VALÈNCIA. Hay pueblos donde cambiar de alcalde parece tan improbable como ver nevar en agosto. Municipios en los que la alternancia política no se discute porque, de una manera u otra, nunca ha ocurrido. Aunque el fenómeno no tiene un nombre oficial -podría clasificarse como una especie de "síndrome del alcalde vitalicio"-, se da, sobre todo, en pequeñas localidades, donde un político que "siempre ha estado ahí" es el mejor programa electoral. 

Algunos de estos ediles llevan al frente de sus ayuntamientos desde los años ochenta. Asumieron el cargo cuando la democracia apenas empezaba a andar y, desde entonces, no han dejado de revalidar su puesto. Eso sí, no es la norma. La política local también conoce sobresaltos: mociones de censura, rupturas entre socios o candidaturas independientes que irrumpen y desbancan décadas de hegemonía. Porque, si algo enseña el poder municipal es que, por muy largo que sea el mandato, ninguna silla está completamente asegurada.

15.000 días siendo alcalde

Josep Almenar es, sin duda, el primer edil más longevo de la Comunitat Valenciana. El alcalde de Picanya empezó su carrera política como concejal de este municipio en 1979 y en 1983, con 35 años, fue elegido alcalde de Picanya. 

Casi 15.400 días, 11 legislaturas y 44 años son los que Almenar lleva ostentando la vara de mando en este municipio de l’Horta Sud y, a sus 77 años, en una entrevista reciente con este periódico, aseguró que se volvería a presentar a la alcaldía de Picanya si su partido así lo quería. 

En Aielo de Rugat, Jaime Soler lleva como alcalde desde 1987, cuando el Partido Popular todavía era Alianza Popular. Siempre ha mantenido la mayoría absoluta y, desde las elecciones de 2003, sin oposición alguna. En este municipio de alrededor de 160 habitantes en la Vall d’Albaida, Soler ganó las elecciones del 2023 con 71, frente a los 30 del PSPV –que solo obtuvo 9 votos en los anteriores comicios de 2019–. 

El PSPV aglutina la mayoría de los ediles longevos

La mayoría de alcaldes que acumulan más de cinco legislaturas al frente de sus municipios lo hacen en pueblos pequeños, donde la política se vive más de cerca y los liderazgos se consolidan con el tiempo. En estas localidades, el vínculo entre alcalde y vecindario va más allá del partido: se construye sobre la convivencia y la gestión diaria. Entre los casos más significativos, destacan municipios gobernados por ediles del PSPV, el partido con mayor presencia entre los alcaldes longevos.

Por ejemplo, en l’Alqueria de la Comtessa (La Safor), Salvador Femenia gobierna desde 1999. Con siete legislaturas a sus espaldas, revalidó el cargo en 2023 con mayoría absoluta y un 61,5% de los votos. También en Los Serranos se encuentran dos casos muy representativos: en Gestalgar, Raúl Pardos recuperó la alcaldía para el PSPV en 2003, tras tres mandatos del Partido Popular (PP) y, desde entonces, ha mantenido el cargo de forma ininterrumpida. 

Por su parte, en Titaguas, Ramiro Rivera lleva desde 1999 encadenando mayorías absolutas. En las municipales de 2019 su candidatura superó el 70% de los votos y, además, ha tenido una intensa trayectoria institucional: fue presidente de la Mancomunidad del Alto Turia y diputado provincial en áreas como Desarrollo Rural y Memoria Histórica, bajo la gestión de Toni Gaspar en esta institución. 

En el Camp de Túria, María Dolores Celda es la figura socialista de mayor trayectoria. Celda es alcaldesa de Marines desde 2003, aunque también lo fue entre 1995 y 1999, y ha desempeñado otros cargos de relevancia en la comarca: al frente de la Mancomunitat del Camp de Túria y como secretaria general del PSPV en esta comarca, un cargo que en la actualidad ocupa la alcaldesa de Benissanó, Amparo Navarro. 

