VALÈNCIA. Varios diputados provinciales han procedido a colgar sus títulos universitarios en la web de la corporación provincial tras la información publicada por este diario el pasado martes respecto a que sólo cinco de los 31 miembros del pleno tenía esta documentación subida en la página institucional. Una cuestión que ha cobrado especial importancia después de las dos dimisiones ocurridas recientemente: Noelia Núñez (PP), por mentir en su currículum, y José María Ángel (PSOE), por un posible fraude en uno de sus títulos. 

Inicialmente, la alcaldesa de Torrent y diputada popular, Amparo Folgado; y los socialistas Jorge Vidal, Nuria Campos y Lola Celda, eran los únicos cuyas titulaciones universitarias figuraban en la web. A ello había que sumar al alcalde de Alfafar, Juan Ramón Adsuara (PP), que al no haber finalizado enseñanzas superiores sí aportaba diferentes cursos y diplomas cursados. Tras la información publicada, otros diputados como Laura Sáez (PP) y Rafa García (PSPV), incorporaban sus titulaciones universitarias en Derecho y Geografía e Historia respectivamente.

Un goteo que ha continuado en últimas horas. Así, los títulos universitarios de los tres diputados de Compromís, Dolors Gimeno; Josep Antoni Riera y Pau Andrés, respectivamente licenciados Derecho, Filología e Historia, figuraban ya en la web de la Diputación en la mañana de este jueves, además de otras acreditaciones de másters cursados.

No fueron los únicos. La vicepresidenta segunda de la Diputación, Reme Mazzolari (PP), también subió en las últimas horas su título universitario de Ingeniería Industrial expedido por la Universitat Politècnica de València (UPV). No obstante, todavía quedan una docena de diputados con estudios superiores que no han dejado la constancia documental de su trayectoria, si bien algunos de ellos han mostrado pruebas de sus titulaciones a este diario en privado, por lo que se entiende que en los próximos días la página de información en la web de la institución se irá completando.

La Diputación defiende que no es obligatorio colgar los títulos aunque asegura que se hizo y se hará

Por otro lado, fuentes del equipo del presidente de la corporación, Vicente Mompó (PP), puntualizaron a este diario que la Ley de Transparencia de 1/2022 no obliga a las administraciones locales a subir los currículums de los altos cargos de forma concreta. Así, si bien es cierto que el artículo 15 de este texto establece que los responsables políticos (entre otros cargos) deberán publicar "la reproducción gráfica acreditativa de los principales méritos de su currículo, sin perjuicio de la posibilidad de acreditación por cualquier otro medio que permita tener constancia de su veracidad" y el artículo 3 se menciona por dos ocasiones (3d y 3.2) a las entidades integrantes de la administración local (donde podrían incluirse ayuntamientos y la propia Diputación), existe una excepción para estas instituciones respecto a los sujetos obligados al cumplimiento, según se refleja en el artículo 10.2. 

Un apartado que reza lo siguiente: "Las obligaciones de publicidad activa aplicables a las entidades que forman la administración local de la Comunitat Valenciana son las previstas en los artículos 6, 7 y 8 de la Ley 19/2013". Un texto legislativo de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno donde, entre otras exigencias, se solicita que se identifique "a los responsables de los diferentes órganos y su perfil y trayectoria profesional", si bien no se solicita de forma específica la acreditación de su titulación. En este sentido, desde la Diputación, aportaron un ejemplo de una resolución del Consell de Transparencia sobre las exigencias reclamadas en el Ayuntamiento de San Antonio de Benagéber. 

No obstante, más allá de este debate sobre la obligatoriedad, fuentes del equipo de Mompó insistieron en que la "gran mayoría de títulos" estaban colgados con anterioridad y recordaron, tal y como publicó este diario, que en las últimas semanas se había producido una migración en la web que habría podido influir en la pérdida de información que, ahora, está volviendo a restaurarse, por lo que lamentaron las sospechas apuntadas desde el grupo socialista respecto a que se hubiera podido producir un borrado "a conciencia".