020 (441).
Los datos se han hecho públicos con motivo de la celebración este sábado del Día Europeo contra las Agresiones a Sanitarios. De las 50 agresiones, 29 se registraron en Valencia, 15 en Alicante y seis en Castellón, según los datos aportados por los respectivos colegios.
Desde las tres entidades colegiales se subraya que las cifras no representan la totalidad de agresiones que se producen en la provincia sino solamente las que denuncian los facultativos en los Colegios de Médicos, por lo que se producen más agresiones de las denunciadas.
Por provicias, los servicios jurídicos del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Valencia (ICOMV) registraron 29 agresiones a médicos y médicas de la provincia en 2021, un 30% más que el año anterior (22). Se trata del mayor registro de la última década.
En esta provincia, el 48% de los ataques se produjeron en la Atención Primaria, especialmente hacia las mujeres, ya que fueron objeto de ataques en 18 ocasiones frente a las once de sus compañeros varones. El resto se repartieron entre hospitales, servicios a domicilio y clínicas privadas o mutuas.
En todos los casos registrados se produjeron insultos y vejaciones. En 19, se profirieron, además, amenazas y coacciones y en 10 casos hubo lesiones.
El principal motivo por el que se produjeron las agresiones fue discrepancias con la atención médica, mal funcionamiento del centro, discrepancias personales, y no recetar lo que el paciente exigía.
En el caso de Alicante, el COMA ha registrado 15 denuncias por amenazas y agresiones a profesionales médicos en 2021, aunque la entidad señala que esta cifra es solo la "punta del iceberg".
De las 15 notificaciones registradas, tres menos que en 2020, ocho fueron por amenazas, seis por insultos/difamaciones y una física, siendo las víctimas ocho mujeres y siete hombres. Los incidentes se produjeron en el sistema público (excepto un caso) y la mayoría en Atención Primaria. Respecto a los motivos de la agresión, destacan las discrepancias con la atención recibida.
El presidente del Colegio, el doctor Hermann Schwarz, alerta de que no todos los médicos agredidos notifican el incidente, por lo que insta a los colegiados a que comuniquen "todo tipo de agresión al Departamento Jurídico del Colegio para que estos hechos no vuelvan a repetirse".
"Hay que concienciar a la población y a los profesionales para luchar contra las agresiones en el ámbito sanitario. Hay que cuidar al que cuida, con lo cual el mensaje de tolerancia cero es vital", ha insistido.
En el caso del Colegio de Castellón registró seis agresiones, el doble de las de 2020, tres de ellas a doctoras. Para la entidad colegial, estos datos "hacen que sea preciso la adopción de medidas urgentes para atajar las agresiones que rechazamos contundentemente, ya sean físicas o verbales" y ha reclamado campañas de sensibilización ciudadana.
Las agresiones, en su mayoría insultos y amenazas, se produjeron en centros de salud de Atención Primaria --cuatro--, de ellas dos contra médicas, y otras dos en los hospitales. Tan solo en un caso se produjeron lesiones físicas. Cuatro de los seis presuntores agresores denunciados, eran personas de mediana edad, entre 40 y 60 años. Según los datos de que dispone el COMCAS, tres de las denuncias formuladas están vinculadas con la Covid-19.
La asistencia telemática generó alguna de las denuncias por conductas agresivas, en este caso contra una médica. En los meses de febrero a abril se registraron tres agresiones y otras tantas entre agosto y octubre.
En esta misma línea, el COMCAS señala que el número de agresiones registradas no se corresponde con el total de las que han sufrido los profesionales, puesto que la mayoría trabajan en centros dependientes de la Conselleria de Sanidad, bien sea en hospitales o centros de salud, por lo que las denuncias las canaliza la administración.
En todo caso, "somos conscientes de que hay una infradeclaración de las agresiones", por lo que "animamos a nuestros compañeros a denunciar para que se visibilice este problema", ha señalado la entidad, que señala que este año ya se han registrado casos de coacciones y amenazas de negacionistas y antivacunas contra médicos y personal sanitario, como las producidas en enero pasado contra un equipo de pediatras que acudieron a un colegio de Vila-real a vacunar a los alumnos contra la Covid-19.
El Colegio de Médicos de Castellón reitera su propuesta de crear un registro único de agresiones, una petición que ya trasladó a la consellera de Sanidad, Ana Barceló en junio de 2018, "porque este problema no cesa y es necesario trabajar de forma coordinada para prevenir y erradicar estas acciones".
Los sanitarios españoles han sufrido en 2021 un total de 612 agresiones, lo que supone 171 casos más que en 2020, por lo que se ha producido un aumento del 39 por ciento, lo que sitúa la cifra total desde 2011 en 5.649 agresiones. De todas las agresiones sufridas el 62 por ciento corresponde a mujeres frente al 38 por ciento de los hombres, un dato que consolida la tendencia de los últimos años en los que las mujeres sufren la mayor parte de las agresiones.
El ámbito de la Atención Primaria, que supone más de 50% de los casos (51,1%) se mantiene a la cabeza de las estadísticas, seguido de los Hospitales que sube cinco puntos y se sitúa en el 22 por ciento; Urgencias de Atención Primaria (7,9%) y Urgencias de Hospitales (7,7%). Las agresiones en atención domiciliaria "in Itinere" suponen ya el 1,7 por ciento del total.
La principal causa de agresiones es la discrepancia con la atención médica recibida que, aunque desciende respecto al año pasado, lo que supone el 35 por ciento del total. Aunque en menor medida, también son motivos de agresiones las discrepancias personales (14%); el tiempo en ser atendido (12%) y no recetar lo propuesto por el paciente (10%), entre otras.
Las agresiones relacionadas con la covid-19 sube dos puntos y se sitúa en el nueve por ciento del total. Destaca también el incremento del cinco por ciento al nueve por ciento en las agresiones relacionadas con la gestión de la incapacidad temporal (IT).