VALÈNCIA (EP). El Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) ha tumbado este viernes los acuerdos comerciales de agricultura y pesca entre la UE y el Reino de Marruecos por considerar que ambos se celebraron sin el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental.
El TJUE ha puesto fin así al litigio sobre el acuerdo pesquero con Marruecos y su protocolo, al desestimar los recursos del Consejo y la Comisión, en línea con la sentencia del Tribunal General de la UE de 2021 y con las conclusiones de la Abogada General Tamara Cápeta.
La aplicación de este protocolo expiró el pasado 17 de julio de 2023, lo que supuso la suspensión de la actividad, algo que afecta especialmente a España, ya que 92 de las 138 licencias que faenan en la zona corresponden a su pabellón, en concreto, a la flotas andaluza, gallega y canaria.
Fue el Frente Polisario, que afirma representar al pueblo del Sáhara Occidental, quien presentó una serie de recursos de anulación para impugnar ambos acuerdos, ya que se habían celebrado sin el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental.
La sentencia de este viernes constata que ese consentimiento no existe y considera al Frente Polisario como un interlocutor privilegiado en el marco del proceso y que cumple los requisitos para poder impugnar estos acuerdos en interés del pueblo saharaui.
No obstante, el TJUE precisa, al contrario de lo que declaró el Tribunal General, que el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental a los acuerdos controvertidos no debía ser necesariamente explicito, es decir, que puede darse por hecho cuando no se crean obligaciones para ese pueblo y la explotación de sus recursos naturales le reporta algún tipo de ventaja.
Al respecto, el Tribunal de Justicia reconoce que estos acuerdos no crean obligaciones jurídicas que recaigan sobre el pueblo del Sáhara Occidental, pero tampoco le confieren ningún derecho ni ventaja sobre la explotación de sus recursos, por lo que el consentimiento no puede presumirse, sumado a que el Frente Polisario, en calidad de representante legítimo de dicho pueblo, se opone a los acuerdos, lo que a juicio del TJUE basta también para cuestionar la existencia del consentimiento.
En base a los mismos principios, el Tribunal de Justicia se ha pronunciado también sobre una cuestión prejudicial francesa acerca de la problemática del origen de los melones y tomates del Sáhara Occidental y dicta que su etiquetado debe indicar únicamente el Sáhara Occidental como país de origen de esos productos, excluyendo cualquier referencia a Marruecos, para evitar inducir a error al consumidor sobre su verdadero origen.
Comisión Europea (CE) aseguró este viernes que buscará seguir reforzando la "estrecha relación" que mantiene con Marruecos, después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) anulara los acuerdos comerciales entre la UE y ese país.
"La CE analiza actualmente la sentencia en detalle; en ese contexto, vemos que el TJUE preserva la validez del acuerdo sobre los productos agrícolas durante otros 12 meses", indicó durante la rueda de prensa diaria de la Comisión la portavoz Nabila Massrali.
Según dijo, la UE "pretende firmemente preservar y continuar reforzando la estrecha relación con Marruecos en todos los aspectos de la asociación UE-Marruecos de acuerdo con los principios de ‘pacta sunt servanda’” (cumplimiento de los pactos).
La portavoz reiteró "la gran importancia que la UE concede a su asociación estratégica con Marruecos, que es de larga duración, vasta y profunda".
"Al cabo de los años hemos sembrado una amistad profunda y una cooperación sólida y pluriforme que nos proponemos llevar a un nivel superior en las próximas semanas y meses", indicó.
Dicho eso, señaló que la CE toma nota de las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE sobre el recurso contra la sentencia del Tribunal General (primera instancia) del 29 de septiembre de 2021 sobre los pactos de comercio agrícola y pesquero con Marruecos.
No obstnate, el Gobierno de Marruecos ha afirmado que no se considera "aludido de ninguna forma" por el fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y ha "exigido" a la UE y a sus Estados miembros que "adopten las medidas necesarias para respetar los compromisos" firmados, habida cuenta de la alianza "estratégica" entre ambas partes.
