VALÈNCIA. (EP) Un 15,6% de las adhesiones al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de CaixaBank han sido realizadas por trabajadores con 51 años o menos, según el cuadro de adhesiones al que ha tenido acceso Europa Press, lo que supone un total de 1.286 solicitudes.
En concreto, tal y como adelantaba este lunes 'La Información', 1.286 de esas solicitudes pertenecen al colectivo de trabajadores menores de 51 años o que tienen menos de seis años de antigüedad en la entidad, un 15,6% del total de solicitudes.
El proceso de reestructuración de CaixaBank contempla la salida voluntaria de 6.452 trabajadores para las que en total se han presentado 8.246 solicitudes de adhesión.
Por provincias, las solicitudes realizadas en Álava, Almería, Cuenca, Guipúzcoa, Lérida y Tarragona por menores de 51 años representan más del 40% del total de las adhesiones.
Sin embargo, el colectivo que más solicitudes ha presentado es el de empleados que tienen más de 54 años, que representan casi el 71% de todas las solicitudes, hasta 5.845. Por último, el colectivo de empleados de entre 52 y 53 años con más de seis años de antigüedad son el 13,5%.
El esquema de compensaciones para los empleados que dejen la entidad establece tres colectivos en función de la edad. Los empleados de 63 años o más podrán salir del banco con una indemnización de 20 días por año trabajado y los de 54 años o más serán indemnizados con un 57% del salario fijo bruto anual hasta los 63 años (con convenio especial con la Seguridad Social hasta esa edad).
Las primas para los empleados de entre 54 y 63 años son 18.000 euros brutos para los nacidos en 1964 o anteriores, de 23.000 euros brutos para los nacidos en 1965 y de 28.000 euros brutos para los nacidos entre 1966 y 1967. Este grupo tendrá descuento de la prestación mínima bruta por desempleo y mantendrá las aportaciones al plan de pensiones de la empresa y la póliza privada de salud.
Los empleados de 52 y 53 años recibirán siete anualidades del 57% del salario fijo bruto anual repartidas hasta los 63 años (con convenio especial con la Seguridad Social hasta esa edad). Se les abonará una prima adicional de 38.000 euros brutos, descontando la prestación mínima bruta por desempleo.
Los trabajadores de menor edad, y los que tienen una antigüedad en la empresa inferior a seis años, obtendrán un pago de 40 días del salario fijo bruto por año trabajado, con un límite de 36 mensualidades, y una prima (23.000 euros para empleados con más de seis años de antigüedad y 13.000 euros para empleados con menor antigüedad).
Un total de 8.246 empleados se adhirieron al ERE voluntario que acordaron CaixaBank con los representantes de los trabajadores, una cifra un 27,8% superior a las salidas voluntarias pactadas de 6.452 trabajadores.
A pesar de este porcentaje, la representación sindical señaló tras la primera comisión de seguimiento del ERE que existen provincias en las que no se había alcanzado el cupo de adhesiones previsto. Se trata de Almería, Asturias, Badajoz, Cáceres, Cantabria, Córdoba, Guadalajara, Huelva, Jaén, Las Palmas, León, Melilla, Murcia, Orense, Palencia, Pontevedra, Salamanca y Segovia.
En el área de negocio de servicios centrales aún no se habían alcanzado el cupo en áreas como contabilidad, control de gestión y capital, financiera, negocio, riesgos, Secretaría General y del Consejo y seguros, entre otros, según los datos aportados por los sindicatos.
Durante estas semanas, CaixaBank está estudiando las solicitudes e informará antes del 20 de septiembre a las personas solicitantes de la aceptación o no de su adhesión, pudiéndose en ese momento determinar una fecha estimada de salida. La representación sindical señala que la fecha de extinción del contrato se comunicará, en todo caso, con al menos 30 días de antelación.
La primera ventana de salidas se producirá el 1 de noviembre de 2021, mientras que las siguientes se realizarán cada dos meses. El plazo de ejecución de las medidas previstas en el acuerdo se extenderá, con carácter general, hasta el 31 de diciembre de 2022.
CaixaBank prevé un impacto de aproximadamente 1.900 millones de euros en sus cuentas del segundo trimestre como consecuencia del ERE, al tiempo que permitirá a la entidad obtener un mínimo de 770 millones de euros en sinergias de costes totales, en línea con los objetivos anunciados en la operación.