VALÈNCIA. Quart de Poblet se suma al mapa de municipios que albergan instalaciones de energías renovables. La empresa Bener Solar ha iniciado los trámites para construir una planta fotovoltaica híbrida, a la que ha bautizado como "Quart II", en varias parcelas del término municipal, sobre suelo rústico no urbanizable.
La instalación prevé una potencia de 13.304 kVA y un sistema de baterías que permitirá almacenar más de 10.000 kWh de energía, lo que facilitará la conexión estable a la red eléctrica. La iniciativa ha abierto ahora su fase de participación pública, centrada en el impacto que esta infraestructura podría tener sobre el paisaje.
Por tanto, la ciudadanía dispone de 30 días para consultar el plan y trasladar sus observaciones. El trámite, habitual en este tipo de actuaciones, forma parte del Estudio de Integración Paisajística que la empresa debe presentar antes de obtener los permisos definitivos. Según el documento publicado por la empresa de ingeniería encargada del proyecto, la planta se ubicará sobre varias parcelas agrícolas situadas entre los polígonos 13 y 29 de Quart de Poblet, junto al término de Manises.
De acuerdo al plan urbanístico vigente, esos terrenos están clasificados como suelo no urbanizable, aunque el uso fotovoltaico no está expresamente prohibido, lo que permite que la instalación se tramite. Además, parte de la superficie afectada se encuentra dentro de zonas consideradas inundables, pese a que el proyecto evita las áreas de mayor riesgo.
Así será la nueva planta solar de Quart de Poblet
La instalación contará con placas solares móviles que siguen el movimiento del sol para captar más energía. Además, tendrá un sistema de baterías que almacenará esa electricidad para inyectarla en la red cuando sea más útil. Toda la infraestructura se concentrará en una zona central, con transformadores e inversores colocados sobre plataformas de hormigón.
La conexión con la red eléctrica se hará a través de una línea subterránea, lo que evitará la construcción de torres o cables aéreos y reducirá el impacto visual. La energía se enviará a una subestación próxima, sin pasar por zonas sensibles ni afectar a espacios protegidos.
La superficie total de actuación abarca algo más de 75.000 metros cuadrados, de los cuales unos 22.000 estarán ocupados por los módulos solares. Las edificaciones auxiliares serán prefabricadas y de una sola planta. Asimismo, se prevén accesos mediante viales interiores para mantenimiento y operación.
Este tipo de plantas se están multiplicando en la Comunitat Valenciana dentro del plan autonómico para fomentar las energías renovables y reducir la dependencia de combustibles fósiles. Aunque no se trata de una instalación de gran tamaño, sí incorpora una tecnología más avanzada que las plantas solares tradicionales, al incluir un sistema de almacenamiento con baterías.
En este caso, la iniciativa busca compatibilizar la generación energética con el respeto por el paisaje, al menos en términos visuales y de ocupación del suelo. Según especifica el documento, no hay afecciones a espacios protegidos ni a la red Natura 2000.