VALÈNCIA. El puerto deportivo de La Pobla de Farnals podría afrontar en los próximos años una renovación integral valorada en 24,1 millones de euros. La propuesta parte de la empresa Explotaciones Marítimas de Levante, S.L., que ha solicitado a la Generalitat Valenciana una concesión de 35 años para ocupar y explotar la instalación. En consecuencia, la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio ha abierto un periodo de información pública de un mes, tras el cual se decidirá el futuro del puerto. 

Según explican fuentes de este departamento a Valencia Plaza, si ninguna otra compañía presenta un proyecto alternativo, la Generalitat adjudicará directamente la concesión a Explotaciones Marítimas de Levante. En cambio, si aparecen otras ofertas, se elaborarán unos pliegos de condiciones y se convocará un concurso público para seleccionar la mejor propuesta. 

El plan presentado por Explotaciones Marítimas de Levante supone una remodelación en profundidad de las instalaciones náutico-deportivas e incluye un conjunto de obras que van desde la renovación de muelles y pantalanes hasta la modernización de los accesos y servicios básicos del recinto portuario. Entre las actuaciones más destacadas, figura el dragado interior del puerto, con el objetivo de recuperar las profundidades de diseño y facilitar la maniobra de las embarcaciones. 

Asimismo, se proyecta la reparación del dique de abrigo y la remodelación de las estructuras de atraque, lo que implicará la renovación completa del muelle de ribera y la construcción de un nuevo muelle norte. Por otra parte, el proyecto contempla la ampliación del área de carena, con un nuevo pavimento de hormigón, un sistema de recogida de aguas pluviales más eficiente y la instalación de equipos renovados para la varada y botadura de las embarcaciones. 

En paralelo, se propone la instalación de nuevas torretas para suministro de agua y electricidad, así como la modernización del alumbrado y de la red de telecomunicaciones. Sin embargo, la reforma va más allá de lo estrictamente portuario. El plan plantea una reurbanización integral del interior del recinto, con nuevos viales y paseos peatonales, la creación de una rotonda de acceso y la ampliación del itinerario junto a la lámina de agua para integrarlo con el paseo marítimo. 

Además, se prevé la colocación de marquesinas fotovoltaicas en los aparcamientos, estaciones de recarga para vehículos eléctricos, así como la remodelación exterior de la escuela de vela y de los locales comerciales. En cuanto a nuevas construcciones, el proyecto incluye la creación de un edificio de Capitanía y servicios náuticos, que albergará oficinas, almacenes y talleres; así como dos nuevos módulos de vestuarios que se distribuirán en distintas zonas del puerto.

Un puerto estratégico en l'Horta Nord

El puerto deportivo de La Pobla de Farnals ocupa una superficie de más de 108.000 metros cuadrados y, en la actualidad, cuenta con cuatro muelles principales; nueve pantalanes; una galería comercial; talleres; zona de varada y una escuela de vela. Con varias décadas de historia, la infraestructura se ha consolidado como un referente de la náutica recreativa en la costa norte de València y un motor de actividad tanto turística como económica para la comarca de l'Horta Nord.

La reforma propuesta no solo busca actualizar unas instalaciones envejecidas, sino también adaptarlas a las nuevas exigencias del sector náutico y a los retos medioambientales. "Se pretende un puerto más moderno, eficiente y abierto a la ciudadanía", aseguran fuentes de la Conselleria, que subrayan la voluntad de integrar mejor el recinto con el litoral y el paseo marítimo de La Pobla de Farnals.

Desde este departamento, recuerdan que la última reforma legal de la Ley de Puertos de la Generalitat obliga a que cualquier competidor presente una declaración de interés; un proyecto básico; un estudio económico-financiero y un aval superior a los 723.000 euros, como el que ya ha depositado Explotaciones Marítimas de Levante. Así, el futuro del puerto queda abierto a un posible proceso de concurrencia, que podría ampliar las opciones de inversión y definir cómo se transformarán estas instalaciones en los próximos años.