TORREVIEJA. (EFE).- La ciudad de Torrevieja, que tiene más de 3.200 empadronados ucranianos, se prepara para acoger a partir de las próximas semanas a miles de nacionales de ese país huyendo de la agresión armada de Rusia.
Así se ha puesto de manifiesto al término de una reunión entre el alcalde torrevejense, Eduardo Dolón, del PP, con varias asociaciones ucranianas y rusas presentes en la población, que le han trasladado sus inquietudes aunque también le han expresado que no han surgido problemas entre ambas comunidades, estrechamente relacionadas desde hace décadas.
La presidenta de la Asociación de Ucranianos de Torrevieja, Natalia Zhezhnyauska, ha resaltado su preocupación por la "grave y triste" invasión rusa, y ha afirmado que prevén a lo largo de los próximos días lleguen muchos ucranianos exiliados. Ha explicado que habrá que tramitar sus permisos de estancia en España y para ello el ayuntamiento de Torrevieja ya se ha puesto en contacto con el Cuerpo Nacional de Policía para agilizar los trámites de estas personas.
El alcalde Dolón desconoce el número de personas que puedan venir a la ciudad y, al tiempo que ofrece la ayuda municipal, se pregunta si se pondrá a disposición de los recién llegados el recurso de asilo.
Muchos de los ucranianos que viven en Torrevieja se hallan emocionalmente alterados porque reciben llamadas de sus familias en las que le relatan su dramática situación y el "horror" de, por ejemplo, tener que dormir en el metro de Kiev por miedo a ser bombardeados.
La ucraniana de 21 años Elena Stetsivka, que ha culpado de la situación a Putin porque "el pueblo ruso no tiene ninguna culpa de lo que hace su presidente", opina que miembros de ambas comunidades ayudarán a los muchos compatriotas que lleguen en las próximas semanas huyendo de las bombas en su país.
El colectivo ucraniano ha convocado para el próximo domingo al mediodía una concentración en la plaza de la Constitución para condenar la invasión del ejército de Vladímir Putin, a la cual que se van a sumar residentes rusos.
Es el caso del presidente de la asociación rusa Mir Odin (El Mundo Es Uno), Segey Mogilenski, y su vocal, el también ruso Peter Andrusevich, quienes han expresado este viernes en declaraciones a varios periodistas su "total" rechazo a la política del Gobierno de su país: "Somos rusos pero no estamos de acuerdo con Putin y con su agresión". "Los rusos y los ucranianos de Torrevieja estamos juntos", ha repetido el presidente de Mir Odin, quien ha proseguido que su "obligación es ayudar a los amigos ucranianos" y "cuidar la convivencia".
Prevén que llegarán miles de desplazados a casas de sus amigos y familiares en Torrevieja y resto de localidades de la costa mediterránea para "empezar otra vida", y para ello ya piensan en cómo preparar artículos de primera necesidad y viviendas.
La presidenta de la asociación cultural El Mundo de Globus, la rusa Tatana Semenova, ha querido dejar claro que ucranianos y rusos al sur de la Comunitat Valenciana "no son como hermanos sino que son hermanos; una familia unida". "En este tiempo tan difícil para nuestros países tenemos el mismo problema porque", ha indicado, "todos estamos contra cualquier guerra y a favor de la paz".
Al contrario que sus dos compatriotas, ha aclarado que no irá a la concentración del domingo convocada por la asociación ucraniana no por discrepar sino por miedo a represalias de "algunos radicales" que confunden lo ocurrido y acusan en las redes sociales a los rusos de ser culpables de la invasión.
Peter Andrusevich, de Mir Odin, ha confesado que hay preocupación en conservar la convivencia entre los rusohablantes de Torrevieja y también ha pedido que a los rusos no les identifique con el Gobierno de Putin, cuyas políticas rechazan frontalmente.
"No somos lo mismo (que Putin), estamos en total desacuerdo", ha repetido Andrusevich antes de señalar que, igual que se tardaron varios años en "cicatrizar" las diferencias tras la anexión rusa de la península de Crimea, en 2014, "esta mancha se arrastrará decenas de años".
En todo caso, su asociación de rusos, ucranianos y bielorusos ha detectado que ya ha empezado "el ofrecimiento de casas y pisos para los futuros refugiados y desplazados", sin distinguir la nacionalidad de quienes lo ofrecen.
Y calcula que la cifra de 3.200 ucranianos en Torrevieja se pueda multiplicar por dos o, incluso, por aún más a partir de marzo, y que vendrán escalonadamente en viajes por su cuenta, ante lo cual la comunidad local deberá "estar preparada" para atenderles.