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Seis multinacionales de la automoción se disputan el contrato millonario de los híbridos de la EMT

IVECO, MAN, Volvo, Solaris, King Long y Vectia compiten en los dos lotes. Las empresas han presentado las ofertas y están ahora en fase de estudio. La inversión final del Ayuntamiento de València superará los 10 millones de euros

14/02/2017 - 

VALÈNCIA. Es el contrato del año. De muchos años. La Empresa Municipal de Transportes de València ha puesto en marcha un concurso para la adquisición de 35 autobuses híbridos. El mismo se abrió a principios de año, consta de dos lotes y a él han acudido seis de las grandes multinacionales de automoción. De todos los países. 

La alemana MAN, la sueca Volvo, la italiana IVECO, la española Vectia (creada en 2013 por Carrocera Castrosua y CAF), la polaca Solaris y la china King Long se disputan estos dos lotes cuyo coste final superará los 10 millones de euros, teniendo en cuenta que cada autobús híbrido tiene un coste aproximado de 300.000 euros.

El concurso se encuentra en estos momentos en fase de estudio, una vez se produjo la apertura pública de las ofertas. Para la EMT valenciana se trata de una de las grandes apuestas de la legislatura, si no la más importante, ya que permitirá que la empresa municipal pase de tener 7 a 42 vehículos híbridos. Con dos ventajas: gastan menos combustible y contaminan menos. 

De hecho, aunque los autobuses híbridos son en torno a un 20% más caros que los normales, se considera que a largo plazo son mucho más rentables por su bajo consumo. Estos vehículos, propulsados alternativamente por motores eléctricos y diésel, necesitan un 28 % menos de combustible y reducen en la misma proporción las emisiones de CO2. También disminuyen otros contaminantes como el monóxido de carbono, los óxidos de nitrógeno, los hidrocarburos y las partículas en suspensión.

A medio plazo, autobuses eléctricos

La apuesta por los híbridos tiene una vertiente económica y de futuro, y otra también medioambiental. De hecho, desde la propia EMT aseguraban este lunes en un comunicado que “a medio plazo” su apuesta son los autobuses eléctricos que pueden circular sin emitir gases contaminantes a la atmósfera. Así, la empresa ha sacado también a concurso la adquisición de dos autobuses eléctricos.

La EMT ha diseñado un protocolo de actuación integral, gracias al cual cada año emitirá 600 toneladas menos de CO2 a la atmósfera. El objetivo es reducir un 30 % las emisiones contaminantes en 2030. La flota de autobuses es la que más consumo genera del consistorio, el 97 % del total, y es en este punto donde se centran las principales actuaciones durante los próximos meses. Dentro de este protocolo es donde se contempla la renovación de los autobuses más antiguos por otros más ecológicos.

EMT Valencia también contempla implantar, a partir de ahora, aceites lubricantes de última tecnología y baja viscosidad, que reducen un 6 % el consumo de combustible. Además, prevé establecer un sistema de gestión energética inteligente que reducirá un 5 % los consumos gracias a la sensorización y los nuevos parámetros de conducción eficiente y mantenimiento preventivo. Los conductores y conductoras han iniciado ya cursos de formación para adquirir hábitos de conducción que reduzcan notablemente los consumos energéticos.

Un compromiso que está también por escrito, porque EMT Valencia se ha convertido en la primera empresa de transporte público colectivo inscrita en el registro de la huella de carbono del Ministerio de Medio Ambiente, con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero tanto en la flota de autobuses, como en sus cocheras y oficinas. De manera paralela, y con la voluntad de reducir aún más sus consumos energéticos, la compañía también pasa a ser pionera en implantar la normativa internacional ISO 50001.

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