VALÈNCIA (EFE). Una administrativa de la EMT de València por la que deben pasar todas las facturas de la empresa pública antes de hacer ninguna transferencia estaba trabajando el día que empezó el fraude, pero la trabajadora que ha sido despedida por la estafa no le dijo nada.
Así lo ha explicado este miércoles la concejala de Compromís Pilar Soriano tras la reunión matutina de la comisión del Ayuntamiento de València que investiga el fraude de 4 millones de euros en la EMT, en la que han comparecido dos administrativas de la empresa pública.
Una de las administrativas ha declarado que por ella deben pasar todas las facturas de EMT antes de hacer ninguna transferencia y que la trabajadora despedida por el fraude, la ex jefa de administración, tenía que haberle pasado las facturas para que se aprobaran por la jefatura de área, pero no le comunicó nada.
Así, Soriano ha destacado que cuando empezó el fraude estaban trabajando las dos personas que realizan el trabajo previo al pago de una transferencia, pero la empleada despedida "ocultó en todo momento las facturas para que no se conciliase y se descubriese lo que estaba haciendo, además de no informar a nadie".
Según Soriano, con estas comparecencias "se ha cerrado el círculo para entender todos los procedimientos que se saltó la directora de administración y que posibilitaron el fraude contra la EMT".
Por su parte, el PP ha señalado que los nuevos testimonios en la comisión verifican "lo que decían las cuatro auditorías realizadas en la EMT de falta de mecanismos de control y de protocolos en los pagos" de la compañía.
"Cada vez queda más claro que no han fallado protocolos, sino que no existían", señala el PP en un comunicado, en el que añade que "solo se realizaba la conciliación bancaria al mes, y no al día ni a la semana" y que faltaban "cinco de las siete personas que conforman el departamento donde se produjo la estafa".
El PP destaca que si se hubieran puesto en marcha los protocolos en los pagos "se podría haber evitado el robo de los cuatro millones en las cuentas de la EMT", y considera que los gestores de la empresa pública "deben asumir ya responsabilidades".
El concejal de Ciudadanos Narciso Estellés ha indicado que, conforme baja la cadena de mando en las comparecencias, se constatan las "mentiras" contadas por el presidente de la EMT y concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, la jefa de Gestión, María Rayón, y el gerente, Josep Enric García.
Así, ha señalado que las nuevas comparecencias evidencian que no se conciliaba diaria ni semanalmente, sino mensualmente; que los controles previos a la tesorería los tenía Rayón, y que esta leía los correos, porque una de las administrativa ha constatado que del 16 al 23 de septiembre le leyó los correos electrónicos.
Rayón "mintió flagrantemente" al decir que no había abierto los correos hasta el 1 de octubre, ha señalado Estellés, quien ha vuelto a pedir el cese de la jefa de Gestión de la EMT.