El primer edil asegura que PP y PSPV venían planeando la medida desde hace meses y que la destitución a los socialistas de sus delegaciones no ha sido la causa
VALÈNCIA. La presentación de la moción de censura, el pasado martes y tal como adelantó este diario, de los tres concejales del grupo popular y de los dos del grupo socialista, ha desatado la controversia en Loriguilla, una localidad de apenas 2.000 habitantes ubicada en la comarca del Camp de Túria.
Los cinco concejales firmantes llevaron a cabo la medida escasos días después de que el primer edil acordara destituir de sus delegaciones a los dos del PSPV, que hasta mitad de este mes configuraban el equipo de gobierno junto a los cuatro de Ciudadanos, el partido bajo cuyas siglas se presentó el alcalde, Sergio Alfaro, en 2015 y 2019. Arremeten contra "las formas" del máximo munícipe.
Tanto las dirección provincial popular como la autonómica socialista les han desautorizado, ya que no consienten a sus afiliados pactos entre sus formaciones. No obstante, a sabiendas de lo que ocurriría, los cinco se dieron de baja como militantes de sus respectivos partidos en la misma tarde del martes 24, el día en que registraron, a las 14 horas, la polémica moción de censura.
Hasta ahora el alcalde había ceñido sus comentarios sobre los sucedido a un escrito en su página de Facebook el miércoles en el que arremetía contra sus contrincantes y en un comunicado que difundió el jueves. Ahora, en conversación con Valencia Plaza, explica que confía en que la moción de censura que le despojará del sillón presidencial no fructifique.
"Espero que reflexionen, ya que esto es un bochorno para Loriguilla, y que la moción de censura no salga adelante", apunta. Para que eso sucediera alguno de los cinco ediles no debería de votar a favor en el pleno convocado. Sobre en qué se basa para mantener esa esperanza de que el día 7 de junio la mayoría de la corporación no escoja a Carlos Rodado como alcalde, insiste en que "este pacto de perdedores no tiene razón de ser. Sus propios partidos los han desautorizado. Estamos hablando de tránsfugas".
Niega que su decisión de cesar en sus delegaciones a los dos concejales del PSPV haya sido el detonante de la moción de censura. "Ese pacto no es una cuestión de ahora, sino que venían ya planificándolo desde hace tiempo. Me han faltado al respecto continuamente y provocaron que la situación fuera inaguantable. Por eso los destituí. Era muy difícil trabajar de este modo en equipo", añade. Lamenta, eso sí, que "mientras que yo les comuniqué mi decisión a la cara, ellos presentaron la moción de censura a mis espaldas".
Se siente refrendado por sus convecinos, "de los que estoy recibiendo muchas llamadas de apoyo. La gente está asombrada". Tanto, que vaticina que si prospera la moción de censura, "el pueblo se lo hará pagar. En el 90% de los casos quien llega hasta el extremo que han ido no sale bien parado en las siguientes elecciones".
Sobre qué piensa hacer en la semana y media que, teóricamente, si triunfa la moción de censura, le queda de alcaldía, Alfaro afirma que "trabajar a tope con los proyectos que tenemos entre manos. De hecho, las fiestas patronales, por ejemplo, ya están organizadas. Estamos tranquilos y seguimos con nuestra labor".