VALÈNCIA (EFE). La Universitat Politècnica de València (UPV) ha puesto en marcha en su parque científico, la Ciudad Politécnica de la Innovación, una nueva sala limpia cuya actividad está centrada en la investigación fotónica, electrónica y química, que ocupa cerca de 500 metros cuadrados y se denomina UPVfab.
Esta iniciativa es fruto del trabajo conjunto de cinco institutos de investigación ubicados en la UPV: el Instituto de Telecomunicaciones y Aplicaciones Multimedia (iTEAM), el Instituto de Tecnología Química (IQT, UPV-CSIC), el Instituto de Instrumentación para Imagen Molecular (I3M, UPV-CSIC), el Centro de Investigación e Innovación en Bioingeniería (CI2B) y el Instituto interuniversitario de Investigación en Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico (IDM, UPV-UV).
Reconocida como laboratorio propio en la UPV, nace además como catalizador de la industria, para lo que ha impulsado un programa de empresas residentes a las que brinda sus instalaciones para el desarrollo de su actividad. La primera de las compañías del programa es VLC Photonics, y en los próximos tres años se espera incorporar una decena de empresas.
"Una instalación de este calibre no tiene sentido si, además de hacer I+D básica, no involucramos a la industria, para formar a los egresados del futuro y desarrollar los procesos tecnológicos que son de interés para la misma", destaca Pascual Muñoz, director de UPVfab.
Pese a la incertidumbre existente a nivel global en el suministro de componentes de semiconductor en particular y de materias primas en general, UPVfab cuenta con un plan de desarrollo y consolidación que incluye nuevo equipamiento y procesos tecnológicos y la consolidación del equipo humano del nuevo laboratorio, con el objetivo de convertirse en un potencial generador de nueva economía.
Según Muñoz, lo harán bien si, además de atraer más empresas, generan filiales basadas en desarrollos de UPVfab, al tiempo que ha reivindicado la necesidad de contar con pequeñas fábricas de chips en sectores en expansión, como la fotónica integrada.
Así, los investigadores de UPVfab, bajo contrato con Huawei Technologies Canada Ltd,. han desarrollado microchips para LIDAR, la tecnología base de la futura conducción autónoma. Además, participan en el Huawei Joint Research Center sobre 6G en el desarrollo de tecnología fotónica para los chips de RF del futuro.
En el área ingeniería electrónica, UPVfab colabora con AWSensors, una de las primeras empresas derivadas de la UPV, en el desarrollo de su nueva tecnología de biosensores de microbalanza de cuarzo para el mercado de la salud, según indican fuentes de la universidad.
Antonio Arnau, fundador de AWSensors, ha indicado que UPVfab "es clave para la validación y optimización" de sus nuevos "biosensores en array", que les permitirán "entrar en la medicina de precisión mediante el diagnóstico rápido y simple de mutaciones de cáncer relevantes para el tratamiento personalizado" de esta enfermedad y también de su evolución.
En el área de ingeniería química y la descarbonización de la industria de procesos, UPVfab se centra en la investigación en capas delgadas ("thin films") funcionales y/o protectoras, lo que permite realizar dispositivos a medida con capacidades y funcionalidades avanzadas.
Esos dispositivos hacen posible optimizar procesos industriales como la separación de gases, como H2, O2 o CO2, la conversión o almacenamiento de energía en pilas de combustible y electrolizadores, o la producción de compuestos con valor añadido en reactores electroquímicos.
Los conocimientos y desarrollos que se pueden lograr en las instalaciones son necesarios para incrementar e innovar en empresas filiales ya existentes, como es el caso de Kerionics, dedicada a la producción de membranas de estado sólido para la separación de componentes para la conversión y almacenamiento de energía.
Desde el punto de vista de caracterización de materiales, las instalaciones ya cuentan con varios equipos de alta prestaciones, tales como un elipsómetro, un espectrómetro IR a transformada de Fourier (FTIR) con alta resoluciones para el estudio fino de propiedades químicas de muestras del tamaño de una oblea de 6” hasta microestructuras de 5 micras.
A todos estos equipos se une toda una serie de equipamientos disponibles para el diseño y fabricación de muestras por fotolitografía y pulverización catódica de muestras tanto planares como tubulares, que permitirán, además de explorar nuevas líneas en I+D básica, un desarrollo para el escalado a nivel industrial.