CASTELLÓ. La multinacional noruega de Statkraft da un paso más con la macroplanta solar de Arada Solar que ha proyectado en 280 hectáreas de la Plana Baixa, una de las más grandes de la provincia de Castellón, y acaba de solicitar licencia para iniciar la construcción, que ha previsto iniciar en 2025 con una inversión cercana a los 100 millones de euros. Pero al mismo tiempo limita la petición de declaración de utilidad pública a la red de evacuación y deja fuera los terrenos donde prevé instalar los paneles fotovoltaicos. Su objetivo es evitar expropiaciones y llegar a acuerdos con los propietarios, según la empresa.
La promotora se presta a negociar para conseguir las parcelas -campos de cultivos de cítricos- a la vista del rechazo que genera el proyecto entre las organizaciones agrarias y la Generalitat por el impacto en el paisaje de la Plana Baixa. De hecho, la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio ha anunciado que presentará un recurso contencioso-administrativo contra la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable del Ministerio de Transición Ecológica.
Consciente de ello, Statkraft elude utilizar la vía de la expropiación en la superficie adscrita a los paneles solares. De ahí que en los últimos tramites previos a la obra haya optado por no pedir la declaración de utilidad pública (DUP) y solo la requiere para la infraestructura de evacuación.
La compañía informa que buscará "llegar a acuerdos" con el mayor número de propietarios, tanto con suelo en la planta fotovoltaica como en la línea de evacuación. "La solicitud de DUP para la línea de evacuación y la subestación es un procedimiento habitual para este tipo de proyectos dada la dificultad para comunicarse con los propietarios afectados, no obstante, la intención es alcanzar un acuerdo con todos ellos", remarca la compañía.
Para contactar con los propietarios, la empresa ha instalado un punto de información al ciudadano en La Vall D’Uixó, y pone en valor que arrendará el 25 % de la superficie para cultivos tradicionales.
Las últimas solicitudes presentadas para impulsar Arada Solar encaran ahora su exposición pública en el área de Industria y Energía de la Subdelegación del Gobierno. Contemplan, además de la declaración de utilidad pública de la red de distribución y la autorización de construcción de la planta solar, una modificación del proyecto en base a las conclusiones de la Declaración de Impacto Ambiental, que fue aprobada en diciembre de 2023.
Tras la DIA, el proyecto se ha ajustado un 14 %, pasando de 304,79 hectáreas a 262,339, de las que 77 ha están destinadas a los paneles fotovoltaicos. En el resto, una parte seguirá con explotaciones agrarias, tal como reitera la empresa, y en otra se promoverán las campañas de conservación ambiental que demanda la DIA, como seguimiento de avifauna y quirópteros y la instalación de elementos salvapájaros en la línea aérea y de cajas nido. La rebaja de paneles ha ajustado la potencia energética, de 155 megavatios hasta los 139,4.
El proyecto está compuesto por una planta solar con 236.280 módulos y 40 centros de transformación que abarcarán terrenos de Xilxes, Moncofa y la Vall d'Uixó; una subestación de 30/220 kv en la Vall; una línea de evacuación de 18,2 kilómetros que abarcará los términos de la Vall, Nules, Burriana, Alqueries, Vila-real y Betxí; y un centro de seccionamiento y línea subterránea de 420 metros en Betxí.
Con Arada Solar, Statkraft pretende producir 5.400 toneladas anuales de hidrógeno verde desatinar al clúster cerámico.