VALÈNCIA. El servicio de bomberos del Consorcio Provincial de Valencia pasa por sus horas más bajas, con la huelga más larga hasta la fecha. La plantilla se niega a hacer horas extra y la falta de acuerdo entre sindicatos y los representantes del Consorcio, dependiente de la Diputación de Valencia, amenaza con cronificar el paro en plena temporada estival. Ya se deja notar en servicios ordinarios, cuya atención ha empeorado. "Nos gustaría llegar a un acuerdo, la situación está repercutiendo en la seguridad de los ciudadanos", reconoce uno de los miembros de la junta de personal del Consorcio, Helíos Martín.
El conflicto laboral estalló el pasado mes de junio, cuando la plantilla de bomberos acordó iniciar una huelga al no ver satisfechas sus demandas de mejoras laborales y de un compromiso firme por parte de la corporación provincial para poner en marcha un plan de inversiónes creíble. Los paros, iniciados el 28 de junio, se han mantenido hasta la fecha y no hay visos de que finalicen, al menos de momento.
Este mismo martes, los bomberos se concentraron de nuevo para insistir en sus reivindicaciones. Y lo hicieron durante las fiestas de Xeraco. De allí es precisamente el diputado provincial encargado del Consorcio Provincial de Bomberos, Avelino Mascarell, que ostenta la alcaldía en el municipio. La manifestación, de más un centenar de bomberos, se llevó a cabo durante una 'mascletà', "un evento relacionado con los planes de prevención que hacemos", explica Martín. La idea de la plantilla es preparar un calendario de concentraciones de cara a las próximas semanas.
Así pues, la situación, lejos de desbloquearse, sigue con las posturas todavía distantes. Este lunes, la asamblea de bomberos acordó, con el apoyo del 77% de los votos, rechazar la última oferta del Consorcio presentada la pasada semana, como publicó Levante-EMV. El planteamiento del área de Bomberos, que dirige el diputado Avelino Mascarell, suponía un incremento de más de 6 millones de euros para la partida de personal del Consorcio a aplicar de manera progresiva durante los próximos tres ejercicios.
La plantilla califica de insuficiente el ofrecimiento de la Diputación porque incumple el preacuerdo alcanzado el pasado mes de marzo. Aquel, señala el miembro de la Junta de Personal, era "muy interesante porque establecía jornadas de trabajo adecuadas, se hablaba de un incremento de la plantilla y de establecer más efectivos en las guardias". Sin embargo, esta propuesta, que suponía un incremento presupuestario de 9 millones de euros, no se pudo llevar a cabo al frenarla el interventor de la corporación por inviable.
El habilitado advirtió en uno de sus informes que el preacuerdo suscrito entre ambas partes haría que la Diputación incumpliese el techo de gasto, el máximo que las administraciones locales pueden incrementar su presupuesto cada año. Esta es la principal razón que esgrime la institución provincial que dirige Vicente Mompó para no cumplir con lo prometido. En ese sentido, Martín insiste en que "fueron ellos", los responsables provinciales, "los que trajeron el acuerdo y los que, más tarde, nos lo quitaron, y eso es lo que derivó en este conflicto".
Los representantes sindicales reclaman una mejora en las condiciones laborales y un aumento de personal que acabe de una vez por todas las carencias de la plantilla, pero no sólo eso. Así, uno de los puntos relevantes de las reivindicaciones tiene que ver con los equipamientos con los que cuentan los bomberos provinciales. "Necesitamos un compromiso de inversión en compra de camiones y material, y que vaya acompañado de un presupuesto real para que no quede en papel mojado", explica Martín, para lamentar que el Consorcio solo les haya presentado un listado de actuaciones "que se están haciendo ahora" pero sin "una hoja de ruta seria y con un informe económico que la respalde".
"No podemos sortear los límites legales"
Este lunes, el diputado de Bomberos, Avelino Mascarell, remitió una carta a la plantilla para intentar acercar posturas pero insiste en que "los condicionantes legales y presupuestarios son claros y no pueden ser sorteados de ninguna manera". "Apelamos a una reflexión conjunta que permita reconducir el diálogo en beneficio de todas las partes, asumiendo los límites que nos marca la ley y evitando que el actual escenario de confrontación perjudique al servicio público que prestamos y a la imagen del colectivo", apunta la misiva.
Según Mascarell, la última oferta es "el máximo al que puede llegar el Consorcio desde el punto de vista técnico y económico" y recuerda que tanto el preacuerdo de marzo como lo que reclaman los sindicatos "no pueden materializarse "tal como recogen los sucesivos informes elevados por el área de Intervención de la Diputación, que también expuso públicamente en el último pleno de la institución".
A ello añade que, según el área de Recursos Humanos del Consorcio, la directiva europea sobre protección del trabajador nocturno es aplicable al colectivo de bomberos, y que es una condición que "ya se cumple" debido a los periodos de descanso semanal establecidos, por lo que "no resulta necesario aplicar coeficientes reductores que implicarían una disminución del número de guardias".
El escrito defiende la última oferta, que incluye "mejoras significativas en la dotación de refuerzos para fenómenos meteorológicos adversos, la armonización económica entre categorías, incrementos retributivos progresivos, la implantación del sexto turno y la ampliación de mínimos en los parques principales". Y afea que los sindicatos no hayan remitido "una propuesta económica y jurídicamente viable, debidamente valorada con el rigor necesario para poder ser analizada y negociada en condiciones".
Hasta cuatro parques cerrados por la huelga
Lo cierto es que los paros ya están afectando a servicios ordinarios como consecuencia del cierre de algunos parques de bomberos en la provincia de Valencia. De los 17 parques existentes, hay entre dos y cuatro cerrados a causa de la huelga, según datos ofrecidos por los sindicatos. Esto hace que no se esté prestando el mismo servicio a la ciudadanía: "A la hora de dar respuesta a emergencias cotidianas, al haber menos dotaciones, si surgen nuevas emergencias, no se pueden atender.
Por ejemplo, un reciente incendio registrado en una vivienda de Moncada, a apenas cinco minutos del parque de bomberos, contó con una respuesta de 16 minutos al tener que acercarse efectivos de instalaciones más alejadas. Es el caso también de un accidente de tráfico con atrapados en el municipio de Oliva, donde la base estaba también sin funcionamiento por los paros, lo que obligó a que tuvieran que desplazarse efectivos de Gandía y de la provincia de Alicante.
La falta de vehículos en altura también provocó que, ante la necesidad de un rescate por fractura de cadera en un edificio de Sagunto, tuviera que ser avisado el parque de Paterna, con el consiguiente retraso que eso provocó. "No son cosas que tienen mucha visibilidad, pero los ciudadanos lo están sufriendo", apunta a este respecto el miembro de la Junta de Personal, quien insiste en su voluntad de llegar a un acuerdo.
"Me gustaría decir que llegaremos porque la situacion repercute en la seguridad de los ciudadanos", apunta: "Estamos dispuestos a cerrar un acuerdo pero la Diputación tiene que proponer un plan serio, con inversiones que permitan la modernizacion del Consorcio y que no se aborde en cuatro años, no podemos demorar una mejora de un servicio que es esencial".