VALÈNCIA (EP). El Ayuntamiento de València prepara el Pla d'Infraestructura Verda i Biodiversitat de València 2020-2050, con el que pretende "reverdecer" la capital del Túria con medidas como la creación de jardines en los terrados de los edificios de la ciudad, corredores verdes que conecten los diversos parques y barrios de la capital o bosques urbanos que se integren a través de las especies propias del ecosistema mediterráneo.
Así lo han anunciado este jueves el alcalde de València, Joan Ribó, y el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, durante la presentación del Pla d'Infraestructura Verda i Biodiversitat de València 2020-2050, para la que se ha escogido el "último gran parque de la ciudad y ejemplo de inserción" en el entorno, el Parque Central.
El objetivo de esta iniciativa, que está todavía en desarrollo y que espera contar con la participación de la ciudadanía, es "hacer de la ciudad un espacio saludable" y tomar medidas que fomenten la "resiliencia" de València ante el cambio climático. En este sentido, el alcalde se ha preguntado "qué València vamos a dejar a nuestros hijos y nietos" y ha abogado por "hacer frente" a la emergencia climática.
Asimismo, ha citado al cantautor setabense Raimon para apuntar que "venimos de un silencio antiguo y muy grande" en este campo, ya que ha explicado que se diseñó un plan verde para la ciudad en 1994 y "se guardó en un cajón". En este sentido, ha lamentado que esta idea se ponga en marcha con "25 años de retraso" y ha puesto de relieve que en los últimos cuatro años de gobierno del PP en la ciudad se invirtió "poco más de tres millones de euros" en estas políticas, frente a los nueve del actual equipo de gobierno en el mismo plazo.
El primer edil ha denunciado que "la situación climática es alarmante" y "los parques son elementos de resiliencia frente al cambio climático". De este modo, ha apostado por "crear entornos saludables, deslocalizados y cercanos a los barrios". "Crear resiliencias ante el cambio climático. Renaturalizar la ciudad. Lograr una ciudad más verde y con más diversidad", ha sintetizado.
Entre los proyectos que contempla este plan para lograr estos fines, Ribó ha indicado que pretenden crear una "red ecológica de espacios y corredores verdes". Se trata de "enlaces verdes" entre barrios y parques, además de diseñar "conexiones" con los entornos naturales próximos, como L'Albufera, la huerta o el parque natural del nuevo cauce del Túria. Sobre esto último, ha señalado que el nuevo cauce "se pasa 340 días aburrido y desaprovechado" y ve factible utilizar este espacio para generar corredores verdes y otras iniciativas.
Sin embargo, preguntado por cuándo se abordará este proyecto, ha subrayado que la Confederación Hidrográfica del Júcar depende del Gobierno central: "Se tienen que aclarar y entonces entraremos en juego. Se ha hecho en otros ríos y es perfectamente posible. No queremos interferir en su principal función, transportar el agua", ha indicado.
Para lograr una "València más verde", el alcalde ha asegurado que quieren "plantar más árboles" y aprovechar los alcorques como "lugares de renaturalización". Campillo ha añadido que ya se están plantando 3.000 árboles en los alcorques sin uso y el objetivo es "llenar todos". "Se trata de levantar asfalto y plantar árboles", ha resumido el edil.
En el área que han denominado de servicios ambientales y sociales, la idea del consistorio es crear una Oficina Verde que asesore a los vecinos de la ciudad en todo lo relacionado con esta temática. También se busca "combatir las islas de calor" que se generan en la urbe y, a colación, ha destacado que en el viaje cauce del Túria la temperatura es unos dos grados inferior al de otros puntos de la ciudad.
Otras medidas son la "pacificación del tráfico", para lo que se seguirá ampliando la red de carril bici, y trabajar con institutos tecnológicos para lograr que el suelo absorba el agua de la lluvia y evitar así catástrofes naturales. Todo ello, ha subrayado, en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Por su parte, Campillo ha sintetizado la voluntad de este plan de 30 años en "conseguir una ciudad más verde" porque, pese a que espacios de este tipo "han aumentado mucho" --ha puesto como ejemplo el parque de Malilla, el lineal de Benimàmet o el propio Parque Central--, se trata de "llenar los huecos de la ciudad con verde" por medio de "zonas verdes interconectadas entre ellas y con los parques y los barrios". "Serán conexiones naturales para las personas y para los animales", ha agregado.
Además, ha profundizado en esta idea y ha puesto como ejemplo que se construirán jardines verticales por la ciudad, así como también jardines en los terrados de los edificios, que se pueden aprovechar también para instalar huertos urbanos o placas solares. "Hay mucho espacio desaprovechado en la altura", ha incidido.
Igualmente, ha invitado a los ciudadanos de València a "reverdecer la ciudad a través de los balcones" y ha invitado a que los vecinos saquen sus plantas a sus terrazas e incluso a la calle. "Se trata de bajar de temperatura de la calle y mejorar el paisaje", ha agregado.
Otro de los objetivos que contempla este Pla d'Infraestructura Verda i Biodiversitat de València 2020-2050 es la "renaturalización" y la "biodiversidad" urbana y, para ello, se va a apostar por "recrear hábitats naturales en la ciudad". También dentro de València se fomentará la agricultura ecológica y los huertos urbanos.
Tras la presentación de este plan para lograr una "València verde", Ribó ha sido preguntado por si estas iniciativas no se contradicen con otras como el Pla d'Actuació Integrat (PAI) de Benimaclet, sobre el que las asociaciones vecinales han planteado sus reticencias. Al respecto, el alcalde ha asegurado que al Gobierno municipal le parece "exagerada la superficie a construir" pero ha lamentado que "no se puede parar gratis", sino que "saldría muy caro al Ayuntamiento".
"Estamos abiertos a estudiarlo y continuaremos trabajando para una solución viable económicamente y consensuada", ha concluido el primer edil.