El vicepresidente Martínez Dalmau hace un selfie a los miembros del Consell en el seminari de Montanejos. Foto: ANTONIO PRADASVALÈNCIA. La nueva normalidad tras el azote de la pandemia se acerca y coincide con lo que debería ser el décimo Seminari del Govern del Botànic. Una tradición instaurada por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en enero de 2016 destinada a celebrar un fin de semana de trabajo con los responsables autonómicos del Ejecutivo que sirviera para fijar objetivos semestrales y hacer balance del periodo pasado.
Ahora bien, a día de hoy todavía no está decidido sobre si se tendrá lugar esta décima edición de estas convivencias del Botànic que ahora conforman PSPV, Compromís y Unides Podem. Lógicamente, resulta complicado asegurar que este tipo de cita sea factible en las próximas semanas, concretamente a mediados de julio tal y como se ha venido celebrando en los últimos años. A día de hoy, los datos sanitarios permiten ser optimistas: la Comunitat Valenciana, tras el traspiés inicial en el primero paso de fase, ha ido superando el listón impuesto por el Gobierno de España en las últimas semanas. Tanto es así que desde el Consell se prevé que no habrá problema para transitar a la Fase 3 del desconfinamiento el próximo lunes 15 de junio.
Este es uno de los factores que invita a altos cargos del Gobierno valenciano, especialmente de Compromís, a ver con buenos ojos la celebración de un seminario en la recta final del mes de julio. En este sentido, abogan por un encuentro cuya esencia gire en torno a la reconstrucción después tras la pandemia. Una cita que, a juicio de fuentes de la coalición valencianista, podría servir para construir un relato transversal desde cada una de las consellerias que sirva para coordinar la acción de gobierno en los próximos seis meses, especialmente en lo que se refiere a la recuperación económica y al control de posibles repuntes sanitarios.
Una posibilidad que, a día de hoy, no se descarta aunque existen dudas que se concentran principalmente en Presidencia de la Generalitat, desde donde prefieren esperar unas semanas más antes de tomar una decisión a la espera de que constatar que el retraimiento del virus se confirme. Distintas fuentes consultadas sobre este asunto admiten que a día de hoy todavía no hay una decisión tomada sobre el seminario e incluso se plantean algunas alternativas, como la de celebrar una jornada de trabajo que no incluya la estancia para limitar riesgos, una opción que no termina de convencer a Compromís.
De celebrarse este seminari, la lógica seguida desde el Gobierno valenciano indica que el próximo cónclave de estas características debería celebrarse en el interior de la provincia de València, dado que el último tuvo lugar entre Xàbia y Dénia (Alicante) y el penúltimo en Montanejos (Castellón). En este punto, aunque todavía no está decidido, varias demarcaciones podrían reunir las condiciones adecuadas para la celebración del seminari, más aún si como en otras ediciones se comparte entre dos municipios.
Una de las opciones que algunos dirigentes apuntan es la de que se celebre en la comarca Requena-Utiel, que ha sufrido tasas altas de afección en la crisis del coronavirus y que además reúne condiciones en las que Puig ha hecho hincapié en los últimos tiempos, como la lucha contra la despoblación y el envejecimiento. No obstante, otras fuentes consultadas apuestan por algún municipio del interior de La Ribera Alta o Baixa, que todavía no ha acogido ningún seminari del Consell.
