Foto: MUSIC PORT FESTVALÈNCIA. El contrato de patrocinio que el Ayuntamiento de Sagunto firmó con el Music Port Fest contemplaba servicios que no se realizaron o no se podían realizar. Según ha podido saber Culturplaza, algunas de las acciones comunicativas reflejadas para la promoción del festival, y por ende, de Sagunto como marca turística, no se llevaron a cabo.
Es el caso de la campaña de movilidad en los autobuses de la EMT. La empresa externa que gestiona la publicidad exterior y las marquesinas, no tiene constancia de ninguna acción que tuviera que ver con el festival de este año. Sin embargo, sí aparece reflejado en el contrato firmado el mismo día que se celebraba el evento.
El Ayuntamiento de Sagunto inyectó 100.000 euros al Music Port Fest a horas de su celebración
En el mismo documento, se refleja una supuesta inversión publicitaria en medios de comunicación digitales especializados en música y cultura, al igual que ocho notas de prensa para la presentación y promoción del contenido del evento y una campaña en prensa, radio y televisión para publicitarlo. El objetivo sería "impactar en un total de 1.000.000 de personas" y "situar al municipio de Sagunto como referente de turismo musical y de ocio vacacional".
La realidad de cómo acabó siendo es bastante distinta: la presencia que tuvo el festival en los principales medios de comunicación musicales, tanto regionales como estatales, fue bastante limitada. Por el contrario, el festival sí tuvo una presencia destacada en redes sociales, y en todas sus promociones utilizaron el logo del Ayuntamiento de Sagunto en un lugar destacado, algo que se le exige a la promotora en el contrato de patrocinio.
Hay que tener en cuenta que aunque se hubiera cumplido absolutamente todas las acciones que estaban previstas en el contrato, seguiría produciéndose una situación irregular, ya que el plazo de ejecución se limita desde la firma del contrato hasta la finalización del evento. En este caso, el plazo sería desde la mañana del viernes 5 de julio hasta el domingo 7. Todos los trabajos previos no servirían, porque legalmente, un Ayuntamiento no puede hacer un contrato a posteriori por unos servicios que no ha controlado ni firmado.
Sobre el papel se crea una situación curiosa, y es que le pide a la empresa que el 6 de julio la creación de soportes publicitarios que incluiría desde el diseño del cartel hasta la impresión de 10.000 carteles y 60.000 flyers, que se tendrían que distribuir en toda la provincia de València.
Este diario se ha puesto en contacto con la promotora Avant Pro Solutions para contrastar esta información, pero al cierre de la edición no ha prestado aún su versión.
Por otra parte, dentro de los 110.000 euros que abonó el Ayuntamiento, 24.000 son en concepto a la compra de 300 abonos para el festival. 200 de ellos se pagaron a 70 euros cada uno como entrada general, mientras que los otros 100 costaron 100 euros por ser VIP. Sin embargo, y a pesar de estar firmado el mismo día de la celebración, el Ayuntamiento ha abonado por cada entrada 5 euros de sobrecoste, ya que el precio máximo de mercado al consumidor era, respectivamente, 65 y 95 euros.
Las entradas adquiridas con dinero público no se pudieron sortear ni repartir de manera pública por la premura con la que se hizo todo. Así lo explican fuentes del Ayuntamiento; y añaden: "se repartieron entre todos los partidos políticos del Consistorio para que hicieran promoción del festival y de la ciudad, siguiendo los criterios que cada partido considerase oportunos. Por parte del Partido Socialista y de alcaldía, la mayoría de las entradas se distribuyeron entre el equipo de periodistas del Gabinete de Comunicación del Ayuntamiento, en línea con la idea de promoción y publicidad y para que no tuviesen problemas de acceso; y entre las personas del Área de Igualdad implicadas en la organización del Punto Violeta (además de las voluntarias del Punto Violeta, que ya tenían garantizado el acceso)".
Por otra parte, también fuentes del Ayuntamiento de Sagunto explicaron que el sentir de la nueva corporación (que cambió tras las elecciones de este año) es el de "que se cumpla escrupulosamente la legalidad y los términos que se firmaron". En este sentido, se podría revisar qué se ha cumplido y qué no del contrato con la mirada puesta en poder pedir un reembolso de parte del dinero inyectado.
Y es que, aunque todos los partidos que actualmente forman el gobierno municipal aprobaron los presupuestos donde estaba destinada la partida a fondo perdido para el Music Port Fest, tanto los departamentos de Alcaldía como Cultura se pusieron a funcionar tras el periodo electoral a pocos días de la celebración del festival.
Desde el Ayuntamiento confirman que ya están trabajando en hacer en plazo y de manera regular la inyección de este año y asegura que hará lo propio con Festardor
