VALÈNCIA. La llegada del verano y del tiempo libre trae consigo que muchos jóvenes aprovechen la oportunidad para buscar sus primeros empleos o bien conseguir más experiencia en el mundo laboral, principalmente en sectores como la hostelería, el turismo o el comercio, que son los que requieren más personal en la época estival. En el caso de la Comunidad Valenciana, también se añade el sector del entretenimiento, ya que durante los meses de verano se celebran festivales de música y conciertos en todo el territorio. En este escenario, los contratos laborales entre los jóvenes aumentan considerablemente.
Si miramos las últimas cifras de paro publicadas, que corresponden al segundo trimestre de este año, vemos que el desempleo entre los menores de 25 años disminuyó y dejó la tasa de paro en el 24,71%, 2,91 puntos por debajo de la registrada en los tres primeros meses. Este descenso está estrechamente relacionado con las oportunidades laborales que surgen en este periodo del año.
Además, los datos laborales a nivel general señalan que se han registrado casi 67.000 contratos en la Comunidad Valenciana durante la campaña de verano, un 18,6% más que el año anterior cuando se registraron casi 59.000 contratos. Por provincias, Valencia lidera con más de 36.590 firmas (+22,4% respecto al año anterior), seguida de Alicante con 24.050 contratos (+13,1%) y Castellón con 9.050 nuevos empleados (+19,1%). Estos datos reflejan un incremento significativo en la demanda de trabajadores, situando a la Comunidad Valenciana como la segunda comunidad autónoma con mayor incremento de vacantes para esta campaña de verano, después de Cantabria.
En este contexto, es primordial destacar la campaña de reclutamiento llevada a cabo para la época de verano, la cual destaca por la demanda de perfiles que, generalmente, ocupan los jóvenes. Desde Randstad, en línea con nuestra ambición de ser la compañía de talento más equitativa y especializada del mundo y ayudar a las personas a desarrollar su potencial, buscando oportunidades laborales, este año hemos cubierto con éxito el 100% de las vacantes para los conciertos de verano celebrados durante el mes de julio en el territorio. En concreto, los profesionales contratados han podido aprender habilidades fundamentales como la responsabilidad, la puntualidad, la gestión del tiempo y el trabajo en equipo. Además, han tenido la oportunidad de trabajar en un entorno tan dinámico como un festival de verano, lo que les enseña a manejar situaciones imprevistas y a desarrollar su capacidad de resolución de problemas. Estas competencias son altamente valoradas en cualquier sector profesional y preparan a los jóvenes para enfrentar los desafíos del mercado laboral.
Por lo que respecta a los perfiles más demandados en esta campaña, han sido principalmente camareros de barra y controladores de acceso. En el caso de los camareros de barra, generalmente tenían estudios universitarios o de grado y fueron seleccionados por su entusiasmo, habilidades interpersonales y competencia en el manejo de bebidas. Por su parte, los controladores de acceso fueron seleccionados con o sin formación académica, aunque se valoraron especialmente sus habilidades para gestionar incidencias de manera proactiva y su buen trato hacia el público.
En detalle, los candidatos seleccionados eran jóvenes con o sin estudios universitarios o de grado. Aunque no se exigía una formación académica específica, se valoraba positivamente cualquier experiencia laboral previa y, especialmente, las habilidades interpersonales, que son cruciales para interactuar eficazmente con el público.
En definitiva, desde Randstad observamos que la disminución del paro juvenil en Valencia durante la época estival es un claro ejemplo de cómo la celebración de festivales y conciertos puede tener un impacto positivo tanto en la economía como en el empleo juvenil de la región.