València expropiará por 7,5 millones terrenos de Adif para 'retocar' el final de Blasco Ibáñez

VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València se prepara para la expropiación de terrenos de Adif -Administrador de Infraestructuras Ferroviarias- situados en uno de los extremos de la avenida de Blasco Ibáñez. La intención del gobierno municipal, conformado por Compromís y PSPV, es remodelar esta zona que finaliza en una glorieta y que en su momento fue motivo de gran controversia al querer el anterior gobierno local, que dirigía Rita Barberá, emplearlo para iniciar la prolongación de la avenida hasta el mar por encima del barrio del Cabanyal.

Aquella idea ha quedado ya desechada y el nuevo Plan Especial de Protección del Cabanyal (PEC), elaborado por la concejalía de Urbanismo que encabeza la socialista Sandra Gómez, ya no contempla la prolongación de la avenida sino la remodelación de este extremo de Blasco Ibáñez. Una actuación que contempla "una gran zona verde" alrededor de la estación de Adif "que ponga fin en el debate sobre el cierre de la avenida", según palabras de Gómez en su momento: "Blasco Ibáñez acabará ya por siempre jamás en la estación del Cabanyal".

La intención del gobierno local de Joan Ribó, como queda establecido en el PEC, es hacer mucho más cómoda la intersección entre la calle Serrería, la calle Marino Blas de Lezo, con la avenida, la estación ferroviaria central y la primera fachada del barrio del Cabanyal. Por ello, se pretende desplazar la glorieta que ahora rige la circulación en este punto hacia el oeste, acortando así la gran vía y dejando a un lado la estación de Adif.

De esta forma, sostiene Urbanimo, se pacificará la zona mediante una vía verde y será una zona más accesible y mucho más estética, dado que estará envuelta de una zona verde, más o menos como muestra la imagen inicial. Asimismo, en el espacio que da al conjunto de edificios del Cabanyal, se quiere dejar un espacio exclusivo para taxis.

El año pasado, Adif señaló en sus alegaciones al nuevo planeamiento del Cabanyal, y que afecta a esta zona, que podría tener una afectación en la visibilización del funcionamiento de la estación ferroviaria. Así como que el nuevo proyecto de "vía verde" debía tener en cuenta que por el subsuelo discurren las vías ferroviarias de Serrería que sirven de entrada y salida de los trenes procedentes y con destino en el norte de la ciudad.

Para esta actuación urbanística en la superficie era necesaria la expropiación de terrenos colindantes a la glorieta y que eran propiedad de la misma entidad ferroviaria. Por ello, el Ayuntamiento de València va a inyectar en el presupuesto municipal unos 7,5 millones de euros para este menester.

La modificación de crédito, anunciada este jueves por Ribó y por el concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, se financiará del total de 58 millones de ahorros municipales que se introducen ahora en el presupuesto. De ellos, 22,8 millones se dedicarán a expropiaciones donde se incluye, además de estos terrenos de Adif para urbanizar el final de Blasco Ibáñez, otros para ampliar el Parque de La Rambleta o para adecuar otras zonas verdes de la ciudad.

5 millones para adquisición de inmuebles

Además de todo eso, los ahorros municipales también se dedicarán a otros fines. Por ejemplo, se emplearán 5 millones de euros para la compra de inmuebles como nuevas viviendas o instalaciones para la ciudad. Una de estas adquisiciones en la que trabaja el Ayuntamiento, como adelantó este jueves Valencia Plaza, es la del Palacio de los marqueses de Montortal, ubicado en la céntrica plaza de Tetuán, que se pretende utilizar para la ampliación del Archivo Municipal, parte del cual se encuentra en el Palacio de Cervelló que linda con el edificio en cuestión.

La adquisición, por valor de 2,4 millones de euros, se quiere interviniendo una operación de compraventa privada, haciendo uso del derecho de retracto que regula la Generalitat Valenciana y que permite a las administración tener el derecho de compra preferente en casos de este tipo. Los restantes 2,6 millones se guardarán para ejercer el mismo derecho en la compra de otros inmuebles a lo largo de este año, así como para el antiguo edificio de Hacienda, en cuya compra también trabaja el consistorio.