El Ministerio de Exteriores marroquí ha afirmado en un comunicado que Rabat no ha participado en el proceso judicial, situando a la UE "en una parte" del tablero y, en la otra, al Frente Polisario, de quien partió precisamente el recurso que ha terminado por tumbar los dos acuerdos este viernes.
"Marruecos no ha participado en ninguna de las fases del procedimiento y, por tanto, no se considera aludido de ninguna manera por la decisión" del tribunal europeo, según la nota recogida por la agencia de noticias oficial MAP.
Sin embargo, sí ha cargado contra el contenido de la sentencia, ya que Rabat entiende que incurre en "errores jurídicos evidentes" y en análisis "sospechosos". "Denota en el mejor de los casos un desconocimiento total de las realidades del dosier, si no un sesgo político flagrante", ha apostillado.
El Gobierno marroquí, que cree que el TJUE busca "sustituir" a los organismos de la ONU responsables de esta disputa territorial, ha dejado claro que en ningún momento suscribirá acuerdo alguno "que no respete su integridad territorial y su unidad nacional", dentro de la cual sitúa al Sáhara Occidental.
La sentencia de este viernes, sin embargo, justifica la ilegalización de los acuerdos comercial y pesquero en que ambos se celebraron sin el consentimiento de la población del Sáhara Occidental, que considera representada por el Frente Polisario.
Además, la Confederación Marroquí de Agricultura y Desarrollo Rural (Comader, la única patronal agrícola del país) exigió este viernes a la UE que garantice la "seguridad jurídica de los operadores económicos" marroquíes y comunitarios.
"Consideramos que la Unión Europea y sus estados miembros tienen que respetar sus compromisos internacionales con Marruecos y garantizar la seguridad jurídica de los operadores económicos de las dos partes", dijo a EFE el presidente de Comader, Rachid Benali.
Benali expresó además su adhesión a la posición de Marruecos de rechazar cualquier acuerdo con la UE que no reconozca la soberanía marroquí "completa" sobre el territorio del Sáhara Occidental, administrado por Marruecos y disputado con los independentistas saharauis del Frente Polisario.
Frente a esto, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha manifestado el respeto del Gobierno por la decisión del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) de tumbar los acuerdos comerciales de agricultura y pesca entre la UE y Marruecos, al tiempo que ha reivindicado la "asociación estratégica" con el reino alauí y la voluntad de mantenerla.
"Respetamos las decisiones del Tribunal de Justicia de la Unión Europea", ha manifestado Albares durante su comparecencia ante la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados después del fallo dictado por el máximo tribunal europeo por considerar que los citados acuerdos se celebraron sin el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental.
Tras asegurar que el sector pesquero contará con "todo el apoyo" del Gobierno, el ministro ha puesto en valor la "asociación estratégica" entre la UE y Marruecos para ambas partes y también para España y los "beneficios" que ha reportado tanto al sector pesquero como al agrícola.
Pero también, ha añadido, "frente a Ceuta y Melilla en la defensa de nuestras fronteras" así como en el plano comercial, con un comercio que alcanzó los 22.000 millones de euros, solo superado por el comercio con Estados Unidos y Reino Unido.
"Nuestra apuesta y nuestro compromiso con la estabilidad de la relación con Marruecos es firme y no se va a ver alterada", ha recalcado Albares, asegurando que el Gobierno va a seguir "trabajando con la Unión Europea y con Marruecos para preservar y seguir desarrollando esta relación, naturalmente dentro del marco del ordenamiento jurídico".
"España va a seguir impulsando, y muchos otros países también, la mayoría, esa relación privilegiada entre la Unión Europea y Marruecos". ha rematado, después de que algunos de los portavoces le hubieran preguntado sobre el fallo judicial y sus consecuencias.