Tous y Benaguasil, dos plazas históricas del PP

El Partido Popular también cuenta con alcaldes que llevan décadas gobernando. Uno de los más consolidados es Cristóbal García, primer edil de Tous (La Ribera Alta) desde 1999. Su última victoria, por la que reunió el 65,4% de los votos y seis de los nueve concejales del pleno, evidenció que su gestión resiste el desgaste del tiempo.

En Benaguasil, también en el Camp de Túria, Ximo Segarra ha encadenado seis legislaturas consecutivas al frente del ayuntamiento desde 2003, manteniendo la plaza como uno de los bastiones tradicionales del PP en la comarca. 

Marcas de carácter local

Más allá de los grandes partidos tradicionales, en la provincia de Valencia también hay cabida para otras marcas de carácter local. En este sentido, el caso de Jordi Vila, en El Palomar (La Vall d’Albaida) es particular. Fue elegido alcalde por primera vez en 1999, entonces bajo las siglas del PSPV. En 2019, se presentó con Ens Uneix, la formación impulsada por Jorge Rodríguez, alcalde de Ontinyent, y logró mantener la vara de mando. Además de su puesto al frente del consistorio, ha asumido las competencias de Servicios Municipales, Personal, Urbanismo y Turismo.

Por último, en Palmera (La Safor), Álvaro Català acumula más de veinte años como alcalde. Su trayectoria arrancó con el Bloc Nacionalista Valencià y ha continuado bajo las siglas de Compromís. En 2019, obtuvo un rotundo 74,1% de los votos, lo que le permitió gobernar con tranquilidad durante su penúltimo mandato. Es uno de los alcaldes con más recorrido dentro de la coalición valencianista.

En los municipios más grandes no superan las 4 legislaturas

Sin embargo, en los municipios más grandes o con más peso poblacional de la provincia de Valencia, los alcaldes actuales no han superado todavía 4 legislaturas al frente de sus ayuntamientos. Aun así, algunos ya acumulan alrededor de 16 años gobernando estas pequeñas ciudades, situadas en su mayoría en el área metropolitana de València.

Carlos Fernández Bielsa dirige el Ayuntamiento de Mislata desde 2011, tras lograr un importante triunfo para los socialistas en un municipio con mucha densidad poblacional, que el PP gobernó durante una década. Desde entonces, Bielsa -que también es secretario provincial del PSPV y portavoz en la Diputación de Valencia- ha encadenado mayorías absolutas que hoy en día parecen difíciles de superar.

En el cinturón rojo que es l’Horta Sud y toda el área metropolitana, otra de las veteranas socialistas es la alcaldesa de Picassent, Conxa García, que gobierna desde 2003 y ha logrado mayorías absolutas desde 2011 hasta las últimas elecciones de 2023, en las que perdió dos concejales.

Sin embargo, frente a un PSPV tan arraigado, los populares no pierden fuerza en otros municipios, como Alfafar o Massanassa. Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar, lleva 14 años gobernando y se ha consolidado como un referente del PP provincial. En Massanassa, aunque el actual alcalde, Paco Comes, suma tres legislaturas, el PP gobierna el municipio desde 2001: casi 25 años ininterrumpidos.

Más allá del área metropolitana, en Ontinyent, otra de esas ciudades grandes con un alcalde longevo, Jorge Rodríguez gobierna desde 2011. Rodríguez fue alcalde por el PSPV, pero abandonó el partido tras ser imputado en el llamado "caso Alquería". El alcalde creó su propia marca, la Vall Ens Uneix, con la que lidera este consistorio de la Vall d’Albaida desde 2019. 

Según la información que ha recopilado la plataforma Newtral, en España hay cuatro municipios que conservan al mismo alcalde desde las primeras elecciones municipales democráticas, celebradas en 1979. Se trata de Francisco Arjona en Rada de Haro (Cuenca), Salvador Pérez en Villarroya (La Rioja), José Furones en Brime de Urz (Zamora) y Lucas Aguado en Roturas (Valladolid).