VALÈNCIA. El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, anunció este martes un paquete de ayudas directas y "sin burocracia" para los afectados por la Dana por valor de 350 millones de euros. La clave para esta celeridad es que los beneficiados serán los que ya hicieron el papeleo correspondiente para obtener algunas de las contribuciones puestas en marcha por el Gobierno valenciano en los meses posteriores a la catástrofe. De esta manera, personas que perdieron sus vehículos, con daños en sus viviendas, autónomos, afectados por los ERTE... verán nuevos ingresos en sus cuentas antes del próximo 15 de octubre.
Una medida que va directamente de las arcas públicas, financiada en este caso a través de la deuda permitida en marzo por el FLA del Gobierno de España por un montante total de 2.364 millones de euros, al bolsillo de los valencianos damnificados por la catastrófica Dana que costó la vida a 228 personas e innumerables daños materiales. Una inyección económica que, en total, llegará a más de 40.000 hogares y 87.000 propietarios de coches, 12.000 trabajadores que estuvieron afectados por un ERTE y 18.000 autónomos sin empleados, según los datos ofrecidos por la Generalitat.
De esta manera, el jefe del Consell daba este lunes el pistoletazo de salida al nuevo curso con un gesto de aproximación a los damnificados de la Dana, que contiene además un indudable objetivo político de fondo: iniciar la carrera para repetir como candidato a la Generalitat. Una posibilidad que desde la oposición, pero también desde una parte relevante de la opinión pública y de su propio partido, veían imposible e irreal hasta hace bien poco. Pero, ahora, no lo parece tanto, o al menos así lo creen en el Palau.
Apenas hace tres meses y medio, tal y como publicó este diario, Alberto Núñez Feijóo meditaba de manera seria la arquitectura para el relevo de Mazón al frente de la Generalitat. Sin embargo, el golpe sufrido por Pedro Sánchez con el estallido definitivo del 'caso Koldo', la propia labor de resistencia de Mazón y las dificultades políticas para relevarle por el necesario apoyo de Vox, han ido alejando esa posibilidad. Algo que el líder del PPCV ha aprovechado para rearmarse y exprimir sus posibilidades para ser otra vez el cabeza de cartel en las elecciones autonómicas que, si no hay adelanto, deben celebrarse en 2027.
¿Qué hacer para despejar el horizonte? Dado que el pecado original de Mazón se sitúa en su gestión el día de la Dana y, probablemente donde suscita el mayor rechazo sea en la zona más afectada, l'Horta Sud, el presidente viene centrando sus esfuerzos en mostrarse implicado en la labor de reconstrucción. Y al mismo tiempo, esto resulta fundamental, contraponiendo sus medidas a las del Gobierno de España. Este martes lo volvía a hacer con una frase que ha hecho fortuna en el relato político del PP, al señalar que el objetivo con estas contribuciones directas por 350 millones era pasar del "si necesitan ayuda, que la pidan" -una frase textual atribuida a Pedro Sánchez tras la Dana que realmente nunca pronunció- a "como sabemos que la necesitan, aquí la tienen".
Más allá del tira y afloja entre ambas administraciones, la iniciativa de Mazón, con ayudas directas ingresadas en la cuenta en tiempo récord, busca progresar en la reconciliación con una enorme bolsa de votantes; especialmente en vísperas del primer aniversario de la tragedia (el 29 de octubre) y cuando se ha entrado ya de lleno en la segunda mitad de la legislatura sin fecha asegurada para las elecciones autonómicas. Una estrategia, la de impulsar ayudas económicas directas a la ciudadanía, que no es una rareza en política: por ejemplo, Rodríguez Zapatero ya lo aplicó con el cheque-vivienda a seis meses de visitar las urnas o, en otra modalidad, con el anuncio de la deducción de 400 euros del IRPF a los contribuyentes en vísperas de los comicios de 2008.

- Carlos Mazón, este martes durante su declaración institucional. Foto: EP/Eduardo Manzana
La diferencia, en este caso, es que Mazón todavía no tiene a la vista las elecciones, pero en contraste tiene mucho terreno por recuperar en cuanto a su crédito en las zonas afectadas. Es por ello que el presidente de la Generalitat, tal y como deslizó este martes, no se va a limitar a este paquete de ayudas, sino que planea anunciar otros más adelante, lo que pone de manifiesto que su intención es la de centrar todo el músculo financiero que le sea posible en la estrategia de respaldo económico constante y directo hacia los damnificados, en un intento de revertir o en todo caso amortiguar el descrédito en un área habitada por unas 850.000 personas, si atendemos al número de habitantes de los 68 municipios más afectados por la Dana.
De esta manera, y aunque la estrategia de las ayudas directas probablemente sea insuficiente para recuperar la confianza de muchos sectores de la población de la zona, la idea para relanzar la posibilidad de que Mazón sea candidato es la de combinar estos movimientos enfrentándolos a los del Gobierno de España, con menor agilidad administrativa para este tipo de medidas, además de buscar el acuerdo con Vox para lograr volver a aprobar los presupuestos. Todo ello probablemente aderezado con una remodelación del Consell con el ánimo de dar la imagen de impulso a la recta final de la legislatura. Una hoja de ruta cuyo primer paso se produjo este martes y que evidencia nítidamente que el presidente de la Generalitat va a por todas en su objetivo de repetir como candidato: su único freno posible, al margen de alguna grave novedad informativa o judicial, sería que el presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, tenga encuestas en la mano que reflejen que la oposición tendría más opciones de remontar si Mazón es el candidato.