VALÈNCIA. El presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo, ha defendido este lunes la necesidad de ampliar el Puerto de Valencia para evitar que se agote su capacidad a medio plazo, pero no ha descartado que el proyecto tenga que retrasarse si finalmente se determina que la obra requiere tramitar una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA). Al respecto, ha subrayado que la necesidad de este examen ambiental es una cuestión de “legalidad” y ha aclarado que Puertos del Estado decidirá al respecto con criterios técnicos cuando el Puerto de Valencia le remita de manera oficial y completa el anteproyecto definitivo con los últimos cambios: la renuncia al dragado del canal de acceso y a la prolongación del dique principal.
El presidente del organismo dependiente del Ministerio de Fomento se ha pronunciado de este modo en el primero de los debates del encuentro público online organizado por la Fundación Scito y la Cátedra de Cultura Territorial Valenciana sobre la ampliación del recinto portuario, en el que han participado también el presidente del Puerto de Valencia, Aurelio Martínez; el conseller de política Territorial, Arcadi España; y el alcalde de València, Joan Ribó.
Toledo, que no ha participado en directo pero ha realizado una intervención grabada, ha destacado que el Puerto de València es uno de los pocos que “claramente” necesita una ampliación por el hecho de que tiene los diques de abrigo hechos tras una inversión “tremenda” realizada entre 2008 y 2012 que “hay que rentabilizar”.
A su juicio, el Puerto de València está en condiciones de “liderar” la incorporación de mejoras medioambientales a su operativa porque la ampliación puede ser “piedra de toque para ser un ejemplo de máxima protección ambiental”. Para Toledo, el debate sobre su ampliación “muchas veces ha sido más pasional que racional”.
En este sentido, el expresidente del Puerto de Castelló ha lamentado algunas posturas “no razonables” encaminadas a acabar con los puertos. Además, ha señalado que la participación de la sociedad en el debate ha de ser “motivo de alegría”. “Es fundamental que la ciudad y el puerto recuperen el diálogo porque han de ser una parte de un modelo de desarrollo compartido y sostenible”, ha destacado.
Sobre los últimos cambios del Puerto de València en el anteproyecto de ampliación, la renuncia al dragado o al alargamiento del dique, ha asegurado que “mejoran el impacto del proyecto y demuestran que el puerto escucha”.
Con todo, sobre la necesidad de que el Puerto tenga que tramitar una DIA adicional por las modificaciones respecto al diseño original, Francisco Toledo ha aclarado que Puertos del Estado “no se puede pronunciar sobre el anteproyecto porque no tenemos la información oficial”. “Se nos ha trasladado una parte del proyecto, pero no la definitiva ni la oficial. Cuando la tengamos, podremos valorar la ampliación desde el punto de vista técnico”, ha aclarado.
El presidente de Puertos del Estado ha asegurado, además, que el Puerto de València está aprovechando los últimos meses para hacer “el mejor proyecto posible” y ha insistido en que el debate de la DIA es una cuestión de “legalidad” y hay que valorarlo a la vista del anteproyecto. “Es una cuestión meramente técnica. Si hay que hacer una nueva DIA, se tendrá que hacer. Y si eso implica que el proyecto se retrase, se tendrá que retrasar. Cuando tengamos el anteproyecto lo estudiaremos y emitiremos el informe pertinente”, ha asegurado Toledo, quien ha abogado por que el Puerto de València incorpore cualquier propuesta que mejore la sostenibilidad del proyecto de la ampliación norte.
Al respecto, el presidente del Puerto de València aseguró el pasado viernes que confiaba en poder enviar ese anteproyecto a Puertos del Estado a tiempo de poder otorgar la concesión al grupo MSC, que ha presentado la única oferta para explotar la terminal con un compromiso de inversión de mil millones de euros, en el consejo de administración de la APV del próximo mes de septiembre.
Por otro lado, Toledo ha recordado el plan de inversiones productivas que el Ministerio de Fomento va a impulsar con una dotación de 4.000 millones de euros para inversiones en los puertos españoles. Al respecto, ha señalado que se van a primar inversiones productivas relacionadas con la sostenibilidad y la seguridad, mientras que se van a rechazar las que impliquen aumentos de capacidad no justificados.
El alcalde de València, Joan Ribó, ha destacado que, pese a la renuncia del recinto a los aspectos más controvertidos desde el punto de vista medioambiental, aún conviene aclarar si el proyecto requiere una DIA por cuestiones como el impacto visual en el paisaje de las grúas de la nueva terminal y, sobre todo, por el impacto en la movilidad.
“Tenemos un problema ahí que afecta al Puerto y a la ciudad. Es clave analizarlo e introducir parámetros para obligar a que las cosas se hagan como se debe”, ha dicho el alcalde.
Al respecto, Ribó ha trasladado su opinión “totalmente negativa” sobre el acceso norte por su impacto en la huerta al norte de la ciudad. “Se ha de hacer una apuesta muy decidida por el transporte ferroviario. Se necesita un pacto de infraestructuras en la ciudad porque si no se arregla pronto, València se va a convertir en el semáforo de Europa”, ha manifestado Ribó.
Sobre la necesidad de una nueva DIA para finalizar la ampliación, Aurelio Martínez ha destacado que no es legalmente necesaria. “Lo siento, pero es la ley que estoy obligado a cumplir”, ha zanjado Martínez. Además, ha opinado que la sociedad debería reflexionar “sobre si quiere o no puerto” y, en el primer caso, el crecimiento implica tener que hacer nuevas terminales de contenedores. Ahora bien, ha destacado que a esas terminales se les exigirá que apuesten por el ferrocarril, respeten el medioambiente y que sean eficientes, entre otros requisitos.
Aurelio Martínez también ha justificado que la ampliación del Puerto de València es necesaria porque el recinto ya está al 73% de su capacidad total y el comercio mundial va a seguir creciendo. Por ello, y porque quiere continuar siendo un puerto hub, Martínez ha destacado que el recinto dispone de inversores dispuestos a ayudar a ese crecimiento. Además, ha destacado que la ampliación, "que ya está hecha", debe lanzarse ya porque tiene un plazo de maduración muy largo.
“El tráfico marítimo va a seguir creciendo porque el 90% del comercio mundial utilizar el mar y el tráfico marítimo es el más eficiente”, ha explicado el presidente de la APV. “Va a haber una redirección de los flujos comerciales”, ha vaticinado, pero el crecimiento de la población, la creciente urbanización del mundo o la mayor demanda de China van a actuar como estímulo del comercio mundial. “No se va a reducir el comercio internacional. Va a seguir creciendo, aunque posiblemente a menores tasas”, ha destacado Martínez.
Sobre el impacto de la ampliación norte en la movilidad del entorno, Martínez se ha comprometido a impulsar "todo lo que podamos" la conectividad ferroviaria y ha señalado que el aumento del tráfico de camiones será relativo porque la mayoría de contenedores que MSC va a mover en la nueva terminal son de tránsito y, por lo tanto, no salen del recinto portuario.
La APV publicará las respuestas a las alegaciones recibidas tras presentarlas a su consejo
Sobre el proceso de alegaciones al proyecto, cuyo resultado aún no se conoce, Martínez ha anunciado que se harán públicas una vez las conozca el consejo de administración de la APV y ha asegurado que no tiene ningún problema en reunirse con todos los partidos políticos que se lo pidan para explicarles las respuestas de la APV a esas alegaciones.
Por otro lado, durante el debate posterior a las intervenciones, Martínez ha negado tajantemente que en la permuta de los terrenos de la antigua Unión Naval para construir la nueva terminal de pasajeros del Puerto de València haya habido alguna "transacción monetaria". "Fue una permuta en la que el Puerto salió muy beneficiado", ha defendido el presidente de la APV, quien ha asegurado que quien sostenga lo contrario miente y se enfrenta a un posible pleito por calumnias.
Por su parte, el conseller de Política Territorial, Arcadi España, ha asegurado que el debate central es cómo compaginar el crecimiento con la sostenibilidad medioambiental, para lo cual ha apelado a la importancia de la innovación. “Gracias a las nuevas tecnologías, no tenemos que elegir entre crecimiento y empleo o lucha contra el cambio climático”, ha concretado.
Para el titular de Política Territorial, grandes actuaciones como esta han de contar con el mayor apoyo posible y ha elogiado este tipo de debates porque enriquecen la política. España ha destacado la importancia económica y social del Puerto de València, con la generación de 40.000 empleos y una aportación de 2,5 puntos al PIB regional.
España ha destacado que el Puerto de València ha de asumir los retos de la crisis post-Covid “de la mano de la sociedad que lo rodea”, así como fortalecer los lazos del recinto con su entorno, ya que es fundamental para las exportaciones.
El proyecto de la nueva terminal de contenedores y el acceso norte es importante y, como tal, debe ser debatido, ha destacado el representante del Consell, quien ha recordado que “una parte importante” de la ampliación ya está finalizada. “Se han dado pasos y la renuncia al dragado y al dique son fundamentales para tener un puerto sostenible”, ha subrayado España. A su juicio, los puertos no deberían ser un fin en sí mismos y el Puerto de València “no puede actuar como si fuera una isla porque se trata de un proyecto que compete a toda la Comunitat”.
En este sentido, el conseller España ha insistido en la necesidad de reformar la ley de Puertos para que, aquellos que tengan beneficios, repercutan en su entorno parte de esas ganancias, así como en la conveniencia de reforzar la sostenibilidad medioambiental, sin crecimientos “a costa de esquilmar el entorno